(SEGÚN NUESTRA MODESTA OPINIÓN)
Cualquier blog taurino que se precie tiene su teoría sobre en qué consiste cargar la suerte. Nosotros también haremos nuestro comentario al respecto, a ver qué les parece.
Para quien esto firma cargar la suerte consiste en 'cambiar la trayectoria de la embestida del toro asumiendo un riesgo'. Ya veremos luego cómo se puede hacer y recordaremos que algunos afirman que esto supone un alivio y no un riesgo. Fíjense en que no hablamos en nuestra definición de las piernas porque se puede variar la embestida del toro con otras partes del cuerpo. Históricamente, este cargar la suerte ha dependido del tipo de toro que había delante.
Rafael Ortega en Sevilla (1950)
|
Y antes de seguir, decir que la palabra 'cargar' tiene en castellano más de cuarenta acepciones. A nosotros nos interesan dos de las primeras que reseña la Real Academia: 'cambiar de sitio un peso' o también 'inclinar un peso'. La suerte cargada, o sea, la burla que se hace al toro para variar su embestida, consistirá en decantar el peso de alguna parte del cuerpo del torero para engañar al toro.
Muchos de los que defienden hoy que el torero se puede poner de perfil ortodoxamente recuerdan lo que decía Pepe-Hillo:
Pero para entender esto tenemos que entrar en lo que decíamos anteriormente de los tipos de toros a los que se ha cargado la suerte. Simplificando, en la historia de las corridas ha habido tres tipos de toros:
- El toro antiguo, al que se tenía que lidiar más que torear, un toro que había olido la sangre en el caballo y que era una fiera. El toreo era una lucha.
- El toro moderno, al que hay que lidiar y también torear. Belmonte le ha hecho ir en redondo quebrantándolo y la aparición del peto hace que se le pueda ahormar y, muy importante, que no huela la sangre. El toreo ya puede aunar dominio y estética.
- El toro posmoderno, que te permite destorear a gusto como veremos al final de nuestra entrada. El toreo pasa a ser un ballet previsible y aburrido por repetitivo.
1. CARGAR LA SUERTE CON EL TORO ANTIGUO.
Ahí es perfectamente lícito lo que comenta Pepe-Hillo. Variar la embestida de esa fiera se puede hacer como dice él, de perfil y usando básicamente los brazos.
Tiempo después, Paquiro insiste en lo mismo, no habla de las piernas sino de los brazos para 'echar al toro de su terreno', o sea, como decíamos, cambiar la trayectoria de la embestida:
En 1882, en Sevilla, se publicó un 'Manual para asistir a las corridas de toros' donde se dice lo mismo, que hay que echar al toro de su terreno, cosa que, como veremos, alguno entenderá que es aliviarse ('bendito alivio' decía Lalanda):
Nadie habla entonces de las piernas porque la fiera que hay delante no permite excesivas pinturerías. Recuerden lo de 'dio dos magníficos naturales, cobró una soberbia estocada y recogió muchos puros'. Ahí acababa la crónica.
Incluso el tratadista Enrique García, en un libro sobre Paquiro, llega a considerar que ayudarse de la pierna para desviar el toro es claramente un alivio. La emoción viene de cargar la suerte con los brazos. Observen:
¿Saben a quién vimos cargar la suerte con los brazos? A Frascuelo en Céret el año pasado. En el primer lance a 'Cartuchero' lo esperó de perfil y le cargó la suerte abriéndole el capote con donosura y variando la trayectoria del toro sin enmendarse. Este fue el momento, muy emocionante independientemente de que estuviese de perfil (pueden recrearse aquí con nuestro particular homenaje al maestro aquel día):
Y en este libro se lee una cosa que hoy en día llamará la atención:
Sánchez de Neira confirma que 'cargar la suerte' es 'desviar el toro' y explica que en un par de banderillas al quiebro se carga la suerte cuando se desvía al toro engañándolo para quebrarlo.
Pero el toro cambió y los que se valen de citar estos textos antiguos para justificar el destoreo de hogaño creemos que se confunden.
