jueves, 7 de diciembre de 2023

ENCABO: QUÉ DIFERENCIA ENTRE TORERO Y GANADERO

Los leyentes más fieles de nuestro modesto blog recordarán aquella anécdota que un día contábamos de Joselito Arroyo. Decía que ahora de ganadero le gustaba mucho que lucieran sus toros pero que cuando era torero no tenía ningún interés en hacerlo porque los aplausos tenían que ser para mí, no para el toro, ¡para mí! y lo recalcaba dos veces.

Viene esto a cuento de Luis Miguel Encabo. Suponemos que quedó muy satisfecho del juego de sus toros en la gran corrida de Vic de este año aunque es posible que ya haya entrado en la lista negra de los toreros, para quienes la casta, cuanto más lejos, mejor.



Recordarán ustedes que criticábamos en aquel festejo al presidente Amestoy porque tras la tercera entrada al caballo de Provechito y su demostración tanto de poder como de bravura enseñó el pañuelo. Hubo una bronca unánime al palco y tuvo que ser Colombo el que girando el dedo índice le pidiese permiso para ponerlo una vez más.

Accedió y de esa manera tuvimos ocasión de que se nos pusiera la piel de gallina como decíamos en la crónica que pueden recordar aquí. El toro se arrancó sin tardear y al galope desde la otra punta y encima peleó de bravo. Todo para vergüenza y oprobio del presidente, a quien se le debería de haber caído la cara de vergüenza.

Se preguntarán ustedes qué tiene que ver todo esto con Luis Miguel Encabo. Es que ahora él es ganadero mientras que antes fue torero. Actualmente está encantado con que luzcan sus toros en el caballo pero antes...

Resulta que hace diecisiete años se lidió en esta misma plaza gascona un encierro de Charro de Llen con atanasios y no con lo de Daniel Ruiz que compraron después. El quinto se llamaba Velonero y lo habíamos retratado en el campo un mes antes del festejo, cuando visitábamos ganaderías por afición y para nuestra colección de fotos. Aquí lo tienen:



Estos otros también estaban apartados y ya que hemos ido a buscar en nuestro archivo, se los enseñamos. Uno presenta la pinta de melocotón que todavía sigue saliendo de vez en cuando en Dolores Aguirre:





Velonero había acudido tres veces al caballo entre ovaciones, cada vez de más largo. El diestro reclamó entonces el cambio de tercio al presidente con la mano. Nos hemos puesto en contacto con este último y nos aclara lo siguiente:

Encabo me solicitó con el dedo el gesto de cambiar el tercio tras la tercera vara y yo desde el palco le hice otro con los brazos como diciendo '¡no, por favor!, ¡vamos a ponerlo otra vez!' Aquella fue una situación totalmente contraria a lo sucedido entre Amestoy y Colombo. Luis Miguel Encabo accedió a mi petición y recuerdo que esa última vara fue extraordinaria. Luego cortó una oreja y se dio la vuelta al ruedo al toro

Efectivamente, así fue y la cuarta vara provocó un estallido de euforia en la plaza muy similar a lo del Provechito de Ibán. Además, tengan en cuenta que Encabo colocó el toro lo más lejos posible seguramente para que no se arrancase y así dejar en evidencia al presidente. Ahí tienen a su picador dando cera a Velonero. Es el portugués Rafael Da Silva, con quien daría la vuelta al ruedo después:



Por supuesto que este presidente está de acuerdo con nosotros en que en la pasada feria faltó generosidad en el palco con Colombo ya que él la había tenido con el toro y con el público solicitando ese cuarto puyazo. Con una petición de oreja que rondaba el 50% mostrarse tan cicatero no sólo no era lo más adecuado sino que pareció una vendetta por haber quedado la presidencia en evidencia. Añade a su explicación una cosa que resulta incomprensible en las plazas españolas:

Yo siempre he insistido a los toreros antes de la corrida en que si piden el cambio de tercio lo hagan desmonterándose para que no haya dudas. Es que si lo hacen girando el dedo índice queda la duda de si piden otro puyazo o están pidiendo el cambio. Aquel día Encabo pedía el cambio y fui yo quien insistió en ponerlo una cuarta vara. Muchos salieron pensando que era el diestro el que con su gesto quería seguir con el tercio de varas ¡pero había sido todo lo contrario!

Señores, decimos que esto es incomprensible en España porque ¿cuántas veces se da el caso por estos lares de que un maestro gire el dedo para solicitar otra entrada al caballo? Es todo lo contrario, lo mueven para cortar el tercio, tal como hizo Gómez del Pilar en la última concurso en Madrid con el de Pedraza, recuerden aquí. Luego montó el numerito de medio pedir otra vara al ver el descontento del respetable ¡cuando Sangüesa estaba ya en el callejón! Venga, hombre, a otro perro con ese hueso. Ahí tienen el dedito bobalicón de Gómez aquella tarde tras la segunda entrada, ¡y de espaldas al palco!



El Cordobés fue sancionado en 1966 en Zaragoza por solicitar el cambio de tercio directamente a la presidencia prescindiendo del delegado de la autoridad (sic, en el acta)Eso fue en virtud del artículo 77 del antiguo reglamento. En el actual, el artículo 72.6 no especifica la forma de solicitar el cambio, cosa que habría que cambiar urgentemente para que fuese obligatorio desmonterarse y mirar al palco. Si nosotros presidiéramos una corrida lo dejaríamos bien claro a los tres diestros antes de empezar.

No nos duelen prendas en decir que aquella tarde vicoise fuimos de los muchos engañados en el tendido con el de Charro de Llen porque el gesto de Encabo y el braceo del presidente lo interpretamos justo al revés, como si fuera el diestro quien solicitaba otra vara cuando lo que quería era acabar allí para que el toro no se agotase.



Pero es que no sólo no se agotó sino que embistió incansable siendo uno de los toros más completos que hemos visto en nuestra vida. Aquel año se llevó todos los premios en Francia. El hijo de José Ignacio Charro nos decía meses después que ellos fueron los primeros sorprendidos de que el toro durase tanto después de lo que se le había exigido en su brava pelea en varas.



