domingo, 23 de agosto de 2015

¿POR QUÉ DA TANTO MIEDO EL HIERRO DE SALTILLO?

FOTOS DE LA FERIA DE TAFALLA, 2015 (2):
                            SALTILLO

Los de Tafalla parecieron saltillos mexicanos, ya les dijimos en nuestra crónica que no se comían a nadie. Ninguno bravo y sólo uno manso que no hizo honor al nombre histórico que llevaba, 'Ruidón'. Pero un manso al que la lamentable lidia que se le dio hizo que pareciera un asesino cuando no lo era ni de lejos.


Y es que en Tafalla hubo psicosis paranoica con el hierro de don Antonio de Rueda y Quintanilla, marqués de Saltillo. Lo mismo parece que sucedió en Cenicientos. La consecuencia fue que las cuadrillas anduvieron medrosas y los toreros desconfiados cuando no aterrorizados, con lo cual los toros dieron la impresión de ser peores de lo que realmente fueron.

Si no nos creen, miren cómo metía la cabeza este 'Olivero' de Iván Vicente:


Parece que estemos en el coso de Insurgentes ¿verdad? Y ¿qué me dicen del primero de Damián Castaño? Observen al tal 'Lemanoso' arrastrando el morro por el coso tafallés:


Y, como no hay dos sin tres, vean a Javier Antón conduciendo a 'Banderillero' (con esa moda que se les ha puesto a todos de ayudarse con el estoque en los naturales ¡debería prohibirse!):


El único que resultó, como decíamos, manso a secas sin ser ningún marrajo fue este 'Ruidón':


El día del desencajonamiento ya tuvo su protagonismo negativo no queriendo entrar a chiqueros con sus hermanos. Y no corrió el encierro para evitar otro sainete o alguna pelea intempestiva en los corrales de Escolapios. De trapío, irreprochable, ya ven:


En el apartado, las cuadrillas montaron el número habitual e insistieron en que quedase como sobrero y en su lugar saliese un torete chatobrocho que se llamaba, hablo de memoria, 'Viruto'. Ahí la empresa estuvo en su sitio e impuso la lidia de 'Ruidón'. Ya pueden ustedes suponer que, por la tarde, Damián Castaño y su cuadrilla no lo iban a querer ni ver.

Aquí tienen a los otros saltillos, con este de abajo, primero de Antón, también precioso de lámina:





Precisamente fue Javier Antón el único diestro en toda la feria que se estiró con gusto a la verónica, lo cual nos deja un balance descorazonador.


Toreó finamente con la muleta pero a un toro que cojeaba visiblemente por haberse lesionado en el segundo tercio. Menos mal que mató mal porque así la cosa quedó en vuelta al ruedo y no en una oreja que le hubiese regalado el paisanaje por haber estado pinturero con un toro inválido:


Iván Vicente venía, dicen, de casi abrir la puerta grande en Madrid el domingo. Pues aquí no demostró nada. Le tocaron los dos mejores toros: en el primero dejó que su oponente se hiciese el amo y en el segundo, tras un horroroso inicio de faena a base de mantazos, dio pases que aburrieron al toro y a nosotros. Eso es lo que demostró en Tafalla.


Y el pobre Damián Castaño cometió el pecado capital de un torero, que es dejar que se note el miedo que tienes. Dio un sainete en su primero a la hora de matar (dos pinchazos en los blandos, un golletazo, otros dos pinchazos bajos, casi media caída y ocho descabellos).

Y salió 'Ruidón', que mató a este caballo porque lo cogió por el otro lado. Ya saben que los toros huelen la sangre y este de Saltillo la olió y despanzurró al equino sin que en la plaza nadie notase nada porque la protección evitó un espectáculo decimonónico. Este fue el momento:


Ya ven que la psicosis del terror a Saltillo afectó también a los picadores con algunos puyazos de los que gustan a los antitaurinos para su propaganda (en el patio, tras recomendárseles que intentasen picar a los toros en el morrillo y que los pusiesen de largo, uno de ellos comentó 'Bah, eso, para las concurso, aquí, no'):


Volviendo al pobre Damián Castaño, menos mal que de inicio entró a matar porque, si intenta algo de faena, corre el crono y el toro se le va vivo al corral, cosa que no creo que le hubiera importado mucho. En esos momentos, Castaño prefería andar sobre cristales rotos que pasaportar a 'Ruidón'. Fíjense en que hay más gente en el ruedo que en el tendido:

"No me habéis banderilleado ni toreado, no podéis conmigo y me tenéis miedo: ¡yo sí que merezco el indulto!"