2. CARGAR LA SUERTE CON EL TORO MODERNO.
Ahora será cuando se llegue a la esencia de lo que nosotros consideramos que es 'cargar la suerte'. Y es así porque este toro ya no es una fiera tan violenta como antes. Eso es gracias a este hombre, que quebranta los toros obligándolos a embestir en redondo:
FOTO: Alfonso
|
Y también porque ya no se medirá la bravura del toro por los caballos muertos. El peto hace que se pueda castigar al toro a conciencia y que no huela la sangre, cosa fundamental como saben todos los que conviven en el campo con vacuno de lidia. Se acabaron imágenes como esta de Antonio Ibáñez 'Marinero':
FOTO: Mateo
|
Para mandar en la embestida del toro 'se inclinará el diestro sobre la pierna contraria'. Lo dice Domingo Ortega recordando uno de los significados de 'cargar' como 'inclinar'. Añadía el maestro de Borox que sin cargar la suerte no se domina la embestida del toro sino que 'se la acompaña' -el destoreo moderno, añadimos nosotros-. Vean otra vez a Belmonte y fíjense en que las zapatillas apuntan al toro, nada que ver con nuestras queridas figuras, totalmente fuera de cacho con sus enormes muletas:
FOTO: Baldomero
|
Como no podía ser menos, Gallito calca la postura de Belmonte con un toro de embestida bronca:
FOTO: Baldomero
|
Y ahora Chenel, hablando del natural y recordando el otro significado de 'cargar' como 'cambiar de sitio el peso de algo': 'al echar la pierna adelante te obligas a cargar el peso del cuerpo en el muslo izquierdo, produciéndose en ese momento un cambio, ya que antes, en el cite, todo el peso se había cargado sobre la derecha'.
Rafael Ortega insistía con la pierna: 'hay que traerle enganchado, echar la pierna adelante para cargar la suerte, muy despacio, y rematar el pase detrás'.
Y Paco Camino vuelve con cargar el peso: 'también he procurado torear con la izquierda, la muleta apoyada en la pierna izquierda y ésta adelantada; no como han hecho otros, que dicen que han toreado muy bien por naturales y cargaban el peso de la muleta sobre la pierna derecha'. Véanlo con la mano en el centro del estaquillador:
Manolete es uno de los que vendrá a decir que eso de cargar la suerte 'es simplemente una ventaja para el torero puesto que se desvía más fácilmente el camino del toro, yo lo veo como una ventaja'. Nosotros, no: entendemos que para hacer eso se necesita mucho valor, sobre todo si se carga la suerte con el toro arrancado. Pero reconoceremos que Manolete suplía esa posible falta de hondura al situarse de perfil con su quietud y su personalidad.
Con más autoridad que nosotros, le contesta Marcial Lalanda: 'Manolete se arrimaba muchísimo pero siempre fue un torero corto y no cargaba la suerte, lo que es, para mí, la base de todo toreo clásico. Dejaba pasar el toro, cultivaba con evidente personalidad el encimismo'.
Otro que opinaba como Manolete era Espartaco cuando decía que 'para mí, cargar la suerte es bonito en algunos momentos, pero en otros eso desplaza el toro hacia otro sitio. Al cargar la suerte con la pierna, indudablemente ahí el toro se desplaza. Puede quedar una fotografía bonita porque luego sigue hacia adentro pero en realidad el toro ha hecho un recorrido más amplio'.
Pero fíjense en esta foto de 'Chicuelo' en Sevilla en los años veinte. Seguro que adelantará la pierna derecha ¿a que sí? Nada que ver con el cite de Perera que criticábamos aquí (porque eso de que en el primer pase hoy todos adelantan la pierna no es verdad). Por cierto, Chicuelo va a dar un 'natural con la derecha', si se nos permite la expresión:
FOTO: Meléndez
|
Y otro que creemos que adelantará la pierna en este pase es Antonio Bienvenida:
Manolo Vázquez decía una cosa al respecto que nunca hemos entendido: 'la suerte se carga con el pecho, con la cintura y con los brazos pero en absoluto adelantando siempre la pierna'. Creemos que lo hace para arrimar el ascua a su sardina del toreo a pies juntos aunque de su frase se deduce que sí reconoce que también se carga la suerte con la pierna.
