NUESTRO REGALO DE REYES: LA CORRIDA DE CUADRI PARA 2019 EN MADRID

Aunque puede ser que lleguemos con retraso y ustedes ya hayan visto fotos en algún otro sitio. La corrida es para dentro de bastantes meses pero podría lidiarse ahora mismo porque está cuajada de sobras:

Nos dimos un paseo por 'Comeúñas' para ver los treinta y ocho toros que se lidiarán a pie el año que viene. Aparte, hay algunos que quedarán para las calles y que les mostraremos en otra entrada. Éstos son algunos de los de Madrid:

Hay tres cercados con diez toros y uno con ocho. En estos momentos, que sepamos, sólo tienen destino seguro éstos de Madrid.

Entre colorados y castaños hay seis en la camada, uno de ellos es éste que está en el cercado madrileño. Es colorado, listón, ojinegro y bocidorado:

De los seis, uno se probará de semental y otro irá a las calles por ser un poco silleto, también los veremos más adelante. Quedan cuatro y se ha dicho en algún medio que entraría uno en cada corrida de 2019 pero ya les avisamos de que eso no es seguro de ninguna manera.

Este 42 que abría la entrada es un toro de presencia imponente. Además, no hay que perderlo de vista en el campo porque está demasiado pendiente de todo:

Otros se pasean con aire ausente:

La camada de este año tuvo alguna baja en su día causada por perros, no por meloncillos. Suelen ser perros de caza, no excesivamente grandes pero habituados a cansar a su presa y acabar con ella cuando se echa.

Y ya veremos si entre esos treinta y ocho toros no hay más bajas por las peleas. Este año está habiendo más en muchas ganaderías seguramente por los cambios de tiempo y las tormentas de otoño. 

Ahí están, con el pienso, que, en 'Comeúñas', se echa cada día. El de la derecha es el 39, luego lo enseñamos en primer plano:

Con las lluvías caídas y el suelo tan bueno que tienen aquí, la hierba sube ya más de un palmo y perfectamente podrían pasar un día sin pienso (en más de dos ganaderías se lo ahorrarían sin dudar):

Observen que éste tiene el hocico un poco más alargado de lo habitual y fíjense en el pasto:

Hablaremos en otra entrada sobre don Celestino Cuadri, quien solía decir que él era:

“ganadero de ovejas, que me dan dinero, y de reses bravas, que me dan la vida aunque me cuesten dinero”

Las últimas comparecencias en Madrid no han sido muy boyantes. El 1 de junio de 2013 sólo dos toros se llevaron unas palmas, para el resto fueron pitos o silencio. Es aquella corrida en que la cuadrilla de Castaño dio la vuelta al ruedo, cosa que a la postre certificaría su desaparición.

Volvieron el 2 de junio de 2015 donde las únicas palmas fueron para 'Tejedor' al que dedicábamos este capítulo de nuestro cuaderno, a solas con él en el campo. Era castaño carinegro, listón, bocidorado y meleno:

Justo un año después sólo hubo palmitas para dos de los ejemplares y la última vez, el 4 de junio de 2017, la corrida fue mediocre aunque siempre queda la duda de qué pasaría si a estos toros se les dosificase el castigo en varas como se hace con otras ganaderías más borreguiles.

Este 39 es acaramelado de pitones (ya saben que esa terminología hace referencia sólo al color de las astas):

Deducirán ustedes que algunos de los toros que estamos viendo en el campo pueden estar perfectamente en 580 kilos y sobrepasar los 600 el día que salten al ruedo:

Los cuadris son 'mu grandes' y eso pone malos a los diestros aunque, si se paran a pensar, la gran mayoría de toros que han matado a toreros siempre fueron chicos y cornicortos. 

Ésta que están viendo ustedes en el campo creemos que puede ser de las corridas más pesadas lidiadas últimamente por Cuadri en Madrid:

La corrida que mataron en Sevilla el año 1965 Puerta, Joselito Huertas y Camino, que sustituía a Ostos, fueron cinco de Cuadri y uno de Soto de la Fuente. Los de Cuadri dieron una media de 474 kilos. El más pesado fue el quinto, este 'Oropéndola', de 502 kilos, al que Puerta cortó las dos orejas y salió a hombros:

Sólo tomó esta vara porque quedó mermado tras una voltereta y el presidente cambió el tercio:

Al año siguiente la corrida de Cuadri en Sevilla es televisada y la matan Ostos, Litri y Camino. Da una media de 501 kilos. El Litri, por delantales aquel día, con el más pesado de la corrida, 522 kilos:

Camino cortó dos orejas al sexto tras esta estocada. El toro se llamaba 'Nadadero', de 498 kilos (y no 489 como pone en la web de la ganadería). Hemos leído que Camino se quedó con la cabeza del toro pero luego la regaló a la familia Cuadri:

Veinte años después, el 15 de junio de 1984 se anuncian cuadris en la corrida de Beneficencia. El cartel lo componen Antoñete, Manzanares y Julio Robles. Un par de ellos fueron devueltos y a Antoñete le cayeron dos buenas broncas con gritos de '¡vete al asilo!'. Los seis titulares dieron una media de 551 kilos.

Treinta años más tarde, la media que marcaron en la báscula las cuatro últimas corridas en Madrid que comentábamos más arriba fue de 592, 583, 575,3 y 575,1.

Antes de volver al campo, ya han visto los toreros que mataban las corridas de Cuadri ¿no? Decía el bueno de Celestino que los que no querían sus toros no eran las figuras sino los veedores de las figuras.

Ahí tienen a nuestros protagonistas celebrando un cónclave. Deben de estar decidiendo si echan una mano a su criador y se van a Madrid a demostrar que la ganadería sale del bache:

Lo deseamos fervientemente por el bien de todos...menos de los que se pondrán delante, porque si estos animales sacan casta, tendrán que tragar saliva a base de bien.

Y nos alegraremos por los aficionados y por Fernando, el niño sabio de Trigueros, como les decíamos aquí. Es uno que se merece que las cosas le salgan bien, ¿no creen?

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.