¿Es lo mismo? Si así fuese, habría que colocar una conjunción copulativa entre ambos verbos. Si no es lo mismo, habría que poner una disyuntiva. Nosotros lo dejamos entre interrogantes, ya lo ven, pero como nunca nos tapamos, daremos a continuación nuestra opinión al respecto.
Antes que nada decirles que eviten ir al diccionario de la Real Academia porque en cuestión de toros suele navegar. En este caso dice que lidiar es burlar las acometidas de un toro según las reglas de la tauromaquia con objeto de darle muerte. Cuando vas a torear pone que es lidiar un toro.
Tampoco crean que El Cossío aclara mucho. Dice que lidiar es aplicar al toro un conjunto de suertes desde que sale hasta que se arrastra y que torear es lidiar los toros corriéndolos para hacer con ellos suertes. Corrochano tiraba por la calle de enmedio y afirmaba que 'cualquier cosa que se haga ante el toro es torear' aunque más abajo veremos cómo lo matizaba.
¿Qué respondemos nosotros a la pregunta de si es lo mismo lidiar que torear? En lugar del típico sí pero no, lo diremos al revés: no es lo mismo... pero sí es lo mismo. La explicación a una respuesta tan aparentemente extraña será el contenido de esta entrada.
Estaremos todos de acuerdo en que torear es sortear la embestida del toro, de ahí lo de suertes del toreo. Había que burlar esa acometida porque, como decía Lagartijo, 'o te quitas tú o te quita el toro'. Belmonte no se quitará y por eso Guerrita avisará con aquello de 'darse prisa a verlo...'
Sortear una embestida puede estar al alcance de cualquiera con un poco, o con un mucho, de valor. Entonces, ¿sería torear hacer un recorte a un toro en las calles o burlar su embestida con un jersey?
FOTO: Montón |
Sí, eso sería torear, de la misma manera que se puede torear una becerra en una capea. Lidiar debería ser algo más. Consistiría en aplicar las reglas o cánones de la tauromaquia a un toro en una plaza con el objetivo de poder darle muerte a estoque. Aquí entraría un componente digamos que científico aunque, de todos modos, esos cánones no son otra cosa que las diferentes suertes del toreo. Y si sortear era burlar y burlar es torear, entonces al lidiar estaríamos también toreando, ¿no les parece?
No obstante, ¿todas las suertes del toreo pertenecen a la lidia como tal, esto es, van encaminadas a disminuir el poder del toro y poder matarlo con una espada? ¿O hay suertes que se quedan digamos que en simples florituras y por eso serían toreo a secas?
Con la capa, por ejemplo. Está claro que una navarra o una larga a porta gayola podrían considerarse únicamente toreo mientras que una media verónica sería torear y a la vez lidiar. Pero es que si nos ponemos exquisitos, quizás una verónica sería torear lidiando y en cambio un delantal sería sólo torear. En un delantal, aunque los comentaristas nos la quieran dar con queso diciendo que es una verónica a pies juntos, el toro simplemente se mueve por ahí delante. La expresión es de Bleu, no nuestra.
Lo mismo vale para la muleta. Un estatuario o un molinete no supondrían lidia en tanto que un natural sí lo sería. Precisamente el citado Bleu sostenía que un pase de trinchera no era ni lidia ni toreo porque no se llevaba al toro conducido sino que se le pegaba una especie de telonazo con el animal pasando por ahí.
Y otra cosa: la teoría dice que la lidia debería ir encaminada a poder dar muerte a un animal fiero como es el toro de lidia. Muy bien, pero eso es en teoría, ya que hoy ha perdido gran parte de su sentido. La lidia antigua de dominar y/o corregir defectos se ha convertido en la mayoría de festejos en cuidar el toro para que aguante luego cincuenta mantazos con la muleta. Esa labor de muchos toreros haciendo de enfermeros ante tantos toros que vienen picados del campo vendría a ser un tipo diferente de lidia, ¿no creen?
El problema es que esa lidia de hospital provoca la desaparición del primer tercio, convertido en desagradable trámite, así como el paso de puntillas por el segundo. Culmina el despropósito con el insufrible pegapasismo posterior, donde al diestro no se le cansa nunca el brazo mientras que a nosotros se nos fatiga el alma con tanta pesadez.
