Comentaremos en la presente entrada algunas de las cosas acaecidas en la Feria del Club 3Puyazos más que nada con la intención de que ustedes en los comentarios aporten también sus ideas al respecto.
Empezaremos no sin antes transmitir nuestra efusiva felicitación a los cuarenta y ocho miembros del club. Si el propósito básico era dignificar la suerte de varas, con el primer tercio a ese sexto toro de Peñajara lo consiguieron:
EL NOMBRE. El club se llama Club Taurino 3Puyazos y no 3Puyazos3 como se escribe o se habla por ahí.
EL CARTEL. Para nosotros, manifiestamente mejorable. Es cuestión de gustos la elección casi monocroma quizá por un aspecto económico. También lo es su diseño pero no lo es que se pueda leer el contenido con claridad. Eso no sucedía con éste.
Quizá esos detalles de tauromaquia antigua que vimos en el ruedo con el paseíllo de los caballos sin peto, por ejemplo, podrían trasladarse al cartel del año que viene. En Almazán hemos visto algunos carteles con sabor añejo y, por hacer crítica constructiva como es el caso de esta entrada, adjuntamos éste:
EL CALOR. No terminamos de entender tanta queja por el calor. A ver, los aficionados a toros sabemos perfectamente lo que es aguantar corridas a cuarenta grados o más. Lo son todas las de cada verano en Las Ventas, o las de Cenicientos, o las matinales de Céret, o cualquier nocturna de Sevilla cuando no corre un pelo de aire. Hemos estado en Vic-Fezensac en corridas concurso de casi tres horas a treinta y pico y nadie se ha quejado.
Hombre, ya puestos a quejarse, no estaría de más valorar la prestación de los novillos viniendo del horno de los chiqueros y teniendo que luchar bajo ese calor que, salvo error, estaba en torno a los treinta y ocho grados. No eran, por ejemplo, los cuarenta y tres de los últimos resinas que vimos en Madrid (recuerden aquí).
LA PRESENTACIÓN DE LA NOVILLADA. Casi todo el mundo se ha quejado. No ha sido nuestro caso. Nos pareció correcta para lo que es la plaza y para el dinero que habría en el cajón del club.
Podemos comparar este primer novillo de Raso con uno de Miura que se lidió en Francia (recuerden esta entrada donde pueden ver los otros cinco).
O comparen con el que encantó a todos en Vic el año pasado y que fue azuleado. Primero vemos el segundo de Raso en San Agustín y debajo el premiado en Francia:
Comparen también éste de Valdellán con un cebada de Villaseca de la Sagra o con uno de Los Maños en la pasada feria de Cenicientos:
Los propios ganaderos de Raso lamentaban que el juego de sus novillos no había sido el esperado 'el día en que era más necesario' (sic). Ahí se ve el interés de los dos hermanos en apoyar esta iniciativa.
LAS TRES VARAS. Ya comentamos en la crónica de la novillada la actitud del presidente obligando a la tercera entrada (más abajo leerán sus declaraciones). No tenía nada que ver con el nombre del club. Era para evitar lo que hemos visto en San Isidro, esto es, monopuyazo criminal en el primero y trámite en el segundo donde la mayoría de toros se afligían invariablemente.
Algo de eso decía también un amigo de nuestro modesto blog, el veterinario Julio Fernández. Comparaba las tres entradas obligadas en Vic con lo de Madrid. Cambien en el siguiente texto Vic y pongan San Agustín de Guadalix para las futuras feria de 3Puyazos. Copiamos:
Tiene mucho que ver la ESTRATEGIA del picador. En Madrid, los picadores suelen aplicar puyazos de máxima intensidad en el primer encuentro para después “perdonar” en el segundo, sin dosificar el primero casi nunca. En Vic, como lo habitual son tres o más encuentros, no tienen más remedio que dosificar, y cuando caen por detrás de la cruz el público protesta, cosa que no ocurre en la primera plaza del mundo.
FOTO: Andrew Moore |
Dirán ustedes que si el toro está visto ¿qué estamos haciendo? En la novillada sucedió eso pero los motivos del presidente nos parecieron totalmente plausibles con el fin de obligar a dosificar el castigo. Sí, y por la tarde, ¿qué?
LA CUARTA VARA. Antes que nada decir que eso de que se quería hacer un festejo muy francés es un poco equivocado. En Francia hay de todo y las plazas donde se valora la suerte de varas se cuentan con los dedos de una mano: Céret, Vic, Parentís (con la comisión anterior), Saint Martin-de-Crau, Mont-de-Marsan y...