Le contesta de nuevo Lalanda: 'el toreo a pies juntos es airoso, bonito, pero se hace con el toro que va y viene, se domina menos, alargas menos el pase, mandas menos y la terminación suele ser menos lucida'. El diestro madrileño recordaba un bravísimo toro de Albayda que le ganó la partida precisamente porque reconocía que no se atrevió a adelantar la pierna antes del embroque para así dominarlo. Véanlo aquí al natural con las zapatillas apuntando al toro, cosa, como decíamos antes, difícil de ver en nuestros 'maestros' actuales. Lalanda enseña el medio pecho y el muslo, el otro, como los dos de antes, enseña la cadera y esconde la pierna de salida:
Para nosotros, al toro moderno se le puede cargar la suerte de dos maneras. En primer lugar, citándolo de lejos como hizo este año Talavante en Madrid o como hacía Rincón alguna vez, no siempre, aunque, para nuestro gusto, con el compás excesivamente abierto.
Lo hizo Talavante en el pasado San Isidro y lo alabábamos aquí. Este es el instante en que se aprecia cómo el toro varía la embestida tras el movimiento de la pierna contraria del diestro. Gran emoción y, a nuestro modesto entender, gran riesgo, por eso se ayuda con el estoque:
Se podrá cargar, en segundo lugar, adelantando la pierna levemente en cada pase. Si se hace así y se remata en la cadera, el toro va comiéndote el terreno y no se podrá dar más de tres o cuatro pases sin verte 'obligado' al de pecho. Eso sí, el toro acabará muy quebrantado. Hoy en día hay tandas de diez o doce pases y se remata por alto o con el de pecho para terminar de una vez, no porque el toro obligue a nada. Y este toro actual aguantará cien mantazos porque no va quebrantado.
En los comentarios a esta entrada, nuestro amigo Joan nos recomendaba este vídeo de José Tomás de 2008. Observen a partir del 0'53'' que carga levemente la suerte y en algún pase pisa terrenos comprometidos. Asimismo, da el medio pecho, como decía Nicanor Villalta.
Pero ojo porque a partir del 1'38'' se dedica a aprovechar el viaje del toro y su forma de hacer no se diferencia en nada de la de Perera, Manzanares, El Juli, Castella, etc. Hay un bonito trincherazo, eso sí.
Este verano Urdiales dio una de cal y otra de arena respecto a torear y destorear. Recuerden que lo comentábamos aquí.
Permítannos una curiosidad: en este vídeo se ve al Pana dando dos pasitos para ir obligando al toro -hagan abstracción del animal porque es Norit el borreguito-. Si destorease poniéndose de perfil y acompañando el viaje, le podría dar diecisiete pases seguidos y rematar por aburrimiento. Pero no, obliga al toro sabiendo que lo va a romper, como así sucede cuando lo mata de un trincherazo.
3. CON EL TORO POSMODERNO YA NO HACE FALTA CARGAR NADA.
Con el toro del último tercio del siglo XX y, sobre todo, con los toros del siglo XXI que las figuras se traen del campo bajo el brazo, ya no se domina el toro desviándole la embestida. Simplemente, se le acompaña.
Lo intuía Cossío en 1947 (lo que dice vale perfectamente para hoy en día):
'El toro va por su camino mientras el diestro presencia su paso'. Eso es lo que tantas veces hemos censurado en nuestro blog, acompañar el viaje del toro componiendo la figura. Cossío escribía estas líneas para, acto seguido, alabar a Rafael Vega de los Reyes porque había cargado la suerte toreando a la verónica:
Esa es otra, no vale cargar correctamente la suerte en la primera verónica pero limitarse a echar atrás la pierna de entrada para componer la figura en la segunda como vemos tan a menudo. De igual modo, con la muleta tampoco vale adelantar la pierna pero citando fuera de cacho (fíjense en cómo Chicuelo no estaba fuera de cacho en la foto de más arriba).