Volviendo a lo que nos ocupa, o sea, que la lidia sea lo que debe ser, la estocada, ¿sería lidiar o torear? En principio sería el acto supremo de la lidia. Todo lo que se ha hecho al toro ha ido encarado a ese instante. Pero ¿sería también torear? Pues si la esencia del toreo es burlar la acometida del toro, no hay ejemplo más palmario de ello que la suerte suprema. Ahí se sortea la embestida del toro con gran riesgo del diestro ya que es habitualmente él quien embiste para clavar.
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César Rincón matando a Bastonito |
Vayámonos un poco por las ramas y afirmemos que Gallito representaría la lidia y Belmonte sería el toreo. ¿Estamos simplificando demasiado? Preguntemos a Rafael, el hermano de José. He aquí su respuesta:
'José tenía la obsesión de dominar siempre los toros y demostraba tal poderío que a los cuatro pases ya estaban rotos, con los cuellos hechos trizas. Después se desesperaba al verse sin enemigo y no poder desarrollar su enorme capacidad. Yo se lo decía: 'José, la culpa la tienes tú porque para torear bien, lo único que hay que hacer es acariciar...'
La siguiente pregunta para El Gallo sería: maestro, para lidiar bien, ¿también hay que acariciar? Al hilo de esto, otra pregunta: ¿es lo mismo lidiar un toro que bregar con él?
En el fondo, ¿no se torea un toro cuando está dominado? Pues entonces el toreo sería la culminación de la lidia o justamente la parte esencial de esa misma lidia. Eso nos podría llevar a diferenciar entre el toreo defensivo y el toreo de arte, contando con el riesgo de que alguno de ustedes nos salga en los comentarios diciendo que en el toreo defensivo también hay arte. Pero esta insistencia en lo del arte... ¿no habrá envenenado la tauromaquia? Ya verán más abajo lo que comenta Corrochano al respecto.
Cambiando la afirmación anterior sobre Maravilla y Terremoto, no sé si estaríamos de acuerdo todos en que Gallito sería el arte del toreo y Belmonte representaría el toreo como arte. Parece un trabalenguas pero en el fondo no es más que la eterna división entre toreros largos y cortos. Es lo que decía Sureda: hay toreros que saben torear pero no torean bien y toreros que no saben torear pero torean bien. No hace falta que pongamos ejemplos porque ya los tienen ustedes en mente.
Gaona decía que podía competir con cualquiera
'porque en el toro bueno puedo estar como ellos y en el malo se defienden igual o peor que yo pero con Gallito... con él no puedo competir porque está bien con el toro bueno y mejor con el malo y así, no hay manera'
Pero ¿qué pasaba con Juan? Corrochano cuenta lo que le pasó con dos de Benjumea en Madrid en 1916:
'Le salieron dos bueyes y para dominar a un manso se necesitan unas condiciones de las que Belmonte carece; si a esto se une que él, conociendo su impotencia, se desconfía, asistimos al lamentable espectáculo que dio en el tercer toro un torero tan grande como él. Fue la negación, el no poder... estos toros, que eran antes para Bombita, hoy son sólo para Gallito y Pastor. El resto, a defenderse si pueden'
El mismo Corrochano alertaba sobre la palabra arte aplicada al toreo, cuestión sobre la que ya hemos divagado con los seguidores de nuestro modesto blog alguna vez en los comentarios. Lean:
'Esta palabra es la culpable de la separación entre toreo y lidia. Con esa división tajante se quiere cortar la tauromaquia hablando de toros que se pueden torear sin necesidad de lidiar. No podemos admitirlo. Jamás se podrá prescindir de la lidia, ni porque el toro sea chico, ni porque sea boyante, ni porque sea fácil, ni porque sea de los que llaman inofensivos. Todo toro debe lidiarse, tiene su lidia, necesita su lidia. Y eso es tauromaquia pura, eso es, en consecuencia, el toreo. Torear es hacer el toreo con arreglo a las condiciones del toro, como el toro lo pida...o sea, lidiar'
Como seguro que sale el amigo Paco B. a reclamar el lugar donde escribió esto, fue aquí:
En conclusión, ojalá nos hayamos explicado bien y llegados hasta aquí nuestros desocupados amigos hayan comprendido el sentido de nuestra respuesta. ¿Es lo mismo torear que lidiar? No es lo mismo... pero sí lo es.
