lunes, 18 de julio de 2016

CÉRET DE TOROS, 2016 (2): NOVILLADA DE VINHAS

MÁS SANTACOLOMAS COMERCIALES

¡Qué decepción! Novillos modernos, manseando en el caballo y sin problemas en la muleta. Lo único destacable es que fueron duros para morir.

Los novilleros estuvieron muy por debajo. Por cierto, hasta siete veces tiraron o perdieron la muleta a la hora de matar. Es la moda.



Estos son los novillos:








VALENCIA.  El colombiano torea sin naturalidad,  copiando a nuestras figuras con contorsiones forzadas, pero es lo que se lleva ahora, al público le gusta pero a nosotros, no. Su primero era zancudo y degollado y fue noble pero yendo con la cara a media altura. Lo mató de pescuecera con degüello. 



Fue el único que puso en apuros al picador como vieron en la foto de inicio pero se trató de un espejismo porque la novillada suspendió en varas inapelablemente. Fueron diecisiete veces al peto sin demostrar nada.

Su segundo fue totalmente moderno, repitiendo si no le quitabas la muleta de la cara. Tiraba a tablas como los toros comerciales y murió en toriles. Valencia anduvo al hilo del pitón pero mató mal. Nada destacable.



ROBLES.  El primero,  llamado 'Cubanero', se le fue vivo. A pesar de mansear en varas fue ovacionado. En la muleta empezó embistiendo de dulce pero entre que Robles no se arrimó y que le pegó unos mantazos con la izquierda de cárcel taurina, el novillo se enfadó y se puso gazapón. Además le pegó una voltereta al agacharse por una banderilla. Vean que el novillo iba boyante:



Y para matar, se perfila demasiado lejos y dio un sainete: media contraria y baja, dos medias arriba perdiendo la muleta, pinchazo, contraria enhebrada y los tres avisos (bien es verdad que la presidencia debió haber sido benevolente descontando el tiempo que fue atendido en la barrera).



No entendimos los aplausos al novillo cuando volvía al corral. Su segundo era un toro. Y con él vimos lo mejor de la feria, la lidia de Fernando Casanova y dos pares memorables de un subalterno al que lamentablemente no pudimos identificar. Son estos dos y abajo el mejor par de la feria:




Robles siguió sin arrimarse, insistió en demostrar que la izquierda no es lo suyo y pegó pases sin cuento mientras el toro mantenía la cara por las nubes. Rinconera con degüello y dureza del toro para morir.



CASTILLO.  Con el capote no se aclara (tres veces lo tiró de forma poco airosa).  Su primero saltó al callejón pero porque quería coger, no de manso:



Réhabi estuvo fatal,  incluso barrenando. Pero Castillo con la muleta anduvo muy digno, sin presentarla retrasada y dando el medio pecho. Pero el novillo se había hecho daño en el salto y renqueaba. 



Dio un sainete para cuadrar y luego un pinchazo y una pescuecera baja tirando la muleta.

El sexto también acusó un gran topetazo contra el burladero. Lidió bien Rafael González. Fue el único complicado por revoltoso. La faena se siguió con atención a pesar de los 32 grados y las 2 horas y 40 minutos de corrida. Castillo no hizo nada reseñable como no fuera tirar la muleta las tres veces que entró a matar. Y terminó con dos descabellos que igual eran los primeros que daba en su vida.



Ya ven, poca cosa. Insistimos en nuestra monumental decepción y les hacemos una pregunta: hagan el favor de pensar un momento y nos dicen una ganadería con sangre de Santa Coloma que hoy en día tenga interés porque demuestre picante y poder. A ver si nos ayudan porque no se nos ocurre ninguna.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.




CÉRET DE TOROS, 2016 (1): AURELIO HERNANDO

QUÉ VULGARES LOS TOROS...¡Y LOS TOREROS!

Sólo dos nos parecieron con hechuras de Veragua, el cuarto y el sobrero.  La conclusión sobre la famosa polémica la pueden leer aquí (en el pdf se van a la página 11).