La idea de 3Puyazos era que si el presidente consideraba que el toro podía acudir una cuarta vez, se pusiera en suerte con la puya de tientas. Escuchamos ahora quejas de que los tercios de cuarto y sexto de Peñajara duraron más de diez minutos. Quizá son los mismos que darían la razón a los televisivos encabezados por Muñoz cuando dicen que una corrida no es un tentadero.
Otra cosa aparte es que se te haya ido la mano como a Navarrete en esa imagen anterior.
Nosotros hemos criticado el pegapuyacismo por sistema cuando un toro está visto. Entendemos por visto que se haya repuchado con una pelea vulgar en los dos primeros y que, puesto otra vez, en el tercero se distraiga, husmee y escarbe o directamente se vaya hacia los capotes.
No fue el caso de los dos toros de Peñajara. Ambos estuvieron fijos mirando al caballo en esa cuarta vara. No escarbaron ni se distrajeron. ¿Qué había que hacer al cabo de ese tiempo en que no se arrancaban? Era absurdo acercarlos o picarlos más cerca de la querencia precisamente porque ya estaban picados. Cambiar el tercio hubiese sido la solución... o que salga el picador a buscar al toro con valentía para señalarlo en el centro del ruedo. Pues esto último fue lo que se hizo y nos parece bien.
Entiendan que no se trataba de castigar más sino de brindar un espectáculo en varas, que es la esencia que subyace en la fundación del Club Taurino. Y los que piensen que con ello el toro se acaba y en la muleta no rinde se engañan. Un tercio de varas bien realizado, sin recargar ni barrenar y dosificando el castigo no deja el toro muerto ni muchísimo menos. Carnicerías infamantes como las que vimos en la corrida de la Prensa sí matan al toro (recuerden aquí nuestra crónica).
EL PROGRAMA DE LA FERIA. Alabado por tirios y troyanos. Podemos decir con orgullo que fue redactado por uno de los selectos lectores de nuestro modesto blog. Únicamente anotar el gazapo de escribir mal el apellido del presidente.
La frase de Celestino Cuadri sobre la necesidad de los tres puyazos era de esta entrada. Por cierto, allí verán que el ganadero añadía esto:
"que los espadas, sabiendo esto, acomoden su acción y la de su picador a la fuerza del toro que han de matar después"
Por supuesto que se informó del orden de lidia puntualmente |
LOS DETALLES EN EL RUEDO. Impecables. Sorprendieron a todos con cosas en que no habíamos caído como el paseíllo de picadores sin peto o el cartel doble incluyendo el nombre y peso del caballo que picaba. Y las mulillas, rasuradas con el nombre del club. Quizá el mejor detalle fue reabrir la venta del Batán.
LA CUADRA. Por nuestra parte, ninguna queja. Sepan que nada más llegar nos dirigimos a la zona caballar para ver el tamaño de las bestias. Nos alegramos porque no vimos los T-34 de Las Ventas sino caballos muy adecuados para el objetivo de la feria.
Los que tanto alaban los caballos de Bonijol igual hace tiempo que no los ven porque podemos certificarles que los de Equigarce en Guadalix eran todos más ligeros que los que sacó el francés en Vic-Fezensac.
Y además, los monosabios no dieron la nota como en San Isidro. En seriedad y orden dentro del callejón, San Agustín de Guadalix pasó la mano por la cara a Las Ventas.
LA CARPA. Excelente idea que además debió de suponer una bonita fuente de ingresos para las arcas del club. Censuramos la actitud de los aficionados que se fueron a comer por ahí ya que pensamos que era el momento de arrimar el hombro pero que cada uno haga lo que quiera, faltaría más.
Lo del volumen para nosotros insoportable de la música ya lo comentamos con la novillada. Después nos hemos enterado de que no fuimos los únicos en ir al operario a rogarle que bajase los decibelios aunque sin éxito alguno. Y luego encima apareció la charanga...
Nos preguntarán que cuál es el volumen que nos gustaría. Pues no nos tapamos y les respondemos claramente: cero, ¡sin música! Es el día para hablar de toros y esa carpa era el sitio ideal. Encima con aficionados que tienen la misma visión de la fiesta de toros. Íñigo Gamazo, el ganadero de Raso, estuvo todo el rato por allí hablando con unos y con otros. Fíjense en la grabación que hizo el Club como resumen de la feria y verán que el pobre tiene la voz hecha polvo de forzarla por culpa de la locura musical (vayan al 1'15'' aquí).