Antonio Bienvenida, cuando intentó matar 12 toros el mismo día (1960)
|
Pero volviendo al toro posmoderno, el que 'gatea', este ya viene dominado de la finca. Lo ha dominado el ganadero con la selección. Si al toro posmoderno lo toreas en redondo, obligándolo y rematando en la cadera, no te dura más de doce o catorce pases porque se destronca. Por eso hay que ir 'apartándose' de él y componer la figura cuando entre en jurisdicción. Decía Lalanda en los años ochenta que 'hoy, por desgracia, lo habitual no es cargar la suerte sino lo contrario, descargarla, echar la pierna atrás':
Se ha sustituido el dominio buscando la estética por un tiovivo bastante ridículo que también busca la estética pero, a nuestro entender, sin riesgo, sin emoción y sin hondura. Y con mucho aburrimiento, la misma faena al mismo toro todas las tardes. Y, al día siguiente, los mismos elogios de los mismos taurinos sobrecogedores y las mismas fotos de salidas a hombros. Lo comentábamos aquí.
Se nos dirá que tenemos prejuicios, que hemos de adaptarnos a este destoreo moderno, que la sociedad ha cambiado, que deberíamos adecuarnos a los tiempos que corren para ir a disfrutar y no a enfadarnos... Todo lo que ustedes quieran, mas este destoreo que nos toca vivir será lo que sea pero, insistimos, tiene menos riesgo, menos emoción y menos hondura que el toreo de verdad. Nadie puede negarlo aunque lo justifique.
En este blog hablan también de 'cargar la suerte' en línea parecida a lo que aquí hemos comentado. Nuestro amigo colombiano acaba diciendo:
'Cargar la suerte es un componente ético, técnico y estético de la lidia de toros bravos. Un logro de la ciencia taurina, como para venirlo a botar a la basura en 12 años'.
Lo único que podemos decir es '¡Viva Colombia!'
Esperemos que haya quedado clara nuestra idea y confiemos en no haberles aburrido más de lo reglamentario.
Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.
Magnífica lección. Deberían crear una cátedra de Tauromaquia en Cataluña, con sede en Tarragona y contigo al frente. Dado que en ella no se "maltratarían animales" no iría en contra de las ideas de los políticos que se cargaron los Toros en la taurina Cataluña.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, me alegro de que estemos de acuerdo (a ver si no somos los únicos).
ResponderEliminarRespecto a lo otro, me consta que usted, en la mismísima tierra de El Fandi, tuvo algún problemilla a cuenta de los antitaurinos con su Aula Taurina. Imagínese lo que ocurriría por aquí ¡me iban a dar hasta en el carnet de identidad!
Saludos cordiales.
Rafa, gran post. Mucho se ha escrito sobre "cargar la suerte" y el tema da para una tesis doctoral. De entrada dos objeciones:
ResponderEliminar1. Ojo con adelantar la pierna cuando el toro ya está arrancado (a lo Rincón en el primer muletazo cuando daba distancia) perdonadme, pero en mi opinión eso no es cargar la suerte, sino CAMBIAR la suerte. Un quiebro en toda regla, echándose el toro para fuera. La pierna adelantada debe estar desde el cite y aguantar la pierna adelantada durante toda la embestida del toro pasándoselo por la bragueta. Porque sino estamos en el zapatillazo de Ponce, donde se cruza y adelanta la pierna, pero no carga la suerte, lo despide para fuera (con el pico) y compone a cabeza pasada.
2. Frascuelo, torero cuya ortodoxia ambos admiramos y que tu tan bien describiste en el post de Céret, decía el otro día en Barcelona (hablando del tema) que un torero cargar la suerte simplemente, cuando no la descarga. Jajaja...parece una chorrada, pero es una buena explicación. ¿Sino la está descargando, significa que la está cargando? Luego desarrollando su argumento, veías que éste era extraordinariamente simple (no por ello menos cierto). Es decir, su fundamentación no nacía de una explicación detallada de la embestida del animal, geométrica, metafísica (como algunos a veces nos empeñamos) sino simplemente ergonómica. Natural, desde la perspectiva del torero. Cuando uno gira, sino pone la pierna delante tiene que hacer equilibrios para no caerse. Pruébenlo, toreen de salón y comprueben lo incómodo y la pirueta que hay que hacer equilibrando el peso del cuerpo para girar "echando la pata atrás". Si lo hacen con el peso de una muleta "montada" verán que es mucho más difícil. Es como que para andar hay que poner un pie delante de otro, ¿no? ¿se puede andar sin poner un pie delante de otro? Pues sí, pero...como que es "antinatural"...
