LOS TRES NOVILLEROS, DERROTADOS POR K.O.
La derrota fue sin paliativos porque los novillos de Raso no salieron con el derroche de casta que esperábamos sino que fueron muy toreables, por eso tiene más delito que los diestros se dedicasen a picar piedra durante toda la mañana.
La novillada estuvo bien presentada excepto el impresentable segundo, con unos pitones que no son de recibo en esta plaza. Lo raro es que se quedaron como sobreros dos que tenían mucha más presencia que alguno de los lidiados.
Las peleas en varas no fueron memorables excepto la de esta premiado sexto. En la muleta todos fueron muy obedientes.
Los novilleros anunciados no se caracterizan por su habilidad a la hora de matar y dieron un recital de pinchazos espantosos y estocadas pésimamente ejecutadas. Menos mal que el presidente tenía un reloj de madera y la cosa quedó en sólo seis avisos.
CRISTIAN PÉREZ. A su primero lo recibió con dos largas en tablas:
Poca cosa en varas como no fuese la tendencia que se advertía en el novillo de echar la cara arriba. Nada más coger la muleta Adalid le gritó desde la barrera: ¡todo por abajo!
Pérez no tuvo problemas para pasarse el novillo una y otra vez. Le debió de dar unos cincuenta pases dejándonos exhaustos:
Con la espada dio un sainete: dos avisos, corta defectuosa, pinchazo, otra corta trasera, otro pinchazo, media trasera atravesada y dos descabellos.
Su segundo salió con brío pero en el caballo insistieron en ponerlo en suerte cuando estaba visto desde el principio. Eso es caer en un exceso de pegapuyacismo por muy en Vic que estemos:
Peseiro hizo un quite por chicuelinas y Pérez respondió por saltilleras escondidas pero fue todo muy vulgar:
Adalid se sumó a la vulgaridad clavando a toro pasado pero lo obligaron a saludar igualmente. Cría fama y échate a dormir:
Se veía que el toro era de oreja pero Pérez empezó embarullado de rodillas y luego se dedicó a pegar mantazos, encima rematando algunos equivocadamente por arriba. Nos sabe mal ser tan duros pero es lo que vimos. Alguien debería avisarle de que el toreo no es cuestión de cantidad porque volvió a castigarnos con no menos de cuarenta y cinco pases. Fíjense qué embestida:
Lo mató de un pinchazo y una estocada contraria y atravesada con degüello y con su típico brinco:
Ovación exagerada al novillo dado su flojo primer tercio pero que tuvo que hacer reflexionar al novillero.
PESEIRO. Su primero era tan impresentable de cara que nunca debió ser embarcado:
Entre protestas por esa carita, lo puso tres veces al caballo pero sin que la pelea fuese nada del otro mundo. El presidente cambió el tercio pero el diestro quiso ponerlo de largo una cuarta vez con el regatón. Fue autorizado pero el picador se negó ostensiblemente a lo del regatón y volvió a pinchar. Luego banderilleó con aseo:
El público no permitió que brindase la muerte de un novillo sin cara. El trasteo fue una cosa insulsa con el animal yendo al ralentí y Peseiro berreando a su paso de forma insufrible. Pasó las de Caín con la espada para matar con dos pinchazos, una honda desprendida, ocho descabellos, una rinconera y cuatro descabellos más, y el presidente perdonando el tercer aviso.
En el quinto se fue a porta gayola, que es una cosa complicada en este coso:
El lance le salió bien pero no le dio tiempo a levantarse y el novillo se lo llevó por delante sin consecuencias:
La plaza se convirtió por unos instantes en un herradero:
Fue en cuatro ocasiones al caballo pero la pelea en el peto no fue nada del otro mundo y el picador le señaló todas las veces sin apretar nada en ninguna:
El diestro quiso volver a banderillear pero para ello tuvieron que pegarle mil capotazos al toro. Además en el segundo par hizo hilo y derribó al portugués:
Pues aun con todo el de Raso sacó una casta en la muleta que es lo que esperábamos en todos (o, por lo menos, en tres o cuatro). Peseiro lo quiso tratar como a una ternera y la consecuencia fue que anduvo a la deriva. La foto engaña:
Tuvo suerte porque con el tute que llevaba el tal Quinino se fue parando enseguida. Lo mató de un pinchazo aguantando, otro perdiendo la muleta y huyendo y una rinconera, siempre pegando el telonazo. El novillo murió en los medios con la boca cerrada:
Entonces se dio una circunstancia curiosa. Empezaron los gritos de ¡vuelta, vuelta! para el animal, que se mezclaron con los ¡no, no! de otros aficionados, entre ellos quien esto firma. Se oían también gritos de ¡pas piqué! con toda la razón.
No hubo azul pero los mismos que negaban la vuelta aplaudieron con gusto a Quinino en el arrastre.
