CUADRI VA DESPERTANDO

Los aficionados cabales quedaron contentos con el juego en varas de los toros de Cuadri el Domingo de Ramos en Madrid. No fueron aquellos que se quedaban mirando el caballo como a una pecera (recuerden aquí) ni aquellos otros a los que se puede pegar cuarenta y cinco pases casi sin despeinarse como los que comentábamos aquí.

Estos de Madrid se arrancaron al caballo y metieron los riñones como se espera de esta ganadería. El sexto acudió tres veces y el cuarto empujó con el rabo enhiesto, romaneó y terminó por derribar. Ahí lo tienen:

Esperen. Antes de ver el romaneo les diremos que cuando un Cuadri recarga con los riñones doblando las patas de esa manera, no hay nada igual. Para nosotros ese instante tiene más emoción que cualquier faena de nuestras queridas figuritas a la ternera de turno. Y ahora el romaneo:

Al ser derribado, el Bene, un matarife de carnet, se tomó cumplida venganza en el siguiente encuentro y pegó al Mediador de Cuadri hasta en el paladar. Es lo que suele hacer esta gente, viven del toro pero en el fondo lo odian.

Habrá que estar agradecidos a Gómez del Pilar quien quizá sacrificó su faena de muleta para que los espectadores asistieran a un vibrante tercio de varas. Cuando el toro se le paró a las primeras de cambio, la desolación del diestro era clara pero sepa que cuenta con el agradecimiento de los aficionados al toro:

Mención aparte merece su picador Sangüesa, que es un personaje al que en nuestro blog ubicamos siempre entre los sospechosos habituales de la banda del castoreño. Pues con ese sexto de Cuadri demostró valentía, habilidad al mover el caballo y dosificó el castigo. Incluso no tapó la salida por lo que vemos en las imágenes:

Como nadie es perfecto, no dio el pecho del caballo y clavó trasero y contrario:

No obstante,  en uno como Sangüesa, que nos tiene acostumbrados a carnicerías que firmaría Charles Manson, lo que protagonizó en Las Ventas nos sabe a gloria. Los muchos amigos que tiene Juanma en Navarra habrán descorchado hoy decenas de botellas de pacharán en su honor.

Recordamos una anécdota en una corrida donde nuestra localidad estaba justo detrás del caballo de picar. Salió Sangüesa y cuando se colocó le gritamos esto sin faltarle al respeto:

- ¡Sangüesa! ¡A ver qué haces!

Le pusieron el toro en suerte y de pronto el animal se dio la vuelta y salió trotando hacia los medios. El picador se giró hacia nuestra posición y sostuvimos este breve diálogo:

- ¿Has visto? No le he hecho nada...

- Claro... ha salido huyendo porque te conoce.

Pero ojo porque a partir de ahora tendrá que ir con cuidado ya que hemos descubierto que cuando quiere, sabe hacer las cosas bien, con lo cual en caso contrario se hará acreedor de recibir un palo más fuerte. Salvando las distancias, sucederá con él lo mismo que con Morante, que merece doble vilipendio cuando destorea porque es uno que sabe torear.

En el resumen vemos que Adrián De Torres cortó una oreja que parece un tanto excesiva a pesar de que se le aprecia valentía ante un toro de Cuadri que se dedica a papar moscas. Sabemos que algunos de nuestros selectos electores asistieron a la corrida. Tienen a su disposición la sección de comentarios para confirmarnos si la lidia de ese toro fue la adecuada. Es que Fernando El Viejo se ha cansado de repetir que sus toros no quieren nada por arriba y por lo que se ve en éste, da la impresión de que esa lidia no sólo no ha corregido el defecto sino que lo ha aumentado:

A día de hoy son dos las ganaderías que más miedo dan a los toreros: ésta de Cuadri y la de Miguel Reta. Si pudiesen les pondrían las banderillas con una cerbatana. Además, sus propietarios son de los pocos que no toleran la barbería pero ambas vacadas llevan en el pecado la penitencia. Son dos toros totalmente diferentes pero ambos piden que se les baje la mano desde el primer momento con los capotes, en plan Marco Galán. Y para eso hay que tener mucho valor. Cuando cunde el pánico, lo habitual es largar toda la tela al viento y si el maestro luego se encuentra con un toro como el que tuvo que matar Adrián De Torres, allá se las componga.

Pega una estocada al encuentro hasta la guarnición, arriba pero pasada y además tapando la cara del toro como se aprecia en la imagen:

Una oreja en Madrid debería ser algo muy serio y ésta se nos antoja un poco exagerada según las imágenes de este vídeo.

Suponemos que en las crónicas de los críticos paniaguados lo que abundará es que los de Comeúñas no se prestaron al lucimiento porque ya saben ustedes que hoy gira todo en torno a la muleta. Pero nosotros nos damos con un canto en los dientes al ver que los toros de Cuadri están despertando de ese letargo en que se habían sumido durante los últimos años. Vaya desde aquí nuestro ánimo hacia Luis y el resto de la familia porque este es el camino por el que queremos que transite su ganadería. 

Es lo que pensamos los pocos aficionados que valoramos detalles como los que se vieron este Domingo de Ramos en Madrid.

Por cierto, en la web de Las Ventas hay un amplio despliegue fotográfico sobre la corrida. Hemos contado las fotos y son un total de setenta y seis sin incluir las seis de los toros y las tres de los matadores. Pues ¿saben cuántas inmortalizan la suerte de varas como hemos intentado hacer en nuestro modesto blog?

Una, ésta:

Y encima no se ve nada. Salta a la vista que no todo el mundo entiende la tauromaquia de igual manera. A los amigos lectores y a quien esto firma está claro que se nos ha parado el corazón.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.