Por eso a estas alturas de la explicación ya han entendido el titular. Los intereses de un torero y un ganadero son diferentes y el Encabo que puso a Velonero a regañadientes en una cuarta entrada no tiene nada que ver con el que disfrutó diecisiete años después en esa misma plaza viendo que el diestro enmendaba la plana al presidente con el de Ibán y el toro provocaba un rugido de alegría en el tendido cuando nos dio aquel espectáculo memorable.

No nos vamos sin recordar que con este presidente de Vic que nos ha aclarado lo que sucedió tuvimos un desencuentro ya que él estaba de asesor en la famosa tarde de Lamelas con Cantinillo cuando el palco le negó la oreja. A nuestras críticas respondió con una amarga carta que publicamos aquí y nos desafió a que aclarásemos las cosas en persona. Ni cortos ni perezosos cogimos el coche y nos hicimos los 700 km que hay desde Tarragona hasta su casa. Pueden recordar que lo comentábamos en esta entrada.

Aquello fue el inicio de una amistad que hace más de nueve años que dura.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.

domingo, 3 de diciembre de 2023

FERIA DE VIC-FEZENSAC, 2024 (1). LAS GANADERÍAS

Se presentó la feria de Vic y dejó contento a todo el mundo. Algún amigo del blog que se planteaba no ir por la deriva descendente apreciada en los últimos años, ha decidido asistir ante el reclamo ganadero.

La verdad es que ese descenso ha sido notable tanto en trapío del ganado como en seriedad del palco. Lo último nos preocupa más, con orejas baratas, con otras que no se conceden cuando se debería (a Colombo este año, por ejemplo) y con azules que no vienen a cuento (a Escolar en 2021, recuerden aquí). Esperemos que retorne la seriedad aunque para ello urge hacer una renovación de la presidencia, jubilando a alguno como Amestoy.



Aquéllos que tengan curiosidad por saber cuánto puede costar organizar una corrida en Vic pueden consultar los números que hicimos en esta entrada. Si les da pereza mirarlo, diremos que nuestro cálculo se iba a 130.000 euros por festejo.

El primer día tendremos novillada de Raso de Portillo, cosa que satisface a tirios y troyanos. Ya veremos si el Club no tiene que gastar mucho dinero en conferencias telefónicas buscando novilleros. Para la última novillada de esta vacada lidiada en Vic hubo que llamar a doce hasta conseguir configurar el cartel. Es que para anunciarse con los de Raso hay dos condicionantes que afectan mucho a los diestros: el mental, por el miedo que causa el hierro, y el visual, porque sus propietarios no tragan con el afeitado.



Por la tarde, corrida de Cuadri. Perfectamente podríamos ver de cinqueños toros que se deberían haber lidiado el año pasado en Las Ventas y que pueden recordar aquí. Entre ellos estos dos castaños, uno oscuro, bocidorado, casi playero y el otro ojinegro y bien encornado:



Si dan un juego en varas similar al de los tres de abril de este año en Madrid, la afición vicoise quedará satisfecha aunque en el último tercio se paren. Y a uno como aquel Revisor ante el cual se jugó la vida Adrián de Torres aquella tarde lo hubieran aplaudido en el arrastre sin duda alguna (en Las Ventas fue silbado).

Cuando un cuadri mete los riñones en el caballo, no hay nada igual: 



Al día siguiente la concurso presenta un elenco muy interesante. Empieza Saltillo, cuyo toro del año pasado despertó admiración por su lámina, que no por su juego posterior. Vean:



El segundo es de Palha, ganadería que ya ha triunfado en Vic. Propició la salida en hombros de De Justo en 2017, recuerden aquí:



Sigue Prieto de la Cal, con la responsabilidad de que ese toro representa una inversión de futuro en este coso. Si sale uno con el juego de éste de Cenicientos, le comprarán una corrida completa para Vic, ya verán:



Conde de la Corte lidió este jirón en la última concurso: 




En el caballo hizo una pelea peculiar: huyó al hierro en la primera acometida, empujó con un pitón en la segunda y acto seguido se fue suelto al trote hasta chiqueros. Gómez del Pilar ordenó no moverlo de ahí a ver qué hacía. Pues héteme aquí que se embraveció acordándose de su hierro y se arrancó desde allí:


Veiga Teixeira será para nosotros una incógnita en cuanto a juego, no en cuanto a trapío, que en esta ganadería se da por supuesto. Por último se lidiará un toro de Pages Mailhan. No ha demostrado gran cosa en Vic como no fuese aquel enloquecido desembarque, donde los toros se cornearon con saña en los corrales. Pulsen aquí para echar un rato muy entretenido con esas peleas.

Por la tarde, Dolores Aguirre, que nos dejó este año el buen sabor de boca de haber visto una corrida de toros, cosa inhabitual ya que hablamos de toros de verdad, con los que hay que estar pendientes y que no permiten fallos. Fueron animales que se hicieron respetar y ante los cuales todo lo que se hizo fue muy meritorio. Recuerden aquí nuestra crónica.



Y al día siguiente habrá una corrida de Los Maños cuyo anuncio nos ha sorprendido porque todos los mentideros daban por segura la presencia de Sobral. No sabemos si eran infundios o si es que el club vicois habrá preferido no coincidir con Céret y habrán llegado a algún pacto con el ganadero lusitano para aplazar su presencia un año. Los Maños ha ganado dos veces el concurso aquí, con Saltacancelas y con este Jardinero:



Es una lástima que no venga por tercera vez consecutiva Ibán. Sus dos últimas corridas en esta plaza han sido memorables, con un toro de bandera, Espantavivos, y otro casi, Provechito. Quieren ir este año a Madrid y se ve que no tenían ejemplares para cubrir ambos compromisos. Una pena, porque lo de Madrid se saldará con el sanguinario monopuyazo español en la primera entrada, un trámite en la segunda y el cambio de tercio solicitado por el diestro tras la carnicería. ¿Recuerdan a Camarín? Pues eso.

