jueves, 28 de marzo de 2024

CÉRET DE TOROS, 2024 (2): LOS NOVILLOS DE BARCIAL EN SUS 100 AÑOS DE ANTIGÜEDAD

La novillada ceretana será el día de San Fermín y la antigüedad oficial de la vacada es de un día antes. Pero hay un misterio acerca de si la fecha es correcta. Lo dejamos para el final ya que esa disquisición es sólo para los muy cafeteros.

Cuando estuvimos el año pasado en la finca ya les enseñábamos algunos erales que esta temporada iban a cuajar en novillos imponentes. Los de la ADAC estuvieron al quite y reservaron un encierro que les vamos a enseñar para abrir boca.



Miren cómo lucia el verde tras un invierno muy bonancible y unas lluvias perfectas y abundantes:



Bueno, y miren también al novillo, que para eso estamos. Es entrepelado, lucero y carinevado:



Este de abajo de momento se ha quedado atrás porque se está recuperando de una pelea en que sus hermanos le dieron cera. Es lucero, caribello y gargantillo:



El primero que veían es el 27, un novillo rebarbo, negro mate, lucero, bragado, meano corrido, axiblanco, girón y pialbo:



Éste parece que se burla del fotógrafo. Se llama Gitano:



Las arboladuras no son moco de pavo, ¿eh? El tal Gitano es negro berrendo, calzón, también pialbo y rebarbo:



Antes de que nos pregunten qué es eso de pialbo, vayan a esta entrada y lean los comentarios.

El siguiente es el 29, un berrendo en negro, coletero, alunarado, careto y casi capuchino:



Los leyentes más fieles saben que mantenemos una cruzada para que se utilice debidamente el calificativo de coletero. Viene de cuello, del latín collum, y no de cola. Si el vocablo hubiese derivado en cuelletero, que no existe, no habría confusión pero al no ser así, lo de coletero se usa para colas blancas y eso es incorrecto. Lo contábamos aquí.

Una manchita más bien leve sería gargantillo como vimos más arriba. Ésta es más grande y corresponde a coletero. Ahora se ve perfectamente en su colosal badana:



Hay que ver con qué zarandajas les mareamos, esperemos que nos disculpen. ¿Se han fijado en la manchita del hocico?

Es que el 35 tiene otra muy curiosa casi redonda en el mismo sitio que lo haría bociblanco. Es parecido al anterior, berrendo en negro, careto, coletero, alunarado y con algo llamativo en el rabo:



Ese rabo es una mezcla de rabicano por abajo y rabinegro por arriba. Lo de rabinegro no consta en los accidentales oficiales pero lo hemos acuñado nosotros porque de alguna forma habrá que denominar un rabo negro en un berrendo con tanto blanco:



Aquí nos encontramos a uno husmeando cerca de la valla:



Ahora levanta la cara y los pitones se hacen más ofensivos. Es el 36:



Lo veíamos antes cuando les hablábamos de lo verde que estaba el campo. Es un negro entrepelado, nevado, bragado, meano corrido, axiblanco y calzado de pies:



Su hermano es el 47, un negro, lucero, bragado, meano corrido y no se ve si es patialbo, a ver en la otra foto:



Efectivamente, lo es, además de rabicano, ahí lo tienen. Largo como un San Balandrán y muy serio aun teniendo menos cara que algún otro de los que han visto:



Los novilleros serán el conquense Mario Arruza de quien no descarten que se vaya a porta gayola en Céret aunque lo que debería corregir es lo de cruzar al entrar a matar. El segundo es el salmantino Jesús de la Calzada, cuyo tío reside en Barcelona y es habitual de este coso. Con su hijo en la arena pasará muchos más nervios que hasta ahora. El tercero es el gaditano Andrades, a quien habremos visto en San Agustín del Guadalix matando uno de Isaías y otro de Raso de Portillo. Matará en dos tardes más encastes diferentes que nuestras queridas figuras en toda una temporada.

Como decíamos al principio, se lidiarán al día siguiente del centésimo aniversario de la antigüedad de la vacada, a la que se rendirá homenaje por ello antes de empezar el festejo. En estas cosas donde se junta la tradición con la liturgia, la ADAC siempre está al quite.

