FERIA DE VIC-FEZENSAC, 2021 (5). CORRIDA CONCURSO:

 NO VAMOS BIEN

Si lo único medio bueno de una concurso es la presentación del ganado es que no vamos bien. Eso es de lo poco que nos queda en la memoria de esta olvidable concurso de Vic. Probablemente sea la peor que hemos visto en este coso después de tantos años.

El juego de los toros fue vulgar a más no poder y estuvieron a su altura los tres diestros. Añádase la agravante de que ordenaron a las monturas unas palizas que no venían a cuento. Todo fue deliberado para que esos toracos no les dieran problemas en la muleta. Ya nos afeitamos todos.

El primero fue un toro imponente de Juan Luis Fraile:

El segundo, un berrendo precioso de Barcial, que volvía a la que es su plaza:

El tercero, un sardo cornalón de Peñajara. Cumplía seis años dentro de cuatro meses. Un amigo francés nos decía que se tapaba por la cara pero nosotros creemos que estaba bien presentado a pesar de su excesiva arboladura, juzguen ustedes:

El cuarto, un toro alto, enmorrillado y bien encornado de Yonnet:

El quinto, un veleto astifino de San Martín:

El sexto bajaba bastante en comparación con los otros. Era de Los Maños. No pudo revalidar sus triunfos anteriores a pesar de que Marcuello se santiguaba con los clarines:

Ya ven que no añadimos nada sobre el juego de las reses porque no vale la pena hacerles perder el tiempo. Hubo cuatro quintos de entrada y el público se aburrió soberanamente.

PÉREZ MOTA. Quién lo ha visto y quién lo ve. A su primero le ordenó una paliza indignante en varas su hermano. Empezábamos bien... ¡y eso que Manuel era el director de lidia! Raúl Cervantes puso el par más arriesgado de la tarde:

Por cierto, Contreras fue desarmado dos veces durante la brega sin que delante estuviera Barrabás. El toro iba a arreones y Pérez Mota anduvo sin sitio, dubitativo, con el toro dándose perfecta cuenta de lo que había:

Como el maestro iba andando para atrás, su hermano no paraba de gritarle '¡andando p'alante, p'alante!' Cada pasito hacia atrás era una victoria para el de Fraile:

Metisaca de película de terror y bajonazo sin puntilla:

En el sopor del cuarto toro, estuvieron medianamente aseados Contreras y De los Reyes:

El de Yonnet tenía poco dentro y Mota se limitó a intentar que el toro no le tocase la tela:

Desde el burladero, su hermano dio la tabarra jaleándolo con estentóreos '¡bieeeenn!', como gritan los taurinos, que han olvidado el 'óle' de toda la vida. Su entusiasmo desmesurado no lo compartía nadie en el tendido:

Tres pinchazos caídos y rinconera con derrame y sin puntilla. Muy mal Mota, nunca lo habíamos visto así. 

Si alguien piensa que le tenemos manía, recuerde lo que decíamos aquí de este torero, que nos dio muchas esperanzas y que a día de hoy debería replantearse su carrera con urgencia.

SERRANO. Su primero fue el de Barcial, que escarbó de salida pero eso, después de Cobradiezmos, ya no hay que mirarlo. El problema fue que su pelea en el peto fue muy vulgar:

Buena brega de Casanova, lo único bueno de una cuadrilla que estuvo mal. Serrano había tratado bien al toro con el capote y esperábamos que su muleta hiciera otro tanto porque tiene oficio:

Pero bastante hizo con arrancar pases sueltos al de Barcial, que olvidó su casta en Salamanca:

Estocada honda y perpendicular pero bien ejecutada, la única en los dos festejos:

Su segundo fue el único al que dosificaron medianamente el castigo en varas. Suponemos que fue orden directa de Serrano, que veía que se iba a ir de vacío, como así fue a pesar de todo. Y es que el de San Martín no podía con el exceso de kilos que soportaba. El albaceteño porfió con voluntad pero la cosa se nos hizo interminable. Tres pinchazos, estocada corta y descabello:

SALENC. Su primero era el cornalón de Peñajara al que en ningún momento se le detectaron las aviesas intenciones que presumían sus casi seis años:

Hace tiempo que no vemos algo bueno en esta vacada y el tal Gambito no fue una excepción. Globalmente quizás hizo la mejor pelea en varas, metiendo los riñones con ganas aunque sin ser nada del otro mundo:

Buena brega de González y excelente segundo par de Marco Leal:

Tras la paliza que toleró Salenc en el caballo, luego quería que el toro tuviese fuelle. Si hubiera estado pendiente del tercio de varas, otro pelo le hubiera lucido. Pero, a pesar de que lo dejaba respirar, el de Peñajara ya no podía con el rabo:

Salenc tuvo lo que se mereció, o sea, nada. Casi entera trasera y desprendida, muy mal ejecutada, que basta.

Y el último fue el de Los Maños, que fue al caballo cuatro veces, el único. No sabemos por qué. Iturralde estuvo fatal, pinchando en el lomo y carioqueando con descaro. La pelea no dijo nada a nadie y el toro estaba más que visto. ¿Por qué cuatro veces?

González estuvo muy mal con los palos, lo que nos sorprendió. Ahí lo tienen de sobaquillo:

Salenc salió a brindar y se oyó tal protesta que desistió. ¿Cuándo han visto en España a un público de toros que se sienta humillado por que le brinden un toro malo y proteste ruidosamente?

Lo único bueno que hizo fue el inicio por bajo pero luego el toro pasaba por allí, lo que sirvió para que Salenc nos dejara fritos a derechazos. No tuvo piedad y la cosa todavía era más plúmbea ya que teníamos fresco el recuerdo de la novillada matinal que pueden ver en la entrada anterior.

Estocada tendida y pasada. Salenc no es que pegue el telonazo, es que avanza con la muleta como un delantal. Y encima luego decía a los peones '¡dale vueltas, dale vueltas!' ¿Ese es el respeto que te merece el toro, que es quien te da de comer? Ay, Adrián, vuelve a leer el titular de la entrada y aplícatelo a ti mismo.

Por fin finalizó el castigo que fue esta concurso. Hubo diecinueve puyazos que sumados a los veinte de la novillada hacen treinta y nueve el primer día. Mañana hay que llegar a los sesenta y cinco pero ya veremos si es con el buen sabor de boca de lo de Raso o con la amargura de esta concurso para olvidar.

Saludos cordiales desde Vic-Fezensac. Rafa.