Y sobre los toreros, ya veremos. Hay uno fijo, que será Morenito de Aranda, en agradecimiento a su prestación ante los ibanes, cuando resultó cogido a porta gayola pero le echó pundonor y mató el toro a pesar de la cornada que llevaba, recuerden aquí



Otro podría ser Colombo, en desagravio por la oreja que le negó Amestoy en la misma corrida tras quedarse sin toro por habernos hecho el inmenso favor de lucirlo en varas. El diestro solicitó una cuarta entrada al palco cuando los turistas allí subidos ya habían enseñado el pañuelo. El tercero será Lamelas, inevitable en esta plaza, a quien todavía le dura el crédito conseguido ante Cantinillo hace ya diez años. El cuarto será Gómez del Pilar, pero sólo si conceden a su apoderado la corrida que exija. Por último apunten a Solera dado que los gascones no se habrán olvidado de que toreó muy bien al natural un aguirre en la pasada feria. La cita es el fin de semana del 19 de mayo.



No obstante, ya saben que a nosotros los diestros que se anuncien nos dan igual. Los que peregrinamos a Vic vamos a intentar disfrutar del primer tercio con la caballería de Bonijol. Eso no es óbice para que nos lamentemos cuando a veces se cae en un pegapuyacismo absurdo, también hay que decirlo. Pero cualquier cosa es preferible al abyecto monopuyazo español.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.

miércoles, 29 de noviembre de 2023

¿25 CABALLOS MUERTOS?

¿En una sola corrida? ¿Seguro? De eso presumía uno de los matadores que se anunció, el señor Vicente, que es como llamaban al Niño de la Blusa sus vecinos de Embajadores. Se dice que fueron toros de cinco años cumplidos aunque la realidad es que sólo hubo dos de esa edad (alguno repite hoy que llegaron a tener siete años). Llevaban mucho tiempo en la dehesa que tenía alquilada en San Fernando del Jarama el empresario de Madrid, don Pedro Niembro, muy cerca de las reses del duque de Tovar. El problema para la empresa era que estábamos en septiembre y pasaban los meses sin que nadie quisiera matarlos.



El Ruedo se hacía eco de ello recordando cuarenta y cinco años después lo que había acontecido en la 13ª de abono de 1905 en Madrid e insistía en lo de los veinticinco jacos. Aquel 10 de septiembre de ese 1905 se lidiaron toros de don Luis Patricio, de Coruche (Portugal). Vean a uno de esa vacada enviando al piquero de cabeza. Es Sevilla en 1910:



El ganadero luso había debutado en Madrid con una novillada en marzo de 1903 para Calerito, que se llevó una cornada en el pecho que casi lo mata, Mazzantinito, tres avisos en su segundo, y Agualimpia. La lista de cornadas que pegaron estos toros es extensa, no sólo a diestros sino también a operarios como cuando uno de sus toros mató al carpintero de la plaza de Cartagena (en aquella corrida de 1907 también estaba Vicente Pastor). En 1908 en Zaragoza se suspendió la novillada de Coruche en el cuarto por estar cogidos todos los diestros.

Este coruche que ven abajo partió el esternón con ese gañafón a Moreno de Alcalá en Sevilla en 1910. Esa cornada es muy parecida a la peor sufrida por Rafael El Gallo, que fue en Algeciras, en los pitones del toro Cumbrero, de Moreno de Santamaría:



El hierro era éste que ven abajo, con las iniciales del ganadero. La divisa, celeste y blanca:



Rápidamente adquirieron fama de temibles. Cañabate hablaba de un Niño de La Alberca que presumía de que 'esos de Palha son corderitos...maté yo uno de Coruche...' Recuerden que Gallito y Belmonte rehuían los palhas como un gato escaldado el agua fría. Quedaban para que los matase el torero más valiente de todos los tiempos, a quien le daba igual ocho que ochenta, recuérdenlo aquí. Y sobre la ganadería de Palha, pulsen aquí.

Por cierto, tenemos que investigar lo que sucedió en Almagro, donde se dice que los palhas mataron seis caballos... ¡con el peto ya instaurado!

En las crónicas que hemos rastreado sobre los coruches se repiten calificativos como toros tenebrosos, el coco de nuestras figuras, fatídicos toros, temidos toros, de respeto, de imponente presentación, hermosas reses, duros y secos, de enorme poder...

Los criaba don Luis Patricio Correias Gómez en ese término de Coruche, un poco antes de llegar al estuario del Tajo viniendo de Elvas. Por allí también pastaban los toros del vizconde de Coruche y de las señoritas ganaderas Guillermina Roza da Veiga y María Monteiro Gómez. Era fama que los de don Luis estaban medio asilvestrados, un poco como el antiguo ganado de la tierra en la zona de Portillo. Eran muy grandes de caja y eso hacía que a primera vista ya fuesen temidos por los diestros. No obstante, hay muchos revisteros de principios de siglo que hablan de que salían bravos y con poder pero toreables, sin otro problema que superar el miedo. Como los maestros no conseguían esto último, las deficientes lidias hacían que muchas veces pareciesen peores de lo que eran.

Éste de aquí es Mazzantinito en 1904, todavía de novillero ante un coruche:



El sobrino de Luis Patricio fue Alberto Cunhal Patricio, que hizo tábula rasa de todo aquello y cambió encaste, divisa y hierro, quizá para olvidar aquella dinámica terrorífica de lo de don Luis. Lo de Cunhal en los años sesenta era de lo portugués más torerista mientras que las ganaderías realmente duras eran Coimbra y Ribeiro Telles. Ahí tienen a Alberto en un tentadero lanceando una jirona que se le queda debajo:



Observen a Pacomio Peribáñez paseado por la atmósfera por un coruche en 1908. Tras la costalada, sin consecuencias más allá del golpe, tuvo que matar cinco por ingreso en la enfermería de sus dos colegas:



Aquella tarde de 1905 que nos ocupa se anunciaron tres toreros desesperados ya que no había otros que quisieran enfrentarse a aquellos seis morlacos. Fueron Manuel Lara Jerezano, de morado y oro; Vicente Pastor, de verde y oro y José Pascual Valenciano, de marrón y oro. Observen que la corrida empezaba a las cuatro y media y duraría dos horas y treinta y cinco minutos, terminando de noche. ¡Y hablamos de faenas de diez pases como máximo!



