La antaño Feria del Toro hogaño solamente trae Toros como excepción. La de Tafalla la denominaron la feria del Toro-Toro para recalcar que el protagonista allí era el animal y no las figuras. Por cierto, ya saben que este año tendremos Conde de la Corte, Palha y Sobral. Allí estaremos Dios mediante y por aquí les comentaremos lo que acontezca en la que más de uno ha denominado la feria del túnel. Lástima que el primer tercio no existirá como tal a pesar de los esfuerzos baldíos que hicieron en su día buenos aficionados del Club Taurino Tafallés. Y es que estamos en España, señores.
Volviendo a Iruña, nos alabaron tanto esta corrida de Escolar que la hemos visto en diferido. Hombre, la verdad es que toros sí que hubo pero ni mucho menos fueron esos escolares que nos han puesto el corazón en un puño otras veces. Los televisivos sí que dieron la impresión de estar muy asustados durante la retransmisión. Posiblemente fue debido a que están demasiado acostumbrados al ganado de granja.
Corrida bien presentada en general aunque fuera desigual. Se la maltrató vilmente en el caballo por orden de los diestros. Resultó imposible calibrar su bravura ya que el primer tercio resultó una carnicería infecta. Cuatro de los seis toros se orientaron en mayor o menor medida durante el segundo tercio pero sin llegar a la condición de marrajos. Ni siquiera el último, el más malaje, desarrolló ese peligro gordo que hemos visto otras veces en esta ganadería cuando llegaba a mascarse la tragedia (por ejemplo con De la Calle en Céret y el tal Listón o con Chacón en Madrid y el tal Castellano I).
RAFAELILLO. Su primero era un cárdeno claro y veleto:
Collado estuvo infame siguiendo las órdenes del maestro y machacó al pobre toro de forma canallesca. Lo que hizo fue asqueroso en dos cariocas repugnantes castigando con esa mano izquierda asesina que ven. El reglamento plantea la sanción en casos tan flagrantes pero ¿hubo propuesta para sanción de la Policía Foral? Toda esta abyección la ponemos en el debe de Rafaelillo, que hizo lo que lleva haciendo toda la vida: matar los toros en el caballo. Observen que el de la banda del castoreño se encuentra de espaldas a los medios, señal de que está carioqueando:
El toro era un tanto reservón y se fue parando enseguida. ¿Cómo hubiera sido de haberlo picado bien? Derechismo despegado del diestro, tan cargante como picante (picante de pico, no de que tuviera salero su trasteo).
Pinchazo y esta honda arriba:
Al cuarto lo recibió a porta gayola pero quedó desairado por un regate del toro. No se arredró y le pegó dos más en tablas. Era un cárdeno, degollado y cornalón, con lámina de toro de la época de Machaquito:
Otra carnicería rafaelillesca en el caballo, con carioca recargando vilmente. Sólo faltó que un rehilete se metiera cuatro dedos en uno de los agujeros.
Empezó genuflexo, sin ningún eco porque estaba todo el mundo con la boca llena. Luego pegó pases con la derecha también sin eco pero héteme aquí que en el segundo que dio con la izquierda el toro hizo por él, lo persiguió, se enceló y lo apalizó:
Volvió a la cara de manera increíble dado que después el parte informó de ocho costillas rotas. ¿Qué hubiese pasado en caso de haber tenido una mínima perforación de pulmón? El toro ya sabía latín tras la cogida, ahí tienen una diferencia esencial con el torillo comercial. Estocada alargando el brazo y oreja tan esperable como sentimental:
ROBLEÑO. Su primero, este cárdeno oscuro y astifino:
Horrorosa lanzada del Legionario con dos agujeros y carioca. En el segundo, barrenó a gusto. Banderillas de cualquier manera y el toro que abrió la boca enseguida. Aunque no era tonto no nos pareció que tuviera tanta emoción su embestida como pontificaban los televisivos.
Robleño anduvo aseadillo pero siempre alargando el brazo para echar la tela al ojo de fuera. Vean:
Pinchazo escupido y entera trasera a capón, acertadamente en la suerte natural. Si llega a equivocarse entrando en la contraria, tiene un susto seguro:
El quinto era un cárdeno claro, veleto y degollado, muy en tipo a pesar del prominente morrillo:
Fue desastrosamente puesto en suerte por el maestro para que Iturralde barrenase muy a su sabor y encima trasero. Fíjense en cómo lo ha encerrado en esa trampa infernal sin salida para quedarse bien descansado tras masacrarlo durante un minuto largo. Robleño, a la izquierda, sufre un ataque de autismo. ¡Qué vergüenza entre los dos! Y ese caballazo, ¿cuánto pesa?