Ya saben que el mezclador original de vacas veragüeñas con un semental de Santa Coloma fue José Vega (salvo que alguien nos rectifique, aquel semental se llamaba Cuchareto). El hierro inicial de la V no era de Vega sino del ganadero de manso Primitivo Vacas, recuerden esta entrada de la serie que dedicábamos a los patasblancas. En aquella época no te podías dibujar tú el hierro y había que comprar uno porque Vega no tenía.



A los cuatro años venderá todo a los hermanos Villar, de Zamora. Victorio liquidará su mitad en 1923 al señor Encinas y de éste pasará a la familia Galache. El otro, Francisco, es el que nos interesa porque aguantará más su otra mitad y es precisamente ella la que da antigüedad a Barcial y a otros hierros que se derivaron. Miren el cartel del festejo que protagoniza ese centésimo cumpleaños que celebraremos en Céret:



El año anterior la Asociación de la Prensa había instaurado el premio de la oreja de oro por votación popular, que se había llevado Nicanor. Aquí no pudo repetir y se la adjudicó el trianero Maera junto a una para cada ganadero porque gustaron mucho sendos ejemplares.

Francisco Villar decidió cambiar y comprar ganado de Vicente Martínez, bastante comercial en la época. Vendió su vacada al millonario de Terrubias Arturo Sánchez Cobaleda, el bisabuelo de Jesús Cobaleda, actual propietario. Los lectores del partido gallináceo igual se soliviantan con lo que hemos dicho de Martínez pero la célebre encerrona de Gallito con los seis toros de esa ganadería fue el equivalente a que El Juli el año pasado se hubiera encerrado en Madrid con seis juampedros.



Vamos con el misterio. La corrida que da antigüedad a Barcial es del 5 de julio de 1924 y parece ser que luego se cambió a la oficial actualmente que es del 6 de julio, ignoramos por qué. Observen que en el árbol anterior pone la que tendría que ser. La comparte con Castillejo de Huebra, de otra rama de la misma familia Cobaleda, que ahora son murubes.



La divisa morada y roja original con el hierro de los hermanos Villar fue a parar a esta otra rama y sirvió para herrar lo que eran patasblancas de Sánchez-Cobaleda. Pero héteme aquí que su antigüedad no es ni del 5 ni del 6 de julio sino del 8 de junio de 1924. 

Resulta que aquel día se anunciaron tres de Terrones y tres de Encinas y los torearon Valencia II, Pablo Lalanda y Fuentes Bejarano (esa misma tarde moría el novillero Manole en Almería). Bejarano tomaba la alternativa, hablábamos de él aquí. Cuando paseaba por Sevilla con su sombrero y su capa española, siempre olía a torero y algunas veces... a manzanilla. Otro de los cuatro hierros que tiene la familia de don José Manuel y doña Pilar es el de Terrubias, que usaban para sus santacolomas y que también tiene antigüedad de 8 de junio de 1924. Éste es el original de los patasblancas de los Villar, elegantísimo:



Para acabar de liarla, aparece en el Cossío que la corrida con los toros de Francisco Villar en la que triunfó Maera fue ¡el 11 de julio! Creemos que debe de tratarse de un error. También pueden recordar esta entrada sobre la ganadería y no dejen de leer los comentarios:



La continuación de la historia a partir de don Arturo Sánchez Cobaleda es que a su muerte en 1942 se anunciaron sus toros a nombre de sus herederos y en 1950 es cuando se divide entre los cinco hijos, siendo Jesús el que debuta en Madrid con toros el 16 de mayo de 1953 y cuyos animales son los antepasados directos de los que se lidiarán en Céret. Aquel encierro lo mataron Rafael Ortega, que sustituyó a Ordóñez, Jumillano y Pedrés. Quiere ello decir que esta vacada que veremos en Francia ha sido propiedad de Arturo, Jesús, Arturo y Jesús.

Relean esta entrada donde en aquella misma serie sobre los patasblancas hablábamos de estos luceritos, como los denominaba Joaquín Vidal.

Volviendo a la novillada de Céret, tengan en cuenta que faltan tres meses y medio para que salten al ruedo ceretano y que en Salamanca es cuando los toros pegan el estirón. Si les han impuesto respeto, ni les contamos lo que será estar delante de ellos con el cuajo y los kilos que habrán cogido para entonces:



Allí nos encontraremos, Dios queriendo, y por aquí se lo contaremos.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa. 