Jerezano fue otro torero de matadero. Dio la alternativa a Gaona tres años después. Lo mató un toro en Veracruz en 1912 de una cornada en el abdomen parecida a la de Gallito.



Pastor atravesaba un mal momento por aquellas fechas, de ahí que se tuviese que apuntar a semejante festejo quizá contra su voluntad. Subía siempre los escalones de dos en dos para fortalecer las piernas.



Hacían este chiste sobre su presencia ante esos toros:



Valenciano confirmó en este festejo la alternativa de manos del Jerezano. Fue torero valiente pero muy tosco.



Los toros fueron estos que reseñamos:

1º. Surraya, negro listón, bragado y meano, grande como una catedral.
2º. Zambuyo o Zambullo, negro bragado, gigantesco y abundante de pitones.
3º. Desertor, cárdeno claro, enorme, de precioso tipo.
4º. Cabezudo, berrendo en negro, capirote y botinero, tremebundo, corniveleto, una basílica con pitones.
5º. Almendreiro, berrendo en cárdeno y lucero, largo y de gran alzada.
6º. Alperino, berrendo en cárdeno, de gran alzada y bien puesto.

El quinto saltó al ruedo cuando se acababa de ir el sol y el sexto se lidió a ciegas en noche cerrada. La corrida empezaba como decíamos antes a las cuatro y media y se suspendía a las siete y cinco. 

Al primero lo lidió Valenciano como confirmante. Se llevó 7 puyazos, con 3 caídas y 3 caballos muertos. En la segunda entrada a matar dejó una contraria hasta la tela pero resultó prendido y pasó a la enfermería por su propio pie. De allí no saldrá. Ahí tienen la ceremonia:


El segundo tomó 10 varas, dio 6 caídas y mató 6 caballos. Pastor lo liquidó de una corta, otra honda y una entera en la cruz. Ése es el maestro con el toro:



Estos fueron dos  de los tres caballos muertos por el tal Zambuyo:


El tercero se fue a los picadores antes de tomar el capote y cobró dos varas de inicio. En total fueron 9 por 2 caídas y 2 sardinas muertas. Jerezano pasó un quinario, con cuatro desarmes tras sendos gañafones del toro. Lo mató de tres pinchazos, un metisaca y una entera atravesada, con visibles muestras de agotamiento.

Es curioso que en la crónica de El Toreo anotan que el cuarto salió natural y no contrario hacia donde esperaban los caballos. Este Cabezudo fue calificado como de bandera y propuesto para indulto en comentarios a la corrida días después. Tomó 8 varas por 5 caídas y 5 cadáveres. Llevábamos 16 caballos muertos, con gran sentimiento de los de la cuadra de caballos (sic), cuyo representante se llamaba Jarete, a quien hay que enviar un recadito de atención por presentar caballuchos inadmisibles (sic también). Jerezano fue arrollado y pisoteado tras pinchar. Lo retiraron a la enfermería como ven. Allí se quedará:


Salió don Vicente y lo mató de dos pinchazos y estocada caída. 
Pascual Millán, en Sol y Sombra, decía que si los tendidos hubieran tenido aficionados entendidos como en los tiempos de Lagartijo y Frascuelo, ese Cabezudo vuelve a la dehesa a padrear.

El quinto también salió natural cuando se estaba haciendo de noche como decíamos antes. Se llevó 5 varas por una caída. Pastor lo mató de corta, pinchazo, con un tornillazo del toro que hace que sufra un corte en la mano, y entera sin puntilla.

Salía el sexto a las siete menos cuarto, tan de noche que apenas se divisaban los bultos (sic). Tomó 4 varas, dio 3 caídas y el presidente Juan Díaz ordenó finiquitar el festejo porque no se veía ni para jurar. El público dedujo que salían los mansos a llevarse el toro por el concierto de cencerros.

Sólo entonces cedió el Niño de la Blusa en su pundonor aceptando entrar en la enfermería a mirarse ese corte en la mano. ¿Han sumado bien? Los caballos muertos no pasaron de 16, muy lejos de los 25 que se sigue repitiendo hasta hoy. 

O las copitas de Veterano menudearon entre algunos revisteros o es incomprensible tanta diferencia. El propio Pastor repetiría durante años lo de los veinticinco. No obstante, el bueno de Vicente es el más disculpable. En nuestros días, uno como Cañaílla aún tiene la imaginación más desbocada (dice que salió en hombros de la plaza de Tarragona tras cortar un rabo a un veragua cuando se fue a pie tras matar tres con una simple oreja).


En Sol y Sombra hablan de 38 varas cuando fueron 43. Pero es que éstos apuntan 19 caballos muertos. Se acercan a los 16 pero también se les va la romana. La única duda es si algún revistero se quedó siendo ya de noche en la plaza para ver si fueron apuntillados jacos malheridos hasta llegar a la cifra de los 25.

Queda claro que no hay que fiarse de los lugares comunes que se repiten secularmente entre los aficionados. Pasan de unas generaciones a otras sin pararse a comprobar si fue para tanto. Recordábamos que algo parecido sucedió con el célebre Catalán de Miura, recuerden aquí

Con el número de varas pasa lo mismo y lo comprobábamos a cuenta del debut de los pablorromeros en Madrid, pulsen aquí. En aquella corrida de 1888 para Lagartijo, Hermosilla y Guerrita, la disparidad llega a sostener en un sitio que el tercero tomó 10 varas, dio 4 caídas y mató 3 caballos mientras que en otro afirman que fueron 7 varas, 2 caídas y 2 caballos muertos.

Y lo mismo acontece con el célebre indulto al navarro Murciélago, que fue cosa de Lagartijo para regalárselo a Miura... ¡con toda la plaza en contra! Sucedió en 1879 y hubo lanzamiento de botellas al ruedo como protesta. Lo contábamos aquí.