Al final, media cayéndose al suelo, tres pinchazos bajos a paso de banderillas, tres más hondos, otro en el brazuelo y esta casi entera atravesada que ven aquí con todos los peones alrededor (más nueve descabellos):


Lo único positivo es que no hubo un altercado de orden público porque, en tiempos no muy lejanos, no sabemos si hubiesen tenido que intervenir los forales para evitar algo grave.

Pues ya lo ven: saltillos muy toreables, mansurrones, con el manso 'Ruidón' al que nos vendieron como si fuese Jack El Destripador pero no nos engañaron, con unas cuadrillas aterrorizadas, unos picadores nefastos y un público decepcionado porque esperaba mucho más de este encaste.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.

viernes, 21 de agosto de 2015

EL GESTO DE UN TORERO: FRANCISCO MARCO

FOTOS DE LA FERIA DE TAFALLA, 2015 (1):
                     DOLORES AGUIRRE
Por una vez, no empezaremos con los toros como es habitual en este blog sino con un hombre, Francisco Marco. Es así porque tuvo un gesto torero que no olvidaremos y más en los tiempos que corren de tanta contemplación, tanto buenismo, tanto eufemismo para no llamar a las cosas por su nombre y, en fin, tanta memez.
Empezó la faena de muleta a su primero 'Caracorta-44' equivocándose al ponerse de rodillas en la raya ante un toro que apretaba para adentro. Lógicamente, lo arrolló como ven aquí:
  

Ahí tuvo mucha suerte. Pero es que, al final, tras un pinchazo que el toro escupió, tuvo un descuido y el toro lo derribó propinándole dos cornadas en el muslo, una de ellas de doble trayectoria. Este es el momento: 


Marco, en gesto de torero como Dios manda, se levantó delante de nosotros mientras le manaba un arroyo de sangre y se fue con el estoque a por el toro. Cojeaba visiblemente pero no quiso retirarse sin pasaportar a uno de los Caracortas de la tarde. Observen aquí el rastro de sangre que lleva por la pierna y cómo el toro, resabiado, ya iba directamente a por él. Las cornadas eran de 15 centímetros.


Nos hizo pasar un mal rato porque, además, tuvo que caminar bastante hasta que acabó con él. Y después no quiso que lo llevasen en volandas sino que se retiró por su propio pie. Para quien esto firma, fue el mejor momento de la feria por su dramatismo, por su torería, por su valentía y por su desafío a estos tiempos modernos en que vivimos rodeados de sandeces, de disimulos y de cominerías.
Vamos con los toros porque vimos una corrida muy interesante y completa aunque muy desigual de presentación. Estos dos primeros fueron unos mansos que nos hicieron presagiar otra catástrofe como la de hacía un mes en Céret: 



Ojo porque este segundo de arriba fue ocho veces al caballo de las que salió huyendo en todas y coceando en cinco. De fuentes bien informadas pudimos averiguar que había sido probado como semental y, claro, ya sabía que en el caballo no daban almendras garrapiñadas.
 Pero la tarde remontó con cuatro toros de verdad, estos: 




'Caracorta-41'


El mejor de todos, 'Caracorta-41'. Desarboló a Aguilar en los lances de recibo y el diestro, sin disimulo alguno, se acercó a su picador para decirle '¡pégale!' Le recetó dos varas asesinas, la primera con una carioca alevosa. A cualquier toro menos a este lo hubiesen dejado para el tinte: 


Y luego el toro embistió con fijeza y con codicia:
Y cuando Aguilar se perfilaba para matar, iba aún con la cabeza por las nubes pidiendo pelea. Si el diestro le dosifica el castigo, podría haber ido tres o cuatro veces al caballo y era un toro de vuelta al ruedo. Vean la estocada antes de las dos orejas (con una valía para castigarlo por hurtarnos la suerte de varas bien hecha):

Fue una faena de poder a poder que acabó en empate. Ojo no sea la tarde más completa de Aguilar en toda su vida y ante dos toros de verdad.