Esperemos que no aterrice por esta entrada ningún paracaidista fuera de los cuatro amigos habituales. Es que, tanto si es de los que ve corridas de vez en cuando como si es un aficionado de los cabales, pensará que debemos de estar muy aburridos para dedicarnos a elucubrar sobre estos pormenores de la tauromaquia. ¿Ustedes creen que interesan a alguien?
Aprovecharemos esta entrada parar desear a nuestros selectos leyentes feliz Navidad. Será una Navidad triste en casa de Pepe, el mayoral de Isaías fallecido hace poco. Pasamos tantos buenos ratos con él hablando de toros y de política que hemos sentido su muerte como si fuese de nuestra familia. Recuerden esta entrada.
El día que lo conocimos nos llevó a ver los novillos y paró el coche entre ellos antes de decirnos: baja, que no hacen ná. Y claro, no podíamos quedar mal, de manera que cogimos la cámara y nos pusimos a hacer fotos en medio de la manada, teniendo a medio metro esos pitones tan astifinos de los tulios, ¡por delante y por detrás!
Lo saludábamos en 3Puyazos y ahora teníamos intención de llamarlo para pasar a verlo antes de fin de año. Ya no podrá ser. Descanse en paz y vaya desde aquí nuestro pésame a su familia, a la de Isaías y a su amigo Manili.
Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.
Rafa, me estreno como paracaidista kamikaze. Lidiar, para mí, sólo es un verbo que se puede conjugar junto al toro bravo. Torear es para todo lo demás. Aunque es una pregunta muy shakespeariana.
ResponderEliminarHombre, el toro menos bravo, como lo denominaba Cossío, y que nosotros calificamos como manso es el que con una lidia adecuada puede acabar tragando.
EliminarEl toro doméstico que vemos hoy tan a menudo seguramente también requiere una lidia. Aunque quizá habría que cambiar la palabra.
Saludos
¿Cuántos matadores del escalafón saben lidiar? Yo diría que muy pocos. Pero es que al fin y al cabo, a la mayoría de ellos, no les hace falta. No hay oponente enfrente que presente dificultades. Por no hablar de que ya no se dominan todas las suertes. Todo al rojo. Sólo muleta. El primer tercio y ejecutar canónicamente la suerte suprema, pa qué? La casquería y el triunfalismo está asegurado. Cada vez menos público entendido y sin rigor alguno.
ResponderEliminarLidiar sería trabajar para que el toro vaya por donde no quiere ir pero como los ganaderos han ido seleccionando el torito que va por el carril y que no menea la cabeza como le gustaba a el Gallo, ya no hace falta trabajar.
EliminarCuando sale algún toro problemático normalmente no saben qué hacer y los aficionados nos quedamos con la duda de qué hubiera pasado en caso de realizar una lidia adecuada.
El único consuelo en estos casos es que nos da mucho que comentar. Igual es un triste consuelo....
Saludos
Ya que el otro día se hablaba aquí sobre Mazzantini... para muestra, un botón:
EliminarLuis Mazzantini «no era torero, pero sí excelente matador de toros»
https://institutojuanbelmonte.com/luis-mazzantini-no-era-torero-pero-si-excelente-matador-de-toros/
Buenos días Rafa y la cía.
ResponderEliminarFilosofando antes de la pitanza me paro a pensar que, hoy en día, el 'afisionao' medio no habla ni de ''lidia'' ni de ''matadores de toros'': habla de torear y de toreros. Esos son los derroteros por los que ha ido cayendo la fiesta en los últimos años...
Un clavo más en la tumba de nuestra tauromaquia.
Saludos cordiales
Si nos paramos a pensar, ¿cuántos aficionados hablan de lo que hablamos en nuestro modesto blog?
EliminarSaludos
Nos guste o no, quedamos cuatro "freaks" en esto, pero lejos de la negatividad creo que debemos (y podemos) darle la vuelta a esto... por de pronto, nos vemos en San Agustín donde arranca "nuestra temporada"
EliminarSaludos a la Imperial Tarraco
El banderillero Juan Carlos Rey estuvo en la peña el Espontáneo de Segovia y ninguneó a los aficionados que vamos a Guadalix diciendo que ese tipo de público no supera las ochocientas personas Ésa es la imagen que tenemos ante el taurineo.