Uno esperaría que sumar caballos muertos no debería ser tan complicado como contar las varas cuando éstas pasan de treinta y te puedes despistar. Pero por lo visto parece que los revisteros antiguos no se aclaraban. La verdad es que la historia de los 25 caballos nos recuerda el final de El hombre que mató a Liberty Valance con lo de 'print the legend'


Pero hay algo en lo que estaremos de acuerdo los aficionados de ahora con los revisteros de hace cien años y no hay discusión que valga. Nos referimos a la queja que copiamos a cuenta de aquellos toros portugueses que no habían querido ver ni en pintura toreros de más postín que los tres comentados. El crítico de Sol y Sombra decía esto:

'Los aficionados tendrían que reclamar más coruches a la empresa de Madrid para que anunciase con ellos a las empingorotadas figuras. Y si alguna de ellas se negare a matarlos, que lo diga públicamente el empresario en los periódicos. Que se acabe de una vez tanta farsa y tantas complacencias estúpidas y a ver si vemos por una vez unas migajas de virilidad'

¿Verdad que eso no ha cambiado?

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.

sábado, 25 de noviembre de 2023

CONVERSACIÓN CON MIGUEL RETA (2ª PARTE)

Seguimos la conversación con Miguel Reta que dejábamos interrumpida en la entrada anterior. Habíamos analizado los tres toros de Sánchez Vara en Guadalix y nos quedaban los de Octavio Chacón. Además, ya verán que nos vamos de unas a otras aunque creemos que es para bien ya que lo que va comentando el ganadero tiene siempre mucho interés en nuestra opinión. 

Aquí tienen otro de los sementales de Reta, viene de Nicolás Aranda:



- El primero de Chacón para mi gusto fue el que mejor metió la cara pero luego el maestro estuvo demasiado parsimonioso, demasiado lento, y en cuanto el toro le pegó un susto dijo que se acabó. Ahí se perdió otra de las posibles orejas.



Exacto, estuvo premioso y no lo pudo ligar. Lo que pasa es que para ligar hay que tragar,  ¿eh? Ojo, es que... si quieres de verdad... pero es que estamos en lo que estamos... Claro, después del mal rato que había pasado en Céret... Es que yo voy viendo que lo que diferencia principalmente a estos animales es la edad. Es que aprenden la de Dios y no aprenden porque les enseñemos en la escuela sino que la primera vez que pasan ya están aprendiendo. Es lo que te he contado de ese toro que fue el otro día a recortes a Albocàsser. (Se refiere a éste de abajo, que es otro de los que padreará):



Se enteró rápidamente de la movida que había allí, se paró y dijo ¡aquí estoy yo! Me vino al poco uno de los organizadores y me dijo: 'Miguel, mételo ya'. Ah, claro, porque ahora tenéis que echarle arrestos, claro, cuando va como la gaseosa no hay problema pero cuando el toro de repente dice ¡pero esto qué es!, cambia todo. Se paró a los cinco minutos y era un toro que no había salido en la vida. Ese toro estaba aprobado para ser semental de lo de lidia y quise ver cómo se comportaba en el ruedo con los recortadores. Pues ahora imagínate un hijo suyo en la plaza, con un torero enfrente... pues ya no lo quieren ni ver. Este toro, que ya te digo que se quedará de semental, es para echarlo en la plaza y el que tenga cuajo que se ponga delante. 

Y ¿no corre el peligro de pararse como hizo en los recortes y convertirse en un marmolillo?

No, un marmolillo no. Quizá escarbará hasta llegar al infierno pero en cuanto se metan con él va a ir hasta la sirga del tendido. Pero si nadie se mete con él la conclusión será que es un toro soso. No será un marmolillo, lo que pasa es que no habrá c****** de salir a por él. Yo he visto a Vicente Domínguez llevar a Viana para recortes seis vacas de las mejores, que yo las conocía de haberlas visto mil veces. Pues no hubo recortadores que saliesen y el público terminó silbándolas. Y Vicente había llevado la artillería, sus mejores vacas, pero si no hay quien se juegue la vida ahí delante... entonces, claro. Es que si en la plaza sale un torero que pega un pase, se va, vuelve, pega otro, se va, pues entonces... Y como pegue tres seguidos pone la plaza en pie, que tú ya lo viviste en Céret con aquellos pases que arrancó Vara a Rabioso. Y en Estella podría haber sacado mucho más, ¿eh?, que yo pensaba: 'para uno que sale, ¡cómetelo!' También es verdad que hablamos muy fácil desde fuera y hay que estar ahí delante. Este primero de Chacón creo que era un toro para haberle sacado algo más pero es lo que hay, como decimos los listos desde fuera.

- Respecto a lo que dices de la edad, el conejo tenía la justa y a pesar de ello también demostró que le funcionaba mucho la cabeza

Claro, pero todavía se le puede dominar y eso se ve claramente en las tientas. De tentar con dos años y medio a tres años y medio hay una diferencia abismal. Cuando por ejemplo tentamos una que hemos dejado porque estaba preñada se nota muchísimo. En esto, el paso de la adolescencia a la madurez potencia mucho más lo negativo que lo positivo

Y también hay un gran componente de psicosis. Como aficionado estás deseando desde el tendido que el torero se olvide por un momento del hierro.

Total, totalmente... y pasa lo mismo en los recortes pero...

- ... con estos bueyes hay que arar, ¿no?

No hay más narices.

Su segundo fue Rabioso, un chorreado que remató bien en los burladeros y en un lance llegó a clavar el pitón derecho en la arena humillando bien. 



Majada no le pegó demasiado y quizá con ese toro se han visto los únicos naturales que alguien ha dado a un animal vuestro porque Chacón se echó sorprendentemente la muleta a la izquierda. Eso nos deja con la duda de si hubiera podido sacar algo más de no haber estado otra vez tan dubitativo.