Salió a hombros con un total de tres orejas. Aquí lo pueden ver con su primero 'Carafea':


Encabo mató tres toros por el percance de Marco (atención: mató Encabo más toros de Dolores Aguirre en una tarde que nuestras queridas figuras ¡en toda su vida!). Pero anduvo falto de chispa, como sin ilusión, visiblemente molesto por el aire. Eso es lo que nos pareció porque perfectamente podría haber acompañado a Aguilar a hombros. Desde Luego, el Encabo de hace seis años, sale a hombros seguro. Vean que por momentos se estiró bien:

Pero no le perdonamos su desinterés en el primer tercio cuando hacía un mes le habíamos visto cuidar todos los detalles en Céret y poner los de Adolfo, largos en el caballo ¿Por qué a los franceses sí y a los tafalleses no?
Y encima pidió el cambio a su segundo tras un monopuyazo de cárcel cuando era un toro que peleaba con clase en el peto ¡Qué mal!
¿Saben ustedes lo que comentaba algún picador en el patio? Literal: 'a ver si mandan de una vez al matadero esta p... ganadería'. Y esto acompañado de los mejores deseos para la ganadera que, como supondrán, no podemos transcribir aquí.
Así vamos en los toros, con los antitaurinos dentro. Pero siempre nos quedará el recuerdo del gesto de Marco. De aquí a cincuenta años, cuando las corridas ya hará tiempo que no existen, un abuelo de Tafalla sostendrá este diálogo con su nieto:
- ¿Sabes lo que pasó hace muchos años en una corrida? A un torero un toro le pegó un navajazo en la pierna pero se levantó lleno de sangre y quiso matar al toro. Hasta que no lo consiguió, no paró y llevaba tres cornadas.
- Pero ¿quién era? ¿Un loco?
- No, un Torero.
Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.


jueves, 20 de agosto de 2015

FERIA DE TAFALLA, 2015: NOVILLOS DE ARISTRÁIN

       LOS NOVILLEROS DEL MERCEDES

A un tentadero en Salamanca se invitó a un chaval que quería ser novillero ¡y se presentó con un Mercedes último modelo! Ya saben ustedes que el sueño de los toreros era primero tener un Mercedes y luego una finca, por eso el mayoral le dijo 'oye, si ya tienes el Mercedes, ¿para qué quieres ser torero?'

Los tres novilleros de Tafalla deben de pilotar ya como mínimo un BMW porque mostraron una actitud desangelada, ausente y chirle, saliendo a torear como quien va a entregar una declaración de renta positiva a Hacienda ¡Qué poca afición! Y con un ganado de carne de membrillo.

La novillada de Aristráin -que no de Aguadulce como se anunció, aunque es agua del mismo pozo- habría propiciado el corte de un mínimo de seis orejas en otras manos. Fue muy pareja y astifina aunque terciada, sin ningún poder en el caballo excepto el sexto pero con cuatro novillos de una nobleza y una fijeza absolutamente extraordinarias.

Lo mejor de la tarde fueron los subalternos: Venturita, Simón y, especialmente, Mario Campillo (que fue torero). Este último tanto en la brega como con los palos anduvo magistral. Fue un placer verlo.


MARIO ALCALDE. Sustituyó al herido Rivera. Su primero fue de dulce y su segundo más que aprovechable. Además Campillo se lo lidió de cine. Pues en el primero estuvo fuera de cacho y en el segundo totalmente desaborío.

Algún natural bueno al segundo que ya les enseñaremos en las fotos y el gran detalle de torear CON EL ESTOQUE DE VERDAD. Sí, han leído bien, igual es un consejo que le ha dado Frascuelo. Fue una delicia ver que al acabar sendas tandas en cada toro, al verlo cuadrado no realizó el sainete de hacer una excursión por la espada sino que se perfiló y entró a matar ¡Muy bien!

Nos da lo mismo que pinchase o no, ni lo ponemos. Sólo con la actitud de torear con el estoque de verdad ya nos vale ¡A ver si cunde el ejemplo!

JAVIER MARÍN. Desconfiado toda la tarde e igual de desangelado que los otros dos a pesar del inicio de rodillas a su primero que fue un espejismo.