Y tengo más objeciones eehh Rafa. Eso de que Manolete no cargaba la suerte...En fin. Luego sigo.
Un saludo.
Gracias.
Eliminar1ª objeción: ya has visto que Neira hablaba de que un par de banderillas al quiebro se hacía 'cargando' la suerte. Eso del 'cambio' que tú comentas lo aceptaría si fuese una cosa exagerada como en un par al quiebro. Pero si es una cosa que se hace con suavidad y discreción y, con ese leve adelantamiento de la pierna, consigues desviar la embestida del toro, a mí me parece que sí es cargar la suerte. No sólo eso sino que me parece una de las cosas más emocionantes del toreo. Creo que las dos fotos congeladas de Talavante lo ilustran bien. Y también era la opinión de don Antonio Bienvenida, que conste.
2ª objeción: ¡cómo disfrutamos en Céret con Frascuelo a pesar de que delante tenía un torete! Espero que los aficionados más jóvenes pinchen en el enlace, vean las fotos y lean cómo intentamos justificar que lo que hizo aquel día era todo lo contrario al destoreo de las figuras.
En el destoreo ya has visto que hasta 'tu amigo' López Simón pivota ¡sobre los dos pies! para seguir manteniendo el equilibrio, eso sí, de perfil y echando la pierna atrás. Exactamente igual que las figuras.
Ojo porque si discutes lo de que Manolete no cargaba la suerte te estás aprovechando de que el pobre Marcial ya está en el otro mundo. Su opinión al respecto ya has visto que era clarísima...
Saludos (lo de tu amigo López Simón era una broma, ¿eh?)
Gran entrada, que restablece un poco de orden y criterio entre tantas "razones incorporeas" que intentan hacernos comulgar con ruedas de molino, tergiversando conceptos sin tener en cuenta el tipo de toro que se lidiaba antiguamente y el carretón que se se suele destorear hoy.
ResponderEliminarEn lo de Manolete, estoy de acuerdo con Marcial Lalanda. Siempre he pensado que su toreo es el principio de lo que tu llamas el toreo postmoderno, y la raíz de todos sus vicios y tropelias, en el ruedo y en los despachos.
Enhorabuena por el post.
Un saludo.
Tauro
Gracias.
EliminarUn aficionado muy cabal me decía este verano que me encargase de contestar a los que intentan convencernos de las bondades del destoreo actual pero la verdad es que me daba mucha pereza empezar a polemizar por ahí.
Al final he puesto aquí mi opinión intentando razonarla y, sobre todo, usando los argumentos de algunos de los grandes maestros que nos reafirman en lo que muchos lectores de nuestro modesto blog consideramos que es el toreo de verdad.
Saludos cordiales.
Cuando un torero carga la suerte, se avivan todos los sentidos del espectador. En cambio cuando están con el tiovivo. Sólo levanta el bostezo.
ResponderEliminarEnhorabuena por el excelente artículo
ResponderEliminarEstupendo trabajo que deben leer los aficionados que tantas dudas tienen sobre el tema
ResponderEliminarMuchas gracias a los dos. Me decidí a escribir este comentario pensando en los aficionados más jóvenes, que al final pueden terminar pensando que lo auténtico es destorear y no torear.
EliminarAmigo Tauro, las razones han de tener cuerpo. Creía que me estaba volviendo loco cuando estaba a punto de creer que el destoreo es torear. Menos mal que puse remedio a tiempo...
ResponderEliminarUn abrazo.
A ver si usted nos va a abandonar pasándose al destoreo de moda. Como decía el amigo colombiano, lleva usted muchos años de aficionado como para "botarlos a la basura".
EliminarRafa, es que las "razones sin cuerpo" me estaban comiendo la moral. Me daba tanta pereza oponerme a semejantes falacias que estaba a punto de que me gustara la mano hipersúperbaja de Julián, o el tío vivo de Manzanares. Pero tranquilo me reconduje a lo que tiene que ser...