LA ENTREVISTA A LOS GANADEROS. No fue una tertulia y es que las condiciones invitaban a abreviar. Ya pueden buscar otra alternativa para la próxima vez: o que se queden los que quieran cuando acabe la corrida o entrar al tendido una hora antes de la misma para que sólo estén presentes los realmente interesados. Y que esté también el presidente en un coloquio donde haya un micrófono para que cualquier aficionado pueda preguntar lo que desee.
PRIETO DE LA CAL. El ganadero se llevó una desilusión monumental. La corrida respondía a la forma de entender la lidia que tiene él. Además, era un escaparate con aficionados venidos de muchos sitios diferentes. Al final, lo que queda en el recuerdo son las salidas fulgurantes de todos sus ejemplares pero después... poca cosa y creemos que su desilusión, compartida por todos los aficionados, viene dada porque en el caballo no mostraron el poder y la casta que se esperaba.
PEÑAJARA. No hay queja porque los tres ejemplares mostraron un nivel de notable alto. La pregunta es si cuarto y sexto en el pasado San Isidro hubieran lucido tanto. Quizá un monopuyazo asesino en el primero los hubiera dejado para el arrastre y en el segundo se van sueltos como hicieron tantos toros en la feria.
Aquí hay que agradecer a los diestros su colaboración en el lucimiento aunque seguimos sin entender que Imanol colocase al sexto a veinticinco metros en el primer encuentro. Eso no debería ser.
Nos dicen que Rubio hubiera querido ver más al sexto toro en la muleta. Sostiene que en la espera al cuarto encuentro el toro se desangró mucho y lo acusó en el último tercio. No estamos de acuerdo con ello porque fue bien picado, no como el segundo, que sí perdió mucha más sangre por las lanzadas asesinas que recibió. De todas formas, quizá sea el único ganadero de los cuatro de la feria capaz de poner peros a que un toro suyo acuda por cuarta vez al peto.
No creemos que repita Peñajara el año que viene con 3Puyazos. Es posible que ya haya recibido llamadas de Francia para ver qué tiene disponible en 2023.
DOS IDEAS PEREGRINAS. La primera es dotar al presidente de un micrófono. Podría haber hecho una alocución antes del festejo aclarando qué indicaciones habían dado a picadores y cuadrillas. Asimismo, a la muerte del primer novillo, podría haber aclarado la razón de no querer conceder el cambio con sólo dos puyazos. Eso evitaría malentendidos posteriores que nosotros hemos querido aclarar hablando personalmente con el señor Ferra como verán más adelante.
La segunda es que cuando se retiren los toreros al terminar la corrida, atraviesen también el ruedo los mayorales para que el público pueda expresar su opinión (en este caso, Doblado habría pasado un mal trago sin duda).
LAS PUYAS. Para el año que viene sería ideal poder picar con las puyas innovadas del maestro Sales y de Julio Fernández. Sabemos que hay picadores que no tienen ningún inconveniente en usarlas, por ejemplo, Iturralde, Borja Lorente, Juanpa Molina, Óscar Bernal, Iván García o Tito Sandoval. Y seguro que Réhabi tampoco. A ver si hay suerte. Recuerden lo explicado aquí.
EL PRESIDENTE. Ya dijimos que lo conocemos como lector de nuestro modesto blog y es un aficionado a carta cabal. Compartimos con él un interés común por hacer pedagogía en el aficionado. En su caso, a través de la ANPTE, de la que es presidente, y, en el nuestro, desde las páginas de este cuadernillo.
Una semana después de lo de San Agustín de Guadalix estuvimos hablando con él de la feria y entresacamos para ustedes esta parte del diálogo:
- ¿Qué les dijo a las cuadrillas antes de los festejos?
- Es importantísimo que el presidente hable con ellos. Les dije que tenían que ser los verdaderos protagonistas del festejo y que sobre todo se tomaran todo el tiempo preciso en el primer tercio, sin prisas. Les avisé claramente de que no se iba a cambiar sin tres entradas, que eso era seguro y que, por tanto, dosificasen el castigo. Esto lo sabía Carballo cuando pidió el cambio con dos puyazos en su primero.
- ¿Les hizo alguna indicación acerca de cómo picar?
- Aparte de que no tapasen la salida ni barrenasen les dije que si en caso de accidente la puya se les iba trasera, que levantasen rápidamente y sacasen el toro para volverlo a poner en suerte.