Iván García, mal en el primero y bien en el segundo. Abajo ven la diferencia, ¿no? Pero como los orejiles lo aplauden siempre y los televisivos no hacen pedagogía taurina nunca, da igual Juana que su hermana.
Toro noblón con el que nos dio la impresión de que Robleño no terminaba de confiarse, quizás mediatizado por la cogida de su colega. Observen la sangría por detrás del brazuelo que le había perpetrado Iturralde:
Tras doscientos pases, sainete con los estoques: tres pinchazos, otro hondo caído y ocho descabellos.
CASTILLA. Su primero era este cinqueño playero, cárdeno claro, botinero y bajo de agujas:
Marugán no lo apretó. No es picador colombiano como dijeron los televisivos sino manchego. Luego rectificaron porque alguien les mandó un guasap.
El animal se orientó en el segundo tercio. Lo citó de rodillas y tuvo que venirse hasta el toro porque éste reculaba.
El escolar bravuconeba reservándose pero cuando embestía repetía con codicia. Castilla no quiso cruzarse viendo que el toro no tenía mala idea y además blandeaba de manos. Perdió gas enseguida y la cosa se diluyó.
Se libró de una buena cuando al matar se tiró encima de la cara del toro como ven. A la segunda ya se salió un poco y dejó una estocada contraria con bella muerte. Oreja al valor y a la disposición del maestro que no discutimos. Quizá un toro más cornicorto hubiera sido más certero. Fíjense en que clava arriba, ¿eh?
El sexto era un cárdeno oscuro, bragado y veleto, de 590 kilos:
Asquerosa carioca en el espinazo de Caballero, como ven abajo. Este piquero fue quien mató al Cigarrero de Aguirre en Vic-Fezensac. Y aunque no se lo crean, en el segundo puyazo todavía lo pinchó más atrás. Es acongojante lo de la banda del castoreño:
Cervantes se esforzó por bajarle la mano en la brega pero ya estaba picardeado. Si los picadores buenos pueden arreglar un toro difícil, en este caso fue al revés: Caballero terminó de complicarlo.
Castilla quiso plantarle cara de inicio al natural sin castigarlo por abajo, que era lo que se terciaba. Demostró con ello mucho valor pero quizás poco cerebro, dicho sea con todo respeto. No sabemos si hubiera solucionado algo ya que el animal lo tenía todo: distraído, topón, traidorzuelo y tardo. Vean que no obedecía ni echándole la tela al morro. La sangre, por el costillar. Fue el nauseabundo colofón a esta nefasta tarde en el caballo, una más en Pamplona:
Ni siquiera se inmutó al cite cuando el diestro entró a matar. Lo ignoró como si fuese un toro de Guisando. Honda atravesada por fin, que no fue media estocada como dijeron en televisión. Ni se nos ocurre criticarla ante ese morucho.
Dada la condición bueyuna del animal y como corría el reloj, De la Cámara dijo que entrase de nuevo a matar con la primera espada clavada aunque protestase el público. Ignora el artículo 77.2 del reglamento navarro y también que, antes de vulnerarlo, tendría que solicitar permiso al palco. Ya sabemos que hay fotos antiguas con toros que tienen dos estoques clavados pero eso fue expresamente prohibido por el citado artículo (que además dice lo mismo que el 80.2 del nacional). Lean:
El espada no podrá entrar nuevamente a matar en tanto no se libere a la res del estoque que pudiese tener clavado a resultas de un intento anterior.
Hay que ir con cuidado para no confundir a los aficionados. Otra honda tendida, eso sí, tras extraer reglamentariamente la primera espada, y el descastadísimo animal que se echa.
Escolar dijo que le habían gustado segundo, tercero, cuarto y quinto. En cambio, el sexto nada y el primero, soso. Un balance muy optimista nos parece. Y faltó que criticase la vileza con que se machacó a todos los toros en el caballo pero los ganaderos siempre callan. La Unión en este tema, como en tantos otros que afectan a la integridad del toro y de la fiesta, ni está ni se le espera. Su desidia es tan triste como indignante. Y el Club Taurino de Pamplona ¿hace algo por que el primer tercio tenga el lustre que merece su plaza de primera?