Esperen, no se vayan porque hemos puesto aquí abajo fotos de dos barciales para que comparen las hechuras. Les separan más de sesenta años. Una es de 1957 y la otra, de la concurso de Cenicientos en 2021:





lunes, 25 de marzo de 2024

DAN UNA OREJA MATANDO CON UN BAJONAZO EN MADRID

Y eso que la faena no había sido como la del Montepío de Belmonte... Teníamos dos titulares y nos hemos decidido por el que han leído dado que nos encontrábamos en la que algunos califican como primera plaza del mundo. 

El otro era éste: ¿QUIÉN DICE QUE LOS CUADRIS NO QUIEREN BANDERILLAS? Bueno, hasta Luis Cuadri lo dice pero nosotros siempre hemos creído que es uno más de los lugares comunes que repiten hogaño tanto taurinos como no taurinos. Se nos antojan más difíciles de banderillear los garcigrandes, fíjense. Los de Cuadri, si te quitas la psicosis recurrente y repetitiva en este tema, se pueden saldar en el segundo tercio como cualquier otra vacada. Este festejo fue la prueba irrefragable como les iremos mostrando:



Los peregrinos de Cuadri se citaron para ver el retorno madrileño en corrida de seis toros de la divisa tricolor. Vinieron de toda España y parte del extranjero. Ellos desean, deseamos, que esta ganadería triunfe. No todos los peregrinos son cuadriadictos. Los cuadriadictos se distinguen por tener un cierto cariz de feligresía.

Les contaremos que hubo tres de ellos que al finalizar el festejo isidril de 2019, que fue un fiasco, abordaron a don Fernando con idea de justificar lo injustificable. El buen ganadero no les dio ni opción porque empezó hablando él pidiéndoles disculpas por lo sucedido, sin aceptar paños calientes.

Dos tercios de entrada con precios por las nubes. La localidad de grada en sombra, a 39 euros del ala:



La presentación de los toros fue imponente, con trapío y mucha seriedad, ofensivos aunque sin cuernos antediluvianos. Y en puntas, cosa que esta temporada está empezando a ser algo digno de resaltarse cuando tendría que constituir la regla. Alegres en general en su galope al caballo pero afligidos después al ver que su empuje era neutralizado por los mamuts de Equigarce. En la muleta se fueron parando pero no fue el aplomo desesperante de la última vez. Pensamos que dieron unas ciertas opciones a los diestros que éstos no terminaron de aprovechar, más abajo se lo contamos.



Vamos antes con unas frases de Luis. "A un toro nuestro cuando sale tan parado y descastado tienes tendencia a pensar que igual le sobran kilos". Ahora los corren más que con Fernando el viejo aunque no hubo diferencia de romana ya que este encierro dio una media de 596 por 602 de aquélla de 2019. Sí nos parecieron más vareados, sin esas barrigas que llamaban la atención antes. Realmente no aparentaban los kilos que marcaban.

"Las cuadrillas muchas veces dan un mitin de capotazos y el picador, otro picando". Hombre, en este festejo el mitin fue de los piqueros ya que los segundos tercios no fueron el desastre de otras veces. Pero el primer tercio sí fue el despropósito habitual. Mención especial merece Chacón, que repitió su nefasta actuación en Zaragoza con los de Palha ya que aquí ordenó sendas palizas inmisericordes a sus dos toros en el caballo.



"La evolución nuestra no debería ser hacia el toro más noble y más toreable . A nosotros nos gusta mucho el tercio de varas y que después aguante en la muleta pero eso es muy complicado". Efectivamente, eso es casi la cuadratura del círculo, sobre todo si los animales se desgastan intentando luchar contra la muralla no china sino equina, que es peor. Los cinco de ayer pusieron voluntad en el empuje pero se vieron derrotados por los elementos.

"Si la lidia es mala ahí ya tienes la excusa para pensar que si hubiera sido buena, habríamos visto un toro diferente y eso es un hándicap en nuestra ganadería". Pues insistimos en que las lidias no fueron tan nefastas como otras veces pero los primeros tercios sí resultaron infames en general.

"Más de treinta pases de muleta a un toro nuestro va en detrimento del torero y si no es en los medios, aún más". Los tres diestros se los sacaron a los medios pero más de uno apretó para adentro con ganas de refugiarse en la madera. Lo de los treinta pases habría que precisarlo porque si son pases donde el animal no va toreado, a esos treinta les pueden quitar ustedes diez o doce. Que los cuadris no quieren nada por arriba es un axioma pero los maestros siguen sin querer enterarse, eso no parece tener solución.