Tuvo la manía de torear a media altura toros que no eran inválidos con lo cual los fue descomponiendo. Su segundo era un toro de mazapán, le dio ochenta pases y el toro acabó con el morro lleno de arena de Tafalla porque hacía un surco a base de nobleza y fijeza. Marín estuvo exasperante con sus pausas entre pases y el público se fue incomodando al ver que el toro se iba a ir con las orejas puestas. Una auténtica pena.

El mayoral Johnny (sí, aunque es andujareño se llama así, no es un error) debía de tirarse de los pelos al ver que los novillos se iban sin desorejar. Y ojo porque Marín no está pendiente del reloj y se llevó cuatro avisos.

Por cierto, la presidencia tenía una media de edad de 32 años ¿qué les parece? Y les podemos garantizar que son personas con una afición muy seria. Estuvieron impecables, sobre todo al obligar a algún peón a volver a entrar a clavar cuando ya tenía el capote de brega en la mano.

ÁLVARO GARCÍA. Otro que ya ha estado en el concesionario de Mercedes-Benz. En el primero aburrió por la total ausencia de emoción excepto cuando entró a matar. Resultó que el toro se iba a por él y le echó por dos veces la cara a la barriga. Reconoceremos que no se descompuso ni se alivió aunque le costó matarlo.

Su segundo era de miel y hojaldre. Toreó nuevamente sin emoción y sin ligar a un toro que llevaba las orejas en la mano. 'Venturita' le recomendaba desde el callejón '¡ábrelo!', o sea, 'échatelo para afuera al rematar el muletazo para poder ligar y calentar a la gente' (la habitual trampa de las figuras, ya saben). Como enganchó una casi entera, trasera y caída de rápido efecto, cortó la única oreja de la tarde.

FOTO: http://ahorazonamedia.com Los de Aristráin en el encierro matinal

La única cuando, como decíamos, tuvieron que ser cinco o seis con más de una salida a hombros. Hemos añorado al bullidor Jiménez, triunfador el año pasado quien, con estos novillos de hoy, arma un lío monumental. Pero la empresa de Tafalla tuvo el feísimo detalle de no anunciarlo ni en los carteles ni en la sustitución que hubo (igualito que en Francia, donde llevan a rajatabla invitar a los triunfadores al año siguiente por encima de cualquier circunstancia).

Aristráin tiene dos corridas de toros para el año que viene a las que ya pueden ir apuntándose nuestras queridas figuras después de lo visto que, aunque sean Núñez, no se comen a nadie, hombre. Y la triste verdad es que estas mismas figuras no tienen de qué preocuparse viendo la poca afición y las pocas ganas que demuestran estos novilleros que tendrían que comerse el mundo.

Bah, total, ya deben de tener el Mercedes.

Saludos cordiales desde Tafalla. Rafa.

martes, 18 de agosto de 2015

FERIA DE TAFALLA, 2015: CARRIQUIRI

      LA MONA VESTIDA DE SEDA

Ojo, no se equivoquen, que no eran monas, todo lo contrario. Tres toros habían estado en Madrid. La presentación fue de plaza de primera, con alguno incluso pasado de kilos. Decimos lo del vestido de seda porque su comportamiento no hizo honor a la lámina que tenían.

Los dos más aprovechables, los de El Capea. El sexto, un marrajo con peligro sordo y los demás, parados y con poco poder. En el caballo, nada de nada excepto el sexto, único que peleó decentemente. Sí reconoceremos que fueron duros a la hora de morir.

Cuando volvamos a casa les pondremos las fotos para que disfruten con el trapío de alguno de los ejemplares, ya verán.


JAVIER CASTAÑO. Desastroso al poner los toros en el caballo. Como lo oyen, nosotros nos frotábamos los ojos, una actitud indignante.

Su primero no tenía ni fuerza ni casta y la faena no tuvo ningún interés, encima con el toro punteándole constantemente la muleta. Se perfiló mal y cobró una estocada trasera que le valió una orejica muy baratica.

Su segundo, uno de los de Madrid, denotó de inicio que no valdría para gran cosa. Así fue, compitieron Castaño y 'Viñatero' en sosería y salió ganando Castaño porque, a base de torear mal, encima lo descompuso. Eso le valió un gañafón y dos desarmes.

