Entre 3Puyazos y Céret vamos a ver nueve escolares y ocho palomos. Dos asociaciones que piensan por encima de todo en el aficionado y al final acaban pensando casi en las mismas ganaderías. Qué le vamos a hacer...
Algo raro ha debido de suceder o con los ceretanos, o con Carreño o con ambos a la vez. Hace un par de meses todo el mundo daba por seguro que las corridas serían de Dolores Aguirre y de Peñajara y la novillada probablemente de Barcial. Quienes hubieran apostado dinero por esos tres nombres, a día de hoy lo habrían perdido todo.
La ADAC hizo un amargo comunicado quejándose del trato recibido en Dehesa Frías ya que ellos daban por seguro que se les guardaría una corrida para la próxima feria. Para dar voz a todas las partes implicadas, diremos que en la ganadería afirmaron que no habían tenido constancia firme del interés de los de Céret. Dejaron claro desde la finca que incluso habían llamado varias veces a Carreño para ver cómo estaba el asunto sin obtener respuesta.
Antonio Rubio también daba por segura su participación con una corrida pero la cosa al final ha quedado en agua de borrajas. Por lo que sabemos, en el sanedrín no consiguió los votos necesarios.
Y la novillada al final será de Paloma Sánchez Rico. Los de la ADAC bajaron al campo este año a buscar toros bastante antes de lo habitual y dejaron los novillos para más adelante. Al final la agraciada ha sido la vacada salmantina. Conste en acta que ellos ya la tenían en cartera desde hace por lo menos dos años. Decimos esto para que quede claro que no ha sido una improvisación como alguno podría suponer dada la tardanza en anunciarla.
Por otro lado, aquel interés que parecían tener los de Céret en sorprender con alguna ganadería inhabitual será todo lo contrario en 2023 ya que tendremos más de lo mismo: Escolar y Saltillo. A ver si se pensará la ADAC que con la corrida de Reta recibimos los aficionados una sobredosis de droga dura... Pues desde aquí les diremos que los que vamos a su ciudad estamos capacitados para consumir eso y más (recordemos las inolvidables novilladas de Irmaos Dias con los Otero y la de Zaballos con Lamelas de novillero).
Escolar mojó la oreja a Victorino en aquel desafío del cual se pueden acordar aquí. Tampoco se olvida la encerrona de Robleño cuando tanto él como el ganadero salieron a hombros. Anotemos que más de un toro de aquella tarde estuvo excesivamente escurrido. Y no olvidamos tampoco que el palco regaló un azul que no venía a cuento cuando aquel toro pegó un sprint de veinticinco metros para ir a morir a la puerta de toriles.
También hubo vuelta para el último que mató aquí Alberto Aguilar en mano a mano con Robleño. Ojo que fueron escolares del Cuvillo, con la suegra de Fundi pidiendo el indulto para el sexto aunque sin gritar. Recuérdenlo aquí y vean el titular de la crónica.
Saltillo nos ha traído a esta plaza dos toros de los que encumbran a un torero pero únicamente en Céret o en Vic, en ningún sitio más, ni siquiera en Madrid.
El primero fue este Ruiseñor al que Gómez del Pilar dejó pensar demasiado en 2017, recuerden aquí.
Y el segundo fue este Jilguerón que volvió a tocar en suerte a Gómez del Pilar.
Formó parte de aquella corrida de 2019 cuya reseña titulábamos como hubiese gustado al desaparecido Fourquet: toros de guerra. Eso es lo que él deseaba ver en su plaza. Pueden recordarla pulsando aquí.
Aquellos dos toros estuvieron a punto de convertir a Noé en el novio de Céret pero cuando tuvo que formalizar la relación, no pegó el zapatillazo en la corrida de Raso de Portillo.
Esperemos que después de un ruiseñor y un jilguero Moreno Silva nos traiga por lo menos un gorrión o un petirrojo. Y si son seis, miel sobre hojuelas... pero ¡para los del tendido, no para los de abajo!
Aprovechamos tan señalado día para desearles un Feliz Año Nuevo.
Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.