FERRERA. Su primero era castaño listón, albardado, lavado de cara y levemente anteado. Las fotos de los toros son del maestro Moore:



En el primer puyazo sufrió una carioca trasera y contraria que lo dejó bien escarmentado. Por eso en la segunda entrada tardeó mucho para cobrar traserísimo. Primer tercio de varas y primer desastre.



En el segundo, Ángel Otero y Fernando Sánchez demostraron que la psicosis con estos toros es algo que tiene solución si quien va a clavar banderillas es un profesional como ellos y no un turista.




Peor Sánchez, como han visto, aunque como es muy bueno y sabe que lo aplaudirán igual, da ese pasito de más para salvar los pitones. Afortunadamente marcaron el camino para el resto de la tarde, donde ninguno de sus colegas giró la cara a los cuadris. Sin duda fue lo más reseñable de toda la corrida.

Hizo bien Ferrera en sacarlo a los medios. Se echó la mano a la izquierda mientras el toro punteaba la tela deduciendo rápidamente que era un engaño. En el undécimo pase lo desarmó y el maestro se hirió en la muñeca con la punta del estoque de mentira.



En el pase número treinta el toro le dijo basta, ahí lo tienen:



Pinchazo malo y puñalada trasera a capón, más seis descabellos y, atención, muerte del toro en el platillo. La puñalada es chalequera, como se aprecia:



A ver cuántos mueren ahí de los ciento y pico que terminarán sus días este año en este coso. Observen las rayas porque entregó la vida en el centro del ruedo:



Su segundo era un negro zaíno, astracanado y con error ortográfico: bagonero



En el primero quiere empujar cabeceando pero le tapan la salida. En el segundo escarba muy a su sabor, tardeando porque se temía lo que le sucedió, una carioca en el espinazo. Miren la mano izquierda asesina cerrando al pobre toro:



Bien Murillo, a quien veíamos al principio de la crónica:



Y un poco pícaro de nuevo Sánchez, que se pasó de listo aunque lo ovacionaron igualmente. Así da gusto, ¿no les parece?



Algunos repiten que no banderillea de poder a poder pero para nosotros sí lo hace. Observen que espera a que se arranque el toro, y eso es justamente la esencia de esa suerte. Está quieto y no da ese primer paso que ven hasta que el toro inicia la carrera:



Ferrera empezó bullidor, pero el toro se le iba quedando debajo no por maldad sino por poca gasolina. Viajaba al tran tran y le sacó un buen pase, éste, el mejor de toda la tarde:



Bueno, en realidad el único bueno... ¡sumando los tres diestros! Emborronó todo con un bajonazo infecto a capón:



Tras el derrame, el toro rodó y entonces sobrevino la demencia. Demencial la petición no mayoritaria, también demencial Eutimio dando la oreja y no menos demencial la ovación al toro en el arrastre.


CHACÓN. Su primero era un castaño claro, carinegro, listón y con las coronas coloradas:



El diestro ordenó en el primero una barrenada de cárcel. En el segundo marró el picador y el toro empezó a blandear entre protestas.

Magaña y Cama siguieron sin psicosis:




No sabemos qué vio ahí abajo Chacón pero esta claro que lo que vio no lo vio nada claro. Desde el tendido el toro no daba tanto miedo como debía de dar en el ruedo, según denotaba la actitud del diestro. En el pase trigésimo cuarto el toro le dio un susto quizá enfadado por las prevenciones del maestro, que no lo toreó. 



Trasera atravesada, caída, saliéndose pero a pesar de ello, aplaudida de manera inconcebible en Madrid o en cualquier otro sitio. Fíjense qué manera de entrar a matar más estrafalaria:



Su segundo era un castaño claro, ojinegro y vareado de carnes:




No quería caballo pero por fin acudió para empujar mientras lo zurraban a base de bien. En el segundo, de largo, sufrió una vil recargada no por iniciativa del piquero sino cumpliendo órdenes de quien le paga.



Bien tanto Rojas como Magaña en banderillas, con excelente quite del director de lidia a éste último tras trompicarse.




De los cinco primeros pases que dio Chacón, dos los remató por alto soliviantando al toro. Cuando ya sumaba veintitrés y ni uno bueno, empezó a soliviantar al respetable. En el que hacía el veintinueve cortó por lo sano dado que el toro ya sólo lo miraba a él como diciendo 'pero, Octavio, mi alma, ¿qué es todo esto?'