Tú me decías en una pregunta anterior que a los toreros les faltó echar la pata p'alante. Éste fue un toro que puede servir como ejemplo de esa afirmación. Ese Rabioso pudo parecer un toro soso, convencional, sin más. Pero ya demostró en el caballo, donde Félix Majada estuvo fantástico, que el animal tenía mucho peligro. De hecho me mandaron una foto donde se ve al picador con el pitón del toro en el pecho. En banderillas, con Adalid jugándosela, se confirmó ese peligro, pero era del que no se transmite. Octavio mató el toro justo delante de mi posición. Nada más doblar me echó una mirada de rabia y enfado contenido que no te puedes ni imaginar. Y allí no se enteró nadie. Por eso hemos de tener claro que los que están en el ruedo ante estos animales merecen todo nuestro respeto. ¡Que no son de los de 140.000 euros por tarde! Si vosotros no sois los que los defendéis y apoyáis, estamos j******.

Con el último, que era un colorado anteado, poca cosa y además se vio al diestro fatigado. Al final no vimos nada.



Nada... Bueno, vimos una cosa que yo no había visto en la vida y es entrar a matar el matador por un lado y el subalterno con el capote por el otro, yendo los dos a la vez hacia el toro. Eso no lo había visto nunca, como cuando vamos al alimón los recortadores.

Puse en la crónica que había resucitado Lagartijo con su hermano Juan al lado. Que conste que eso es algo que no está prohibido por el reglamento.

Y había ocho tíos por allí con capotes aunque yo lo entiendo perfectamente, ¿eh? Porque salió un hijo de p*** pero es que si ése llega a salir el primero igual cambia todo. Lo que pasa que Vara es muy listo y como conoce todo lo que hay aquí, echó ese primero suyo por delante. Este último es verdad que era muy, muy difícil... Y luego se levanta el cantamañanas aquel a decir lo de sinvergüenza... ¡hombre, por favor! Eso me dolió... lo que no sé es si la tarde anterior hubo ese ambiente, ¿lo hubo?

No... es que fue diferente...

- Pero es que a veces yo veo otro ambiente (resopla). Es lo que me decía Victorino, que en tres días te comen... pero es que se estaban jugando la vida ahí y además se la estaban jugando de verdad. 

Alguno de los toros se astilló e incluso escobilló.



Sí, recuerdo el tercero y eso me sorprendió. Parece que se golpeó en la manga al salir porque ya se había visto en la Copa Chenel que en esta plaza esa manga era rara (recuerden que lo comentábamos aquí). Cuando salía pegó allí dentro un golpe y sacó una alcachofa así. Pero es que esa plaza tiene lo que tiene y la manga es así, además no hay corrales... y eso que en la manga se pasa de un pasillo a otro que está elevado y habían echado hormigón para rebajar la diferencia. Por allí estuvieron intentando ayudar los peones del Ayuntamiento que, por cierto, hubo uno que al ver el sobrero dijo: 'bah, esto lo toreo yo, ¡vaya m*****! Pues cuando acabó todo fui a darles las gracias y a éste le dije: 'oye, ¿qué pasa con el pequeño?, dijiste que ibas a torearlo tú y no has salido' y los otros se descoj***, (riendo).

-Siempre has dicho que lo de ver tus toros toreables lo verían tus nietos pero yo creo que lo vas a ver tú...

- ¿Toreables los de Guadalix?

De todos los que has lidiado hasta ahora, sin duda.

- (Hace un gesto de extrañeza con la cara) Entonces si eran tan toreables como dices tú, no los torearon, pues...

¡Eso digo yo!

¡Ya, ya! (Riendo)

Es que de eso precisamente nos quejamos los que hemos visto tus tres corridas. Lo de Guadalix dio muchas más oportunidades a los toreros que lo de Céret o lo de Estella.

Y sin embargo los toreros echaron más el resto en Francia o en Estella que aquí... porque ¿dónde está el equilibrio? Es que... cuando pares la grabadora te lo diré. ¿Fue lo más toreable, dices?

En comparación con las otras dos no hay duda.

En Estella hubo toros de la U y de la A yo creo que mejores. Lo que pasa es que la situación que había allí comparada con la de Guadalix hizo que parecieran totalmente diferentes. Los toros de Estella los lidias en Guadalix o al revés y salen animales completamente distintos, Rafa. 



¿Qué hubiese pasado?

Pues yo creo que en Estella, en aquel ambiente festivo, con la situación que vivieron los dos toreros, les pones los toros de Guadalix y hubiéramos vivido una corrida mucho más emocionante que la que vimos en Guadalix. Y al revés, lidiando los toros de Estella en Guadalix, hubiéramos visto una corrida que habría transmitido más que la que vimos. Por todo, por la materia prima, por el ambiente, por los toreros, por el tendido... La verdad es que yo nunca pensaba que podría condicionar tanto una corrida todo lo que hay alrededor aparte de lo que es el propio toro. Yo, como ganadero, me fijo en el toro, en su crianza, en el manejo, en la lidia, en todo lo que tú quieras... Mira, yo estuve varios años en la presidencia de la feria de Pamplona como asesor y allí me di cuenta de que hay un montón de condicionantes. 



Oye, te hago una pregunta: esa corrida de Guadalix ¿hubiera sido la misma si se celebra a las seis de la tarde del sábado?

No sé...

Hay tantas cosas... Aquellos aficionados que la noche anterior comentaban que yo quería colocar un toro cojo porque habían oído algo del que se lidió en quinto lugar, luego el trapío del sobrero... es que influyen tantas cosas... Yo no veo esa misma situación en un gol o en una canasta. Pero también es lo bonito porque en un ruedo se dan un montón de factores que inciden en que esto vaya hacia un lado o hacia otro. Los ganaderos viejos hablaban de todo, hasta del tiempo, de la luna... y del copón. Le he dado muchas vueltas y las dos corridas de Estella y Guadalix lidiadas al revés hubiesen sido muy diferentes. Y los toros eran hermanos o como máximo primos pero hubo lidias diferentes, público diferente... cuidado porque quizá mis toros sean más para fiestas de pueblo que para ferias de aficionados. Porque necesitamos un empuje que no vendrá de los que van con la recortada sino de...

¿De los que van con la bota de vino?