Corrida interesante a secas pero ni mucho menos de aquellas de las cuales sales resoplando aliviado. Anda que no hemos visto otras de Pichorrongo más peliagudas que ésta. Y de Saltillo (en Cenicientos), y de Aguirre (varias en Vic), y de Prieto de la Cal (también en Cenicientos), y de Reta (cualquiera de las suyas)...
Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.
Buenas Rafa
ResponderEliminarLo de los picas este año es para meterles la permanente revisable como poco (y si puede ser sin revisar mejor). Parece que lo hacen a posta, a ver quien pica más trasero y peor. Esta corrida la vi en la plaza y salí totalmente asqueada del maltrato a los toros en varas, mandados vilmente por sus matadores claro. Tristemente es el pan nuestro de cada día que como no denunciemos los aficionados estas tropelías y sobre todo, como no se hagan públicas sanciones ejemplares a estos masacradores a caballo, se van a terminar cargando la Fiesta puesto que el toro no lucha en equidad. Me ha hecho gracia su comentario sobre si en vez de 8 costillas rotas a Rafaelillo le hubiera perforado un pulmón, a sus 2 toros me gustaría ver las lesiones que les provocaron los 2 carniceros que lleva encima de los pencos, porque dudo mucho que no fueran con algún órgano tocado. No quiero decir que me alegre de la paliza que le pegó, Dios me libre, pero me gustaría saber también las lesiones de esos 2 toros.
Este año en Madrid hemos podido ver autenticas carnicerías por parte de los del castoreño, mandados por los de luces. Una la de Saltillo, la peor picada este año en Madrid para mi, sin olvidarme la asquerosa suerte de varas que le dieron al 4º novillo de Mayalde que al empiece de faena de muleta se tuvo que rendir ¡Normal!, pasando por la última masacre vista hace apenas 1 semana en la corrida de Juan Luis Fraile. Así no vamos a ningún sitio, cuando el toro no puede rendir al 100%.
Un saludo.
Es un escándalo pero nadie dice nada, especialmente quienes deberían clamar, que son los críticos paniaguados, demasiado ocupados comiendo en el pesebre.
EliminarA las corridas que denuncia añada la de Palha en Madrid. Le copio lo que puse de la de Saltillo:
"El festejo quedó contaminado gravemente por la delictiva actuación de los picadores de La Puya Nostra, montados en los catafractos equigárcicos, que muchas veces no obedecían a los jinetes. Veníamos de los caballos de Bonijol en Guadalix con unos piqueros que intentaron hacer las cosas bien y aquí nos volvieron a la dolorosísima realidad venteña"
¿Sabe qué llego a pensar? Que este año, por lo que sea, están saliendo muchos toros en plazas de primera sin tanta bolita como en las últimas temporadas y esta gente, en cuanto ve pitones más bien astifinos, ordena el asesinato en varas sin remisión.
Saludos
Buenos días Rafa. A mi, que la vi in situ, me pareció un CORRIDON, sin dudarlo a de mas, una corrida de TOROS. La única de la feria junto con la de Cebada, a la cual la dan de ostias , y se la puede esperar mas, pero no deja a disgusto. Quizás tus expectatívas eran mas grandes respecto a esta corrida, me veo con culpa por que te la cante kojonuda, y lo fue. Lo del tercio de varas en Iruña city es repugnante, pero este año, fue menos que otros pasados. Por cierto, el otro día en Azpeitia a la de Ana Romero, no se vio a ningún Toro caerle la sangre por detrás de la paletilla. Lo que debía de ser norma, es excepción.
ResponderEliminarA lo nuestro, Buena corrida de Escolar, con varios Toros de verdad, y fue la que le dio lustre a la mal llamada Feria del Toro.
Rafa, si tienes tiempo y te aburres, échale un ojo a la de Miura. No a toda. Solo al primer Torillo y al cuarto. El primero anovillado impresentable, pero de un comportamiento estimable. Y el cuarto, arrancándose de lado a lado de la plaza, en un nefasto tercio de banderillas de Escribano, en un recorte que le hace, el Toro se queda parado, roto..como si fuera una media verónica.
Por si te apetece y te aburres mucho.
Un saludo y gracias
Kaparra
Lo único que he visto de Pamplona es esta corrida. No puedo hablar de Cebada ni de Miura. Muy aburrido tendré que estar para ir al diferido...
EliminarSaludos