EliminarSaludos
Habrá ocasión de poder saludar al bueno de JC Rey en San Agustín. Igual ha cambiado de opinión, desde aquellas declaraciones en Segovia, quién sabe...
Eliminar"Los hombres de plata que harán el paseíllo con Damián Castaño son los siguientes:
Los lidiadores son:
Iván García
Rubén Sánchez
Juan Carlos Rey
Juan Sierra
Mathieu Guillon
Luis Miguel Amado
Los terceros son:
Alberto Carrero
Manolo de los Reyes
Alfredo Cervantes"
Es mejorable aunque podría haber sido peor.
EliminarBuenas Rafa,
EliminarCreo recordar que esa frase la dijo Julián Agulla, el moderador, no Juan Carlos Rey, aunque tampoco le contradijo.
Feliz Navidad Rafa, a ti y todos tus lectores!!
Un saludo,
Ricardo Frías Alonso
Buenas tardes Rafa.
ResponderEliminarLidiar es " cocinar " al TORO ,para depues TOREAR. Esa es mi opinión . Luego están los toretes que vienen " domesticados" de ganaderías concretas, a los cuales no les hace falta la lidia. Creo yo....
Un saludo
La mayoría de toros que sufrimos hoy en día serían platos precocinados según su culinaria comparación.
EliminarSaludos
Gracias por aportar la fuente de la cita. Ese libro de Corrochano siempre había entendido que era un libro que no aportaba nada nuevo; veo que tendré que hacerme con él.
ResponderEliminarEn cuanto a la cita sobre torear bien y saber torear, ahora resulta que también es de Sureda cuando en una pregunta mía de hace escasas semanas me informó que era de Corrochano que la atribuía a Joselito.
¿ En qué libro o texto de Sureda aparece?
Ja, ja, ja… ya estoy pidiendo la fuente.
Y para finalizar, totalmente de acuerdo que la cuestión del “ arte” en las corridas es una muy probable gran equivocación intelectual.
Los errores intelectuales se pagan muy caros, por lo que es conveniente acometer su estudio y no cejar hasta lograr su esclarecimiento..
Un saludo.
Paco B.
No: aquí hablo de la clasificación de los toreros, no de una frase aislada y esa clasificación está en Tauromagia de Guillermo Sureda, que supongo que tendrá leído de cabo a rabo.
EliminarYa que estamos le ampliaré la frase dado que en esta entrada la he resumido.
Sureda dice que hay cuatro tipos de toreros: el que sabe torear pero no torea bien, el que no sabe torear pero torea bien, el que sabe torear y torea bien y el que ni sabe torear ni torea bien.
La frase la memoricé cuando leí Tauromagia con dieciséis años, por eso es imposible que hubiera lugar a ninguna confusión. No me pida que me levante a mirar en qué página está la cita.
Saludos
Muy interesante disertación y sobre todo edificante.
ResponderEliminarHumildemente creo y opinió como decia mi abuelo ,que para poder torear primero hay que lidiar...
Desgraciadamente un buen porcentaje de toros hoy día no necesitan del sometimiento previo, del juego de los terrenos y querencias, para poder realzar la estética en las faenas... y navegando por estos derroteros terminamos en uno de los males más grandes de los últimos treinta años.. el exceso de nobleza y docilidad moldeada en el ganado bravo..
Con el toro comercial de las figuras que Barquerito denominó "mansibravo" el juego básico de los terrenos consiste en evitar que se te vaya a tablas enseguida.
EliminarSaludos
Buenas Rafa .
ResponderEliminarEn primer lugar felicitarte las navidades a ti y a todos la familia asidua a tu blog. Entrando en materia bajo mi humilde opinión , opino que tanto lidiar como torear deberían de estar ligadas pero debido a que hoy día sale un toro tan noble y previsible los toreros se pueden permitir el lujo de torear sin necesidad de lidiar.