Hombre, claro, es que en un momento dado arrastran a todo el mundo, arrastrarían incluso a los talibanes que estáis allí con la recortada: que si el toro mueve las orejas, que si el otro se enfrenta al público... ¿tú has visto una corrida donde la Guardia Civil tenga que intervenir dos veces en el tendido y en el callejón? Vinieron a Guadalix unos amigos que no son taurinos pero que son de la cuadrilla y alguno no había visto una corrida de toros en su vida. Se quedaron acoj***** con la que se lió en el primer toro y me preguntaban si esto siempre era así. Y yo les decía que ni por el forro, que el 90% de las corridas son más regulares, más estándar. Mira, yo quiero seguir mis pasicos, a ser posible en Francia, en algún sitio donde no haya excesivo compromiso y ya está.



Pero a pesar de todos esos condicionantes que rodearon la corrida, insisto en que los diestros llega un momento en que están solos con el toro y ahí debieron darse cuenta de que había más opciones de triunfo que las que ellos mismos habían tenido en Estella o en Céret.  

- (Escogiendo los hombros con gesto de resignación) Pues tienes toda la razón, no puedo decir otra cosa. Pero yo sólo sigo insistiendo en que la respuesta la tienen los que se juegan la vida. Es que hay que estar ahí, ¿que voy a decir yo? Pues que muchas gracias y que les pondré una chistorrica cuando vengan a casa. 

Otra cuestión que también comentamos con algunos aficionados: ¿cuál es el tipo genuino de la casta navarra? Porque en la corrida salieron tan desiguales que no nos aclaramos.

Mira, tú lo ves en casa: la desigualdad existe en las cinco líneas que tenemos aquí. No se podrá unificar lo que tenemos nosotros igual hasta dentro de treinta años y eso que ya hemos ido mejorando porque llevamos veinticinco. Pero ¿será eso la casta navarra? No, eso será el fenotipo de nuestra ganadería. Es que volver a lo antiguo de la casta navarra... la casta navarra tiene Arriazu, que hoy es el presidente de la Asociación de Ganaderos de Navarra; tiene también Vicente Domínguez, que es el presidente de la Asociación de Ganaderos de casta navarra de Navarra. Ellos triplican las vacas que tenemos aquí. Entonces ¿qué vacas eran las antiguas? ¿Serían las de Nicolás Aranda porque pastoreaba y estaban así (hace un gesto poniendo la mano de perfil)? Es que la selección que se hace va en función de lo que se busca. Arriazu manda la mitad de las vacas a cubrir con charolés y necesita mucha más caja para los partos. Vicente Domínguez tiene la comida por castigo y van desarrollando mucho más. Laparte busca siempre el animal más ágil y correoso además de inteligente. (Este chorreado veleto viene de Arriazu y Adolfo):


¿Dónde está la igualdad? Es que la desigualdad está en la propia evolución de nuestra ganadería porque yo he empezado con estos mimbres. Entonces, claro, es muy bonita la foto del toro antiguo de Zalduendo en Pamplona pero quizá era bonito porque aquél pasó más hambre que Caín. Vienen ahora y dicen que eso es lo antiguo, pues ¡qué quieres que te diga! Lo del fenotipo o la morfología de la casta navarra es algo que gusta mucho a los aficionados y especialmente para compararlo con lo antiguo. Pero lo que hoy tenemos sobre la mesa es el manejo y la alimentación y eso ha cambiado totalmente, aquí y en los demás sitios. Porque hablan mucho los aficionados de los toricos de casta navarra pero luego quieren ver un pitbull como aquel Rabioso de Reta en Céret. El hijo de ésta precisamente: 


¡Vaya, qué toro!, parecía el Mike Tyson, el boxeador ése. Muchas veces yo pensaba que el toro había salido deforme, con esos pechos, porque esta vaca era grande y agalgada. Era de Adolfo, de las antiguas, y va y te sale esto: 


Entonces, ¿en qué quedamos aquí? Queremos lo de antes, que era muy bonito pero también lo de ahora, oye, explícamelo. Yo con lo que tengo es con lo que voy a tirar y no hay otra. Es que aquél cruzó, el otro metió no sé qué, aquél mató... y yo ¿qué hago? Es que yo nací en 1966, no en 1923. 

A ver qué piensas de una frase que me dijo un lector del blog: 'la corrida ha salido muy toreable, o sea, decepcionante'.

- (Se queda pensando) Pues puedo estar de acuerdo con él. Claro, es que... (vuelve a pensar) ¿A dónde vamos? Mira, cuando empecé utilizaba una palabra que no me gusta nada y es aquella de la toreabilidad de Juan Pedro pero es que sin toreabilidad no había manera de salir adelante con esto. Porque si no sale toreable me dirán lo que me decían: anda, vete con las coloradicas a las calles. Al final voy a lo que me aconsejó Merino hace ya mucho tiempo: 'Miguel, mantén la materia prima sacando de allí lo que te pueda servir pero sin perderla'. Y eso es lo que intento, mantener la materia prima pero intentando evolucionar porque eso que hablan de que la corrida fue toreable, o de que esto de Reta ya no es lo que era... pero fíjate ¡que llevamos un telediario y medio y ya están hablando de decepcionante! Yo soy el primero que quiere que haya transmisión y emoción pero también que a la vez se dejen porque es que si no, volvemos a lo de Céret. Acuérdate de que el primero que se levantó en la tertulia dijo que había sido una moruchada infame. 

Cuando dices mantener la materia prima ¿a qué te refieres?