Pinchazo sin fe más rinconera entrando siempre con el delantal, como ven, y encima escupiéndose. El cuadri murió en los medios, que conste:




GÓMEZ DEL PILAR. Su primero era uno castaño bociblanco, capacho pero cornalón, también vareado de carnes:



Primer puyazo vulgar al relance. En el segundo se vino de largo para recibir nada menos que cuatro agujeros de Sangüesa. Repitió Gómez poniéndolo de largo en el tercero intentando borrar el mal recuerdo de su comedia en otoño. Se vino alegre y el animal esta vez tuvo suerte porque el de a caballo sólo le hizo dos agujeros aunque uno casi en la penca del rabo. Un desaguisado de consideración, ya lo ven, con el pobre animal convertido en un colador.



Bien Mora en banderillas aunque se veía al toro embistiendo sucio el capote de Candelas.



Se confirmó esa circunstancia en la muleta pero el tal Taconero, si te embraguetabas con él, repetía embistiendo con cierta casta. El gozo se nos fue al pozo porque Gómez volvió a las andadas dejándole pensar e invirtiendo media hora entre pase y pase. Se le han ido muchos triunfos por ese defecto que no corrige y del que nadie le avisa.



No nos convenció en absoluto porque el toro era de tres tandas serias y seguidas, sin dudar, sin pensar tanto y echándose encima del toro. Hubieran hecho vibrar a una plaza en la que sigue teniendo cierta bula. La faenilla languideció tristemente y sin remisión.

Ha reconocido que nunca mira la suerte al entrar a matar, que sólo se fija en la cuadratura de las patas. Esto último, con todos los respetos, nos parece una sandez (a Lalanda también). Recuerden esta entrada. Pincha en la contraria porque el toro lógicamente le corta y después, en la natural, nuevo pinchazo malo seguido por un sablazo caído, trasero y tendido más descabello.



El sexto era negro zaíno, con un trapío sin exageraciones:



Tras la primera entrada se derrumbó pero se vio al vuelo que Gómez no quería el sobrero de Saltillo. Observen cómo echaba el capote a la andanada ya que prefería vérselas con Ironside antes que con un toro en plenitud. ¿No se daba cuenta de que estaba en Madrid? ¿Quién aconseja a estos hombres?



Salió el de Saltillo, veleto y gordito, enmorrillado, con una mirada inquietante:



Carioca poniendo la cara en la montura y repuchándose al poco, seguida en la segunda entrada por un buen romaneo con derribo:





En banderillas Candelas empezó poniendo este buen par:



Pero después adoleció de muy poca vergüenza como ven:



Hubo cinco pasadas para dejar cuatro palos de cualquier manera. Caigan en la cuenta de que el toro banderilleado con más miedo fue el de Saltillo y no los de Cuadri, para que luego nos vengan con milongas.

El cárdeno humillaba bien pero estaba asfixiado. Otra vez anduvo Gómez premioso, pensando demasiado y a la vez dejando pensar demasiado al toro. Siempre la misma historia.



La diferencia fue que ahora el público no tragó y arreciaron los silbidos. Sólo faltó que el de Saltillo empezase a darse cuenta de que no lo estaban toreando y decidiera ponerse tontito con toda la razón.

Casi entera caída, ladeada y pasada. Muy mal sabor de boca el que nos dejó el madrileño.



La afición salía con cierta decepción, sin echar pestes pero sí desilusionada porque de Cuadri siempre se espera lo máximo. ¿Podría haber dado mejor juego si no es maltratada de esa manera en el caballo? Seguramente. ¿Podrían haber sacado más jugo los toreros de estos toros? Gómez en su primero, sin ninguna duda y Chacón en los dos suyos, también. 

La presidencia, mal. El público, chicuelino en su gran mayoría. La empresa, eufórica porque con los precios que ha puesto, con los dos tercios de entrada que hubo y siendo una corrida barata de montar, las cuentas le salieron de sobras. El cajón de ayer les servirá para ir pagando a las figuras cuando aparezcan con sus toretes de mazapán.



Señoras y señores, pónganse la venda antes de la herida porque esta temporada en Las Ventas va a ser de un triunfalismo tan desaforado como indignante. Se van a batir récords de casquería y la puerta grande ya pueden dejarla abierta permanentemente. ¿Piensan que exageramos? Al tiempo.

Cubriremos todas las apuestas.

Saludos cordiales desde Madrid. Rafa.