- ¿Estuvo pendiente de las puyas?
- Sí. Hubo una cosa que no gustó a los picadores. Compré un adhesivo rojo para pegarlo en la cara superior de las puyas una vez estuvieran montadas. Dio la casualidad de que dos de los piqueros tuvieron que desmontarla para montarla bien ya que la tenían al revés... ¿por descuido?
La idea viene de lo visto el año pasado en Vic-Fezensac con las puyas de Bonijol |
- ¿Hubo alguna desavenencia más en la suerte de varas?
- Sí. A Lorenzo Cuello, que además es el asesor jurídico de la ANPTE y que estaba conmigo en el palco, lo mandé antes de la novillada a medir los faldones de los petos. Resultó que eran más largos de lo reglamentario. Le dijeron que no podían levantarlos porque las correas no daban para ello. Transigimos en la novillada porque no había tiempo de arreglarlo pero yo les dije que para la corrida hicieran los agujeros correspondientes para levantarlos a la altura reglamentaria. Y así lo hicieron. No sé si los espectadores se fijaron en que ese detalle del peto fue diferente en la novillada y en la corrida.
Réhabi da el pecho hasta el último instante, en lugar de esperar con el caballo atravesado |
- ¿Le comentaron algo los picadores?
- Sí, uno me dijo: 'y eso de levantar el faldón, ¿por qué motivo?' Le expliqué que era, aparte de cumplir el reglamento, para dar al toro una mínima oportunidad de poder sentir que podía luchar contra el caballo. Está claro que para recuperar la suerte de varas hay que buscar una puya menos lesiva y picadores más profesionales.
- ¿Alguna indicación más a los actuantes?
- Sí, insistí a las cuadrillas en que llevasen a cabo una lidia correcta y completa. Les comenté que eso se valoraría a la hora de conceder una segunda oreja.
- Y ¿cómo reaccionaron?
- Me dijeron que eso era injusto pero les dije que era innegociable. Que la primera oreja sería del público pero en la segunda yo iba a valorar mucho la suerte de varas, la lidia realizada y la ejecución de la estocada.
O sea, les dijo que iba a cumplir el reglamento, ni más ni menos. El problema es que es algo a lo que no estamos acostumbrados cuando en tantos palcos se sientan turistas.
Por cierto, dado que estuvimos hablando con él largo y tendido, le hicimos llegar nuestra peregrina idea de dotar al palco de un micrófono para dar explicaciones y evitar malentendidos. No nos dejó terminar la frase ya que nos interrumpió: 'eso hace años que lo vengo diciendo yo'.
LOS CORRILLOS. Lo que se comentaba en ellos:
- Se hablaba de la posibilidad de lidiar seis novillos en lugar de cuatro pero nos tememos que la cosa aún está verde por cuestión económica.
- El cambio de fecha es una cosa que el club debería valorar. No sabemos cuál sería la adecuada porque si se hace a principio de temporada, la meteorología podría echar por tierra todo. Y si ahora ha habido quejas por el calor, entonces serían por el frío.
- Pensamos que la corrida vespertina debería adelantarse una hora o incluso más si se cambia la fecha y se celebra antes. Es simplemente para no terminar con luz artificial y no porque la espera se haga larga. Charlando de toros entre aficionados el tiempo pasa volando.
- Alguno comentaba también si no surgirían desavenencias entre miembros del club, algo, por otro lado, tan español y más cuando la empresa es exitosa. Esperemos que no...
- Y el tema recurrente: ¿pondrá palos en la rueda el sistema corrompido de los taurinos? Esperemos que tampoco. Total, esas 2.000 personas, las de la portátil, pensamos que no tienen por qué molestar al chiringuito del taurineo. Aunque vaya usted a saber...
Precisamente el éxito redondo de esta primera edición habría consistido en ver la plaza llena. O, por lo menos, tres cuartos de las 2.545 que es el aforo oficial.
¿Se imaginan un NO HAY BILLETES en la edición de 2023 buscando una fecha más adecuada y visto lo visto este año? Soñar es gratis aunque el simple hecho de que los amigos de 3Puyazos tengan ya in mente la organización de una segunda edición es un triunfo en los tiempos que corren. ¡Ánimo!
Insistimos en que tienen a su disposición aquí abajo la sección de comentarios o el mail para enviarnos sus impresiones, sus propuestas y sus quejas, si las hubiere, acerca de la primera feria de 3Puyazos. Seguro que los miembros del club lo leerán con sumo interés.
Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.