En el primer tercio se ponen bonitos desde el principio sin necesidad de ahormar ese ímpetu inicial del toro ni de sacárselo hacia afuera pues ni siquiera aprietan para dentro. El tercio de varas es pura masacre con los profesionales invadidos por el autismo. Banderillas ídem y después en la muleta se pueden permitir el lujo de empezar por alto como les dé la gana pues el toro se lo va a perdonar todo .
Espero que si al final no puedes ir a lo de Isaías sí lo hagas a otras ganaderias y así podamos disfrutar de tus reportajes , aunque debido a tu fundafobia ( supongo que este término no existirá , pero se entiende ) la lista de ganaderias es muy corta .
Saludos
Además de que la lista sea cortísima luego hay que contar con que te atiendan, que ésa es otra...
EliminarHoy he echado la mañana en Cuadri, como cada año por estas fechas. Por cierto, había catorce toros con destino a su tierra.
Saludos
Gracias Rafa por otra entrada muy útil a este modesto becerrista italiano. Feliz Navidad a ti y a todos los (¿ochocientos?) lectores del blog
Eliminar¿Ochocientas? Quite usted un cero... ¡O los dos!
EliminarSaludos
Yo desde la humildad y la ignorancia entiendo que en una corrida de toros lidian los picadores, los banderilleros, los subalternos… y lo que se dice torear torea el torero, aprovecho para felicitar a Rafa y al resto de foreros por mantener mi aficion a la tauromaquia, al toro integro y a los ganaderos que los crian.
ResponderEliminarGracias por la parte que me toca pero se habrá fijado en que muchas veces califico a bandeilleros como toreros. También se puede decir de picadores que torearon a caballo aunque esto suele ser una triste excepción.
EliminarSaludos
Feliz Navidad, Rafa.
ResponderEliminarEspero poder seguir leyéndote muchos años más. ¿Te has planteado escribir un libro de toros? Muchas gracias.
Un saludo,
Eugenio.
Me lo han comentado varias veces pero la única solución sería autoeditarlo y de momento me da un poco de pereza.
EliminarPero ¿usted cree que lo compraría alguien? Porque una cosa es leer en el móvil aprovechando cualquier momento y otra ir pasando las páginas de un libro. Yo no lo veo muy claro.
Saludos
Yo creo que aquí lo compraríamos varios...
Eliminar" Torear es la culminación o la esencia de la lidia del toro". Una gran definición, Rafa.
ResponderEliminarFeliz año 2025 a todos los aficionados.
Igualmente para usted y también para los amigos del club taurino de Pamplona.
Eliminar¡Cuanto hace que no pasaba por aquí! Y es que en invierno el cuerpo y la mente me piden descanso de la cosa taurina porque acabo cansado y enfadado y desanimado, y... Como siempre sus entradas de lo más sugerentes. En realidad, lidiar y torear, cuando hay toro, son indisociables. Desde que el toro sale un por los chiqueros, ¡Palo, palo, palo! Pero con arte, conocimiento, mesura, torería... No dejarle un momento, saber lo que necesita, dominarlo y prepararlo para poder ejecutar la suerte suprema. Pero claro, si no hay toro, que hoy escasea en exceso, pues todo eso sobra. La tauromaquia de hoy es un arte amanerado y manierista, es decir, decadente. ¿Cuanto durará? Quién sabe. Desde luego los 800 de San Agustín contribuyen a mantenerlo vivo y a que el espectador pueda asomarse a lo que es la tauromaquia menos adulterada. Como siempre y de nuevo, enhorabuena por su blog que, de modesto, nada, estupendo si. Un abrazo, Genaro.
ResponderEliminarPues hay lectores que prefieren el blog en invierno, alejado de la actualidad de las corridas casi siempre tan ramplona. O por lo menos agradecen estas entradas para mantener la llamita de la afición.
EliminarHabla usted de decadencia y amaneramiento y no le falta razón. No sé si eso querrá decir que estamos en el preludio de la desaparición de la tauromaquia aunque seguro que sí es la confirmación de su desaparición tal como la entendemos unos pocos a quienes se nos ha parado el corazón.
Respecto al tema de la entrada recordar lo que decía Guillermo Sureda:
"Ya es hora de decir de una vez por todas que lidiar y torear son una misma cosa porque quien lidia, torea y quien torea, si lo hace bien, lidia."
Saludos