Se volvió a perfilar fuera de la suerte y, al entrar, se quedaba en mitad de la misma de forma incomprensible. Tres pinchazos malos y tendidísima trasera. Castaño ¡mal! Y no te perdonamos tu total y absoluto desinterés en el primer tercio, que sea la última vez.

EL CAPEA. Le tocaron los dos toros más aprovechables, como decíamos antes. Su primero, de gran trapío, fue fatalmente puesto en suerte en el caballo, otro desastre a sumar al de Castaño. No dominó al toro aunque lo intentó con la izquierda ya de inicio de forma sorprendente. Ahogó la embestida a un toro que pedía más distancia y dio un sainete a la hora de matar con, entre dos pinchazos, una horrible tendida haciendo guardia escandalosamente y una contraria ¡en el brazuelo!, imagínensela aunque cuesta de creer.

Su segundo, ensillado y engallado de salida, embistió con cierto gas y aquí a El Capea se le vio más a gusto aunque al hilo del pitón y perfilero. Hizo un par de desplantes pueblerinos para intentar arrancar una oreja pero mató mal. Con gran desfachatez, se pegó un vuelta al ruedo por su cuenta.


FOTO: https://ahorazonamedia.com  Los Carriquiri en el encierro matinal

PEREZ MOTA. Repitió su terno fucsia que le llevó a ser el triunfador el año pasado. Muy buena disposición toda la tarde intentando hacer las cosas bien y, además, en ningún momento observamos que acusase el que los toros este año le hayan pegado a base de bien.

Se vio claramente que el primero no iba a durar nada y así fue. Por eso, al alargar la faena, se puso pesado pero atención porque propinó la estocada de la feria, excelente de ejecución y de colocación (acompañada de pinchazo y 3 descabellos). Ya les buscaremos la foto.

Y cuidado porque a última hora salió 'Flautista', el único que dio la talla en el caballo y que recibió duro por su osadía. Vimos los dos mejores pares de la feria y de muchas ferias a cargo del que queremos creer que era el hermano de Pérez Mota: SENSACIONALES los dos, con el tal 'Flautista' echándole la cara al pecho. Pocas veces nos hemos puesto en pie para aplaudir y esta ha sido una de ellas.

En la muleta quizás necesitaba un severo castigo al principio para ponerlo en su sitio. Mota no lo hizo pero se cruzó y enseñó el muslo cosa que casi le vale un disgusto porque el toro desarrolló gran sentido y se puso muy violento. La faena se siguió con mucho interés porque se mascaba la tragedia.

Tuvo más peligro este 'Flautista' que toda la corrida de Saltillo. Al final, dos pinchazos hondos y rinconera con degüello que puso fin a la pesadilla que pasó Mota pero siempre, eso sí, intentando hacer las cosas bien, algo que, en los tiempos que corren, le agradecemos profundamente.

¿Entienden mejor el título de nuestra entrada ahora? Bonitas láminas, toros con cuajo y con romana pero después...poca cosa como hemos intentado contarles. Tarjeta amarilla para Castaño por lo dicho del primer tercio y seguimos con ganas de ver a un torero como Pérez Mota que se esfuerza por cumplir con su oficio como Dios manda ¡Qué pocos hay de esos hoy en día!

Saludos cordiales desde Tafalla. Rafa.



domingo, 16 de agosto de 2015

FERIA DE TAFALLA, 2015: SALTILLO

LOS SALTILLOS NO SE COMÍAN A NADIE

Los Saltillos en los corrales de Tafalla

Sólo se comían a los toreros malos. Es verdad que uno mató un caballo y otro casi se va vivo al corral pero no se engañen. Salieron muy toreables, ninguno pegajoso, ninguno con auténtico poder. Pero es que delante tuvieron a unos diestros que apenas suman 7 corridas entre los tres.

Corrida bien presentada, con tercero y quinto de gran trapío. Fueron masacrados en varas por la psicosis que causaba el hierro pero si los diestros llegan a pensar un poco, dosificando el castigo hubiesen cortado orejas sin problemas. Y, la verdad, el aficionado que esperaba ese picante y esa casta de los de Saltillo quedó bastante decepcionado, nosotros, los primeros.

IVÁN VICENTE. Se desentendió de la suerte de varas y sus dos toros se saldaron con cuatro varas asesinas, de las cuales dos traseras y una en el lomo.