ROJO. Su primero se dejó toda su pujanza rematando enloquecido contra los burladeros. Observen en la segunda imagen al presidente del Club Vicois llevándose las manos a la cabeza ante la contumaz manía de dejar los capotes sibilinamente para estrellar los toros vilmente:
Tres entradas al caballo pero saliendo suelto y posterior brindis del de Trujillo a López Chaves, que estaba en localidad teóricamente de pago:
Hizo un buen inicio por abajo pero luego se despegó del toro de manera alevosa y estuvo claramente por debajo de la obediente bondad del animal. Demasiada bondad, insistimos.
Hemos comentado varias veces en nuestro modesto blog que Rojo no sabe matar y sigue sin aprender. Tres pinchazos, una honda atravesada, otro pinchazo y una entera atravesada entrando siempre muy mal. Sumen cuatro descabellos. Se tira saltando encima del toro y se apoya en el testuz, es demencial:
El último se llamaba Paletista y fue el de más trapío:
Primer puyazo donde por fin uno de los novillos empujaba de bravo y además se encelaba.
En el segundo se viene de largo pero el picador marra y no recibe ningún castigo porque lo sacan. Tercer puyazo de largo también donde tardea y escarba pero de pronto se arranca galopando y esta vez sí que cobra.
Lo puso una cuarta vez en la otra punta del ruedo y el toro tardeó un poco pero acabó arrancándose de nuevo al galope recibiendo una ovación.
Encima luego el toro quería coger la muleta pero con la paliza que llevaba era de quince pases bien dados y una estocada en lo alto. Más que suficiente para cortar una oreja en está exigente plaza.
Pero Rojo se dedicó a picar piedra siempre muy por debajo del novillo:
Acertó con esta estocada un poco contraria entrando de cualquier manera y girando la cara sin querer mirar el morrillo:
El público no permitió la vuelta al ruedo que quería dar el diestro pero éste tuvo el buen detalle de acercarse a felicitar a los ganaderos. Sí hubo vuelta, creemos que merecida, para Paletista.
La novillada había ido de menos a más para terminar dejando buen sabor de boca. Nosotros no les engañamos y les decimos que echamos en falta bastante más de la casta exigible a esta vacada.
El problema que tienen en Raso de Portillo es que si salen encastados se comen a los novilleros, y si salen boyantes e incluso pastueños como éstos de Vic, los novilleros no saben hacer otra cosa que pegarles pases sin ton ni son. Es un triste destino.
Saludos cordiales desde Vic-Fezensac. Rafa.
Su foto de la estocada al primero de Rojo: además de ese brinco al clavar, el acero va tan tendido que parece estar fileteando un pescado. Ojalá estos novilleros vean, lean y aprendan.
ResponderEliminarGracias Dn. Rafa. // Atte., Torotino
El problema es cómo su entorno, que ve lo mismo que usted y yo, no les avisa de que algún día lo van a pasar muy mal.
EliminarSaludos
Buenas Rafa . Un poco raro que saliera ese novillete habiendo otros en los corrales con más trapío no ?
ResponderEliminarCon respecto a los novilleros , nada nuevo . Están acostumbrados desde sus inicios a destorear a la borrega y si les sale encastado ni eso.
Efectivamente y hoy he confirmado que la responsabilidad total de que saliese ese animal la ha asumido el presidente del Club Taurino de Vic. Resulta que cuando se protestó ruidosamente al acceder al ruedo sé de buena tinta que el presidente se negó a tirarlo para atrás ya que el club había aceptado que saliera. En plan que cada palo aguante su vela.
EliminarEn el fondo los grandes perjudicados son los ganaderos a mí modesto entender pero es que ellos tampoco se explican a día de hoy por qué se quedaron en los corrales aquellos dos y salió este que debería de haber quedado como segundo sobrero.
Saludos
En el tema de la protesta al pañuelo azul se vio lo que debieron ser las plazas en España hace unos cuantos años donde el número de buenos aficionados igualaba al del público orejero . Hoy día el porcentaje de los segundos es mayoría aplastante . ¿Sabes cuándo se empezarán a ver productos de Aforadito ?
ResponderEliminarSaludos
A partir del año que viene si no recuerdo mal.
EliminarBuenas Rafa,
ResponderEliminarOtro (bendito) problema que tiene el Raso es que siempre esperamos animales con mucha casta y que siempre vamos a compararla con la del año pasado de Vic o la de Pedrajas de Tafilete y Aforadito y es un complicado hasta acercarse a esas novilladas...
Al menos hemos tenido el colofon del gran sexto de El Quiñon, para mí si era de vuelta al ruedo.
Lo inentendible es la elección de ese segundo novillo, sabiendo que hay otros bien presentados. Lo achaco al CTV que creo que este año han estado por debajo en la elección del trapio de varios festejos, no sólo en este novillo.
Ha sido un placer compartir un par de ratos hablando contigo, esperemos que sean más.
Un saludo,
Ricardo Frías Alonso
El placer ha sido mío. Tiene usted razón en que está ganadería lleva en el pecado la penitencia. Encontré algún aficionado que discutió la vuelta al ruedo a ese novillo pero no es mi caso y me alegro de coincidir con usted.
EliminarSaludos