ResponderEliminarMenos mal, porque nos estamos quedando más solos que Custer en Little Big Horn.
EliminarQue opinión le merece lo que expone sobre el tema Pepe Alameda en su libro "La arquitectura del toreo moderno"?
ResponderEliminarMe coge usted en el campo viendo toros. A la vuelta comentamos, que voy escribiendo con el móvil.
ResponderEliminarGran artículo. Gente así es lo que hace falta en el mundo de los toros. Saludos
ResponderEliminarGracias. En ese mundo no duraríamos ni un minuto. Afortunadamente, no vivimos del toro y podemos decir abiertamente lo que pensamos.
ResponderEliminarSaludos.
Enhorabuena Rafa, una vez más. Llevamos días unos cuantos aficionados debatiendo de todo esto (que tiene tela que cortar, tanta como opiniones y puntos de vista).
ResponderEliminarMe gustaría saber, al hilo del nombre del blog, qué es para ti la hondura al torear?
Lo dicho, parabéns por el blog. A ver si coincidimos pronto con el amigo Marco en una de esas plazas de Dios.
Un abrazo,
Óscar
Muchas gracias.
EliminarLa hondura sería el resultado de aunar tres cosas: la emoción del dominio, la sensación de riesgo y todo envuelto en la naturalidad de lo que se hace sin esfuerzo. Obsérvese que para que se dé esto es clave que delante haya un toro, no una ternera bobalicona.
A mi entender, el empaque no es equivalente a la hondura. Se puede tener empaque unido a gracia y temple (como Curro o Pepe Luis hijo) y empaque con poca gracia pero con hondura (El Viti o Chenel). Quizá en medio de los dos podríamos poner a Paula (y cito estos toreros por circunscribirme a los que he llegado a ver).
El nombre del blog no se lo puse yo, que conste. Fue iniciativa de una serie de aficionados serios de diferentes sitios de España cuando no era un blog sino una auténtica asociación.
Saludos cordiales.
A Er Polan:
ResponderEliminarLe respondo sobre lo que me decía más arriba de Pepe Alameda.
Su teoría es que el toreo puede ser natural o cambiado. Natural, cuando se da salida al toro por el mismo lado que se sostiene la muleta (ejemplo, el pase natural); también lo denomina 'hacia adentro', 'toreo de reunión' o 'hacia atrás'. Cambiado sería cuando se da salida al toro por el lado diferente al que sostiene la muleta (ejemplo, el pase de pecho); también lo denomina 'contrario', 'hacia afuera' o 'toreo de expulsión'. Domingo Ortega sería un ejemplo máximo de este último y Manolete del primero.
A veces Alameda se apoya en opiniones de Bleu/Borrell, como cuando alaba torear con las piernas no separadas. Es algo arriesgado porque Bleu dice en ocasiones cosas cuando menos sorprendentes como criticar a Guerrita porque 'muleteó toda su vida con las piernas abiertas' (?) o asegurar que Frascuelo daba 'seis lances de muleta -sic- ejecutados en un círculo de tres metros', cosa que no se puede ni imaginar si no es desde la idolatría que él sentía por don Salvador.
Dice Alameda cosas que se nos antojan contradictorias. Por ejemplo, afirma que un natural sería, lógicamente, toreo natural o hacia adentro pero habla de que, al cargar la suerte adelantando la pierna, se echa uno el toro afuera y, por tanto, sería toreo 'hacia afuera' o 'cambiado' ¿Cómo se puede ser las dos cosas a la vez en el mismo pase? No lo terminamos de entender quizá por culpa nuestra.
Tampoco entendemos que diga que Belmonte, a quien vio torear, 'ejecutaba su natural hacia afuera' (?) Véase simplemente la foto de Alfonso en nuestra entrada.
Hemos leído por internet algunas cosas un tanto inspiradas en esas teorías. Hablan algunos de torear 'en ocho' o 'en cero'. Copiamos nuestra opinión de un comentario a una entrada anterior:
'Este invento del 8 y el 0 no es más que 8 para el toreo y 0 para el destoreo. Hay que adelantar la pierna y ganar terreno al toro cuando hay que dominarlo, eso sería el 8. Si no es el caso, con aprovechar su viaje y componer la figura perdiendo terreno en lugar de ganarlo, es suficiente. O sea, el 0'.