Intentó hacernos ver que su primero era peligroso pero no nos engañó. Lo que pasó fue que a base de mantazos el toro se hizo el amo mientras se preguntaba 'pero ¿qué te he hecho yo? ¿Por qué no me quieres torear?'. Casi entera trasera saliéndose de la suerte. Mal.

Iván Vicente en Tafalla

Su segundo exhibió un precioso tranco en banderillas pero Vicente empezó medroso prodigando no menos de doce mantazos sin quedarse quieto mientras el toro volvía a preguntarle 'Pero ¿qué estás haciendo?' La suerte es que el toro era tan dulce que no le planteó ningún problema y, cuando el diestro se quiso dar cuenta, se había quedado sin gas. Muy mal.

DAMIÁN CASTAÑO. Estuvo infame, señores. Trajo unos picadores que fueron casi la deshonra de la profesión. Quizá somos muy duros pero es que es lo que pensaría al verlos un picador profesional.


Su primero era noble aunque iba al paso. Le sacó algún natural bueno pero, en seco, desistió, aún no sabemos por qué. Dio un sainete a la hora de matar (cuatro pinchazos bajos, un golletazo, casi media caída y ocho descabellos, ¿qué me dicen?).

Damián Castaño no estuvo fino con los aceros en su primero (peor en su segundo).

Su segundo se llamaba 'Ruidón', les suena ¿verdad? No corrió el encierro para no volver a juntarlo con sus hermanos con quienes se  pegaba. Castaño y su cuadrilla no quisieron ni verlo y todo se convirtió en una penosísima capea donde el toro se hizo el amo sin ser ningún asesino, ojo. Era simplemente un toro manso a secas. Cogió al caballo por el otro lado y le metió el pitón hasta dentro. Se lo llevaron y tuvo que ser sacrificado con una inyección en el patio.

Corrida de Saltillo: un caballo muerto y varios  tumbos y porrazos (un espejismo).

La presidencia colaboró en el desaguisado cambiando el segundo tercio con dos palos. Y Castaño tal como llegó al toro le pegó un espadazo con tan mal estilo que salió trompicado cayéndose en la cara sin consecuencias. 
 
Susto con Damián Castaño


Pero esa media no le hizo mella y luego lo que vino fue una tragicomedia más trágica que comedia por la pena que dio el diestro: seis pinchazos a paso de banderillas, otro en el brazuelo, casi entera atravesada y nueve descabellos en medio de una bronca monumental. Si llega a intentar faena, 'Ruidón' vuelve vivo a los corrales.
 
Sainete de Damián Castaño


Un amigo nuestro muy torista de Granada sostiene que el indulto está justificado en casos como éste: un toro que sin ser un asesino se queda mirando a todo el mundo diciendo 'señores, no pueden ustedes conmigo ¿no? Pues déjenme volver al corral'. Muchos aficionados aplaudieron al toro en el arrastre para fastidiar al matador. Un matador que, insistimos, llegó a dar pena y eso es lo peor que te puede suceder en cualquier profesión.

Cambio de tercio en Tafalla


 JAVIER ANTÓN. Su primero era un mansurrón que se lesionó en banderillas y quedó inválido. Lo toreó con finura y suavidad pero no tenía mérito por la citada invalidez (ojo porque era su primera corrida este año). Dio una vuelta de cara al paisanaje.
 
Murchante con Javier Antón, en Tafalla.

 Su segundo, un bonito cárdeno, calcetero, haldiblanco, lucero y listón se fue suelto del caballo, en el segundo encuentro hasta toriles.


Pero era noble a más no poder y tenía un poco de gas, nada del otro mundo porque, como decíamos, la corrida fue decepcionante en ese aspecto.

Javier Antón en Tafalla
 No anduvo reposado y parecía preocuparse por alguna mirada que le echaba el toro pero insistimos en que no tenía ninguna maldad. Como mató mal perdió una oreja que los paisanos iban a concederle de manera unánime.
 
Este caballo se cayó por su cuenta al entrar en el ruedo
 

Pues ya han visto: decepción en la parroquia torista al ver unos saltillos tan pastueños y al ver también, una tarde más, el desprecio por la suerte de varas. Pero avisamos a las figuras de que se pueden apuntar a matar estos toros sin problemas porque si no llega a ser por el pelaje y por el hierro cualquiera hubiese dicho que eran unos Domecq y de los más asequibles.