A la materia prima antigua de las vacas viejas de las que seguimos seleccionando todavía. Es que el ganado de casta navarra que tiene un comportamiento más dulce para las calles va al matadero. No queremos tontas, queremos más inteligencia que corazón. Eso es lo que se ha defendido en la casta navarra toda la vida. Y resulta que ahora, cuando yo voy buscando las pocas que tienen más corazón que inteligencia para que sean toreables, me dicen: ¡te vas a estrellar, Miguel! Luego vienen los cruces entre Adolfo y Nicolás, o Nicolás y Arriazu, o Arriazu y Vicente... que si algún toro de El Patillas que echamos aquí... Vemos vacas que salen más listas y van para una cosa y si tienen más corazón que inteligencia van para la otra. Entonces, decir que fue decepcionante la corrida de Guadalix... lo decepcionante puede ser que no transmitan o que den la impresión al tendido de que no transmiten o que los dominan... Ésa es la jugada pero ¿dónde está el éxito? Pues no sabría decirte. Es que al final tienes que tener el objetivo de que lo mío se deje un poco. Esto no ha funcionado durante cien años, ¿eh?, y por algo será. Si yo intento que se dejen, salen los que en teoría me tendrían que entender o comprender a decir que me quedo en tierra de nadie. Y ¿qué hago yo?, porque si me sale una corrida comercial moderna de las malas tampoco me van a querer...

Por supuesto. 

Claro. Pues, anda, organiza esto... ¡vaya panorama! (riendo)

Este otro semental, con el hierro de Reta, es el más viejo y viene de Lahuerta:
 

Siempre has dicho que estas corridas tuyas son una especie de catas o tentaderos públicos. Respecto a la suerte de varas, en Guadalix quizá no habría que haber puesto los toros tan largos, ni siquiera tres veces. Incluso podría haber sido mejor no picar exactamente a contra querencia.

Muy bien. Estoy totalmente de acuerdo. Cuando yo hablé con los del club ya les avisé de que nosotros no íbamos a tener el nivel que ellos exigen en la suerte de varas y les dije 'vosotros veréis'. Me respondieron que no me preocupase, que se haría lo que tocase y que no había ninguna exigencia ni nada. Pero fue el público y los propios profesionales quienes sí que exigieron. Todos, tres puyazos y poniéndolos de largo... y yo pensando: 'estamos locos ¿o qué?' Pero ahí no puedo decir nada. Yo los hubiera puesto lo justo y punto. Unos los pusieron para mal y otros para bien. Total, ¿para qué vas ahí...? Pero ese día quien mandó fue el público porque ni los de 3Puyazos, que estaban a mi lado, lo acababan de entender. Por eso te digo que lidiar en Francia lo veo más factible. Ya te digo que teníamos hablado que en la suerte de varas, sólo ponerlos lo que fuera necesario, nada más. Pero luego los pusieron todos y tres veces, ¡hasta el que no podía! 

¿Es posible que acusasen el embarque tan accidentado y luego el bajar del camión al ruedo?

Lo peor fue el embarque, que resultó durísimo. Ten en cuenta que nunca lo habíamos hecho de noche. Encima se nos rompió la puerta de entrada al embarcadero y fue todo un sinvivir. Fue muy, muy duro y estoy convencido de que lo acusaron seguro. Pero para todo hay que aprender intentando mejorar. Si tuviese la seguridad de que en los próximos diez años voy a lidiar aunque sea sólo una corrida por temporada, plantearíamos invertir para poner las cosas en mejores condiciones. Pero yo vivo de los festejos populares y lo tengo todo preparado para subir y bajar vacas y toros cada día. En cambio, en el caso de toros limpios se hace todo mucho más difícil. 

El comportamiento de tus toros ¿podría ser diferente en caso de que estuviesen en cercados mucho más amplios?

Sin duda. Yo creo que nuestros animales, estando sin manosear y sin enfundar y teniendo terreno... como tiene Miura, que los tiene que ir recogiendo con el caballo para que vayan a comer... ¡es que sólo un cercado de Zahariche es más grande que toda mi finca! Se notaría muchísimo.

Y una última cosa de los toros lidiados en Guadalix: ¿es posible que algunos no hubiesen acabado de descolgar los testículos del todo?

- (Sorprendido) ¿Te fijaste en algo? (Se queda pensando) Pues puede ser porque estos toros desarrollan muy tarde y sin embargo, cuando desarrollan, hacen unos testículos muy grandes que llaman la atención en relación a lo pequeños que son de caja. Pero la verdad es que les cuesta mucho... Pues mira, no me había fijado en ese detalle. Pudiera ser... es que el tema fisiológico, morfológico y fenotípico de estos animales de raza antigua no tiene nada que ver con otros toros muy mejorados y adaptados al mundo moderno en alimentación, selección y manejo... 

- Para terminar informaremos a la afición de que tienes doce toros para el año que viene en una corrida que se celebrará ¿en Francia o en España?

No podemos asegurar nada porque está todo muy complicado, ¿eh?, muy complicado. Sí que me gustaría lidiar en Francia y especialmente en el sudoeste. Pero al final igual me los tengo que comer con patatas o echarlos en la feria del pueblo de al lado. Tengo ilusión en ir tocando sitios diferentes. Esto mío ha consistido siempre en divulgar y en enseñar y el seguimiento de mi proyecto ha sido siempre mayoritariamente francés. Me hace ilusión lidiar allí pero al final será donde sea, en Francia, en España, o en la luna (sonriendo; recuerden algunos de ellos aquí abajo)


Bueno, eso será siempre que haya toreros dispuestos porque si uno fijo como ha sido siempre Sánchez Vara terminó bastante molesto en Guadalix, ya me dirás...

- (Vuelve a sonreír pero se calla y no dice nada). ¿Sabes lo que decían los pastores de la zona de Las Bárdenas donde tú tienes familia? Cuando veían de lejos que venía la tormenta, decían: '¡ay copón!, ¿dónde pasaremos la noche?' Pues eso, ¡así es! (risas de los dos). ¡Claro! ¡Es la verdad! ¡Cagüensós! ¿Y dónde pasaremos la noche?

Hasta aquí llegó el coloquio. Hemos intentado lo que recomendaba Joaquín Vidal cuando se entrevistaba a alguien del planeta de los toros: preguntar lo que pueda interesar al aficionado, saber escuchar y transcribirlo todo con sinceridad, ajuste de ideas y cierta gracia. 

Hombre, lo de la gracia corrió más de parte de Reta, como han comprobado en su última respuesta. Esperemos que hayan echado ustedes un rayo entretenido.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.