Pero coincidiremos totalmente con Alameda cuando, hablando del toreo al natural de Gallito, diga literalmente: 'el punto básico de la suerte es la pierna izquierda del torero, no se mueve de su sitio inicial durante todo el transcurso de la acción: la pierna 'eje', el fundamento del toreo en redondo'.
Saludos cordiales desde Tarragona.
Probablemente todos los que estamos aquí estaremos de acuerdo con la concepción belmontista, lalandista y vidalista de "cargar la suerte". Es decir, pierna adelantada y quedarse en el sitio ganándole terreno al toro hasta el "obligado de pecho". Pero, insisto, no creamos que adelantar la pierna es siempre, bajo mi punta de vista, sinónimo de cargar la suerte, puesto que cuando se utiliza en el cite para desplazar para fuera la embestida del toro hablamos de cambiar la suerte y no cargarla. Caso paradigmático Ponce.
ResponderEliminarSobre Manolete, me quedó pendiente, evidentemente toreaba de perfil, retrasando la muleta y él entendía el "cargar la suerte" como una ventaja. Cuando yo decía antes que cuidado con decir que Manolete no cargaba la suerte, ¿queremos decir entonces que Manolete descargaba la suerte? ¿Sino la descargaba, entonces la cargaba? Quiero decir, Manolete no adelantaba la pierna, pero no la ATRASABA (descargar). Nada que ver con los ejercicios de equilibrismo y gimnasia que vemos en la actualidad (que sí es descargar). Me encantan las tertulias taurinas, de lo que más me puede gustar en este mundo, pero cuidao con los dogmáticos...
En lo que creo que ambos seremos dogmáticos es en calificar esos ejercicios actuales de 'equilibrismo y gimnasia' como destoreo total y absoluto. El atraso de la pierna, el no ganar terreno al toro, el componer la figura a su paso y demás lindezas del destoreo de nuestras figuras hace que, por lo menos yo, sea dogmático en no tragar con ello.
EliminarSaludos cordiales.
Buenas tardes Rafa. Muy bien esplicado, fenomenal, y espero y deseo que hayan caido por aqui un monton de aficionados jovenes para que pillen de que va esta histoira. Que como bien he leido ahi arriba, Cuando uno ve cargar la suerte y vaciar la embestida detras, a uno se le remueve hasta el tuetano de la emocion, y con lo otro se aburre en esceso. Un saludo, ha sido un gozor leer esto.
ResponderEliminarKaparra
Me alegro, gracias. Precisamente lo que me decidió a hacer esta entrada fue pensar en los aficionados jóvenes que, acostumbrados al destoreo actual y a los corifeos habituales, al final creerán que lo de hoy es el toreo de verdad. Ni por asomo.
EliminarUn saludo.
Hola Rafa, encantado de haberte conocido ayer en Tafalla, soy el chico de Barbastro. Me ha gustado tu crónica, pero este artículo, que hace tiempo leí, tendría que repartirse en octavillas a todos los aficionados a la entrada de cada corrida de toros, cómo cambiaríamos el toreo ventajista actual. Me permito compartirlo en Facebook, nos vemos pronto, saludos y al toro!
ResponderEliminarGracias por compartirlo y encantado de saludarte. En esta entrada encontrarás un cartel de Barbastro histórico tal como te comentaba ayer:
Eliminarhttp://toreoenredhondo.blogspot.com.es/2015/09/teoria-del-arrimon.html
Saludos.
Buenas tardes Rafa,
ResponderEliminarEnhorabuena por el post, muy didáctico.
Un par de preguntas y cuestiones.. a ver como las ves..
- Cuando por la condición de la res te obliga en torearla más en línea.. se está cargando la suerte? O se está acompañando? La llevas dominada al torearla más en linea?
- Acompañar la embestida es destorear?
- En el toreo lineal.. Es destoreo acompañar el viaje del toro componiendo la figura?