Saludos cordiales desde Tafalla. 
Rafa.

Fotos y comentarios de Tauro

sábado, 15 de agosto de 2015

FERIA DE TAFALLA, 2015: DOLORES AGUIRRE

¡CUATRO OREJAS Y UNA SALIDA A HOMBROS!

De Alberto Aguilar. Los dos primeros toros, mansos y descastados, hacían presagiar otra pesadilla como en Céret pero los otros cuatro mostraron fijeza en la muleta y empujaron las cabalgaduras a base de bien.

La desigual corrida de Aguirre tras correr el encierro por la mañana

Confiábamos en que los diestros luciesen los toros en el caballo pero nada de eso, siguen yendo a lo suyo, o sea, al monopuyazo criminal y, a ser posible, trasero. Eso sí, por primera vez se picó a contraquerencia en Tafalla.

Destacó el 41 Caracorta, con dos buenas varas metiendo los riñones y recibiendo un castigo más que asesino. En la muleta había que ganarle la partida y Aguilar estuvo a punto de perderla por rematar los primeros pases por alto. Cuando le bajó la mano el toro fue cediendo al sentirse dominado. Aún así, al final de la faena iba con la cabeza por las nubes pidiendo más pelea. 

AGUILAR. Muy bien dispuesto toda la tarde, sin importarle el viento que por momentos era muy molesto. A su primero lo toreó correctamente y sin sus gritos habituales. En un molinete que no venía a cuento el toro lo arrolló y casi le da un disgusto. Media trasera que el toro mismo se hundió hasta casi entera y oreja que no discutiremos.

Su subalterno David Olivares machacó a gusto este toro contra el burladero. Mostró tanta desfachatez como luego, en el segundo, excelente disposición en dos pares de banderillas.

El segundo de Aguilar, gran beneficiado en el sorteo, fue el citado Caracorta. Le arrancó pases de mérito y la batalla quedó en tablas, lo cual es meritorio porque muchos la hubiesen perdido. Mató de tendida desprendida y le dieron dos orejas, la segunda sobraba.

El primero derribó con estrépito




MARCO. Estuvo bravísimo porque el toro lo cogió dos veces. La primera sin consecuencias al principio de la faena y la segunda al final corneándolo en el muslo derecho. Se levantó manando sangre y se fue a matar al toro cojeando visiblemente. Un gesto de Torero con mayúsculas. A duras penas acabó con él y no dejó que lo llevasen en volandas sino que salió por su propio pie. Insistimos: Bravo por Marco. No pudo salir a matar su segundo.

ENCABO. Su primero no valía un duro, no tuvo nada que hacer. Eso sí, se desentendió de la suerte de varas en los tres toros que mató cuando en Céret le vimos preocuparse cuidadosamente de hacer las cosas bien. En Francia sí y en España, no, no lo entendemos.

A su segundo le perpetró un monopuyazo vergonzoso que el toro tomó de bravo metiendo los riñones. Había que confiarse y dar aire al toro. Hizo lo segundo pero no lo primero, quizás por el molesto viento. 


Ojo porque arrancó algún natural de muy buen gusto pero culminó con un desplante ridículo tirando la muleta. En Francia lo hubieran silbado por hacer eso. Tenía la oreja en la mano pero se tiró a matar sin afición, como quien va a la oficina el lunes. Así, dio un pequeño sainete y perdió el trofeo que tenía ganado y habría acompañado a hombros a Aguilar.

En el que era de Marco sí cortó una oreja al estar aseado con un chorreado en morcillo al que su picador le pegó dos puyazos en el lomo que hacían daño sólo de verlos desde el tendido.

El toro tenía fijeza pero no la codicia de Caracorta. Encabo mató de media en su sitio y dos descabellos y cortó una oreja un poco barata.

Corrida muy interesante. Fíjense en que si Encabo pone más interés hubiesen salido dos toreros a hombros. Y si a Caracorta Aguilar lo luce en el caballo y le dosifica el castigo, podría haber sido un toro de vuelta al ruedo.

Y encima vimos un gesto de Torero de verdad en don Francisco Marco. No hay queja en la primera de la Feria de Tafalla, 2015. 

Saludos cordiales desde Tafalla. 
Rafa y Tauro.