- Para cargar la suerte es necesario variar la dirección de la embestida?
Un fuerte abrazo.
CARLOS
Gracias, me alegro de que te haya gustado.
ResponderEliminarEn lo de torear en línea hablamos más del remate del muletazo que del inicio donde se cargaría la suerte. Dicho así, podríamos convenir en que se puede cargar la suerte pero luego rematar el pase abriendo la puerta, con lo cual no resulta el toreo hondo de verdad.
Respecto a llevar al toro dominado, en mi opinión no se domina lo mismo toreando en línea que rematando el pase atrás. La prueba es que los toros posmodernos al uso no aguantan el toreo hondo bien rematado porque 'se rompen'. Por eso nuestras figuras los torean en línea y así les duran cincuenta o sesenta pases.
Las reses revoltosas (que no tobilleras, que es una memez) pueden exigir en un momento ado que les abras la puerta porque si no, al segundo muletazo te han comido todo el terreno. Pero es que hoy en día se lo hacen a la ternera y a eso no hay derecho. Aunque, como te decía, la ternera se rompe si rematas en la cadera...
Acompañar la embestida no es torear si a ese acompañamiento le sumas apartarse de su viaje y echártelo fuera al rematar. O, por lo menos, sería torear sin hondura y sin verdad. Al componer la figura, te hacen una foto en mitad del muletazo y, como no se ve el cite descolocado ni el remate hacia afuera, parece un cartel de toros.
En el primer muletazo, si cargas la suerte cuando el toro ha iniciado el viaje, varías la dirección de su embestida, pero es en el primero. En los siguientes yo acepto una cierta ubicación un tanto de perfil para poder ligar pero lo inaceptable es torear para atrás, esconderse del toro para aprovechar su viaje.
Algunos lo discuten porque dicen que te echas el toro afuera al adelantar la pierna de salida pero yo creo que eso requiere mucho valor. Los que dicen que cargar la suerte es variar la dirección de la embestida para aliviarte llevando al toro lejos son los toreros modernos que intentan defender sus perfilerías. Yo entiendo que enseñar el muslo entraña un riesgo mientras que mantener la pierna atrás...mucho menos.
Saludos.
Muy buenas Rafa, tengo varias preguntas:
ResponderEliminar1º- ( No es pregunta) Sobre cargar la suerte con los brazos cuando nombras a Frascuelo en Ceret, me encantaría que revisaras la forma que tiene Alberto Pozo de lancear de salida a Aforadito de Raso de Portillo, para ver si estamos hablando de lo mismo...Te dejo aquí el link: https://www.facebook.com/watch/?ref=search&v=515715202494867&external_log_id=e1a2d895-6221-4be2-bb3d-452185978dbe&q=aforadito%20INDULTO%20pozo
Si es así me encantaría comentarte algo que me dijo al respecto.
2º- Crees que un toro postmoderdo/moderno siendo picado sin peto , oliendo la sangre como indicas desarrollaría en carácter de "toro antiguo"
3º- Te gustaría ver una corrida sin peto con toros de hoy, cómo acabaría eso ?
4º- Has leído lo que ( tu amigo) Morente escribe en su Blog sobre CARGAR LA SUERTE, si no lo has hecho, te lo recomiendo te sorprenderá.
5º- No me acaba de quedar claro si bajo tu concepto se puede cargar la suerte A PIES JUNTOS.
6º- Conoces personalmente al Colombiano del Blog Descabellos?
Un saludo y gracias. Jesús Herranz
1. Lo veré.
Eliminar2. Creo que sí alteraría su carácter aunque de manera directamente proporcional a la casta que llevase dentro. Pero hablar de esto es una entelequia.
3. No, de ninguna manera. Ni me lo planteo.
4. Me consta que el señor Morente es lector de nuestro modesto blog y en una ocasión en que intervinopor aqui se lo agradecí porque lo lee sabiendo que no estamos de acuerdo. Pero cada uno de los dos se esfuerza en razonarlo con educación, eso es lo importante.
5. No o por lo menos no con la enjundia ni la hondura con que se hace con la pierna.
6. No, no tengo el gusto.
Saludos.