La verdad es que curiosamente sólo esos dos salieron en tromba y sacaron astillas. Los demás accedían al ruedo como Peter Sellers entraba al guateque. Los seis titulares mostraron gran trapío. Vean el primero, único negro, un toro de Bilbao, de Madrid o de donde quieran ustedes:



Aquí los otros jaboneros, el último es el primer sobrero, con menos cara:






Y este es el segundo sobrero, de Zaballos:



La corrida tuvo una media de 561 kilos.

Mansos de solemnidad en varas. Fueron un total de dieciséis veces al peto pero en siete ocasiones se repucharon alevosamente o salieron huyendo directamente.




En la muleta,  excepto el único negro, que calamocheaba y se revolvía, los demás,  muy comerciales.

DIAZ. El público estaba con él ciegamente por el recuerdo de la tarde con Barrio. Como director de lidia, nefasto. Hasta tres veces perdió o tiró el capote y una vez tuvimos que recriminarle que estuviese dormido en un quite. 

A su primero intentó llevarlo con mano firme hasta que se le quedó debajo por agotamiento. 



Es el que mejor hace hoy en día el pase de la firma. 



Pinchó por matar a un manso en la suerte natural y encima se llevó un susto gordo por quedarse en la cara. Observen el instante previo a que fuera arrollado:



Tras una media baja y atravesada,  dio una vuelta bondadosa. 

Su segundo sí parecía de los malos de Domecq por comercial y tontaina. Estuvo perfilero, destoreando a gusto y echándose al toro afuera. Sorprende que se le aplaudiese. No les engañamos, observen (comparen su colocación con el otro pase de más arriba, fíjense en las zapatillas):



Pinchazo y estocada trasera y bajísima también aplaudida (?). El toro se tragó la muerte un buen rato. En tablas, eso sí.

FANDIÑO.  Sigue desangelado y sin sangre. Dio una media garbosa al inicio:



Iván García tiene bula y lo aplauden a rabiar con pares como este, a toro pasado:



El de Hernando iba largo por el izquierdo pero el vasco traía la faena del hotel y se lió a derechazos insulsos. Le pegó dos mantazos al natural intentando engañarnos pero no lo consiguió. Traserísima tendida tirando la muleta y descabello en toriles.




Al quinto, llamado 'Vinagre', lo devolvió el presidente por su cuenta. Como estábamos a dos metros, nos encaramos con él preguntando si lo devolvía por manso. Nos dijo "no, está cojo". Sólo él vio esa cojera a través de sus gafas ahumadas. Hizo un gran favor a Fandiño porque era este jabonero sucio astracanado, un manso huidizo, que barbeaba las tablas de salida. Podría haber sido un espectáculo si delante hubiera estado el Fandiño de hace cinco años. 



La cuestión es que salió el sobrero y el de Orduña estuvo mal con el capote, sin saberlo parar. El toro se puso a repetir muy noble y comercialmente pero Fandiño dio un recital de pegar pases sin ningún interés por su vulgaridad. Estocada contraria metiendo el brazo a capón y perdiendo nuevamente la muleta. Pero fíjense en que, por lo menos, Fandiño tiene la honradez de no tapar la cara del toro como hacen tantos tramposos:



PÉREZ MOTA.  Su primero se quería quitar el palo como si lo hubieran tentado. Tenía recorrido pero Mota se lo echaba afuera.



Como además se dejaba enganchar la muleta,  el toro se aburrió y se paró. Tendida en el lomo, metisaca abajo y entera atravesada 

Su segundo fue correctamente devuelto y salió ese saltillo de Zaballos, de los antiguos (recuerden lo explicado aquí). Era escurrido pero se tapaba por playero. 

Lo puso mal en el caballo y el primer tercio fue un sainete. El toro empujó con la cara alta haciendo una pelea olvidable.

Y creemos que Mota se equivocó: no llevó al toro a la raya sino que se enfrentó con él en el platillo, donde el de Zaballos era el amo. A punto estuvo varias veces de echarle mano. Mota demostró valor y buena disposición pero esa equivocación en los terrenos de la lidia pudo costarle cara. Vean la violencia en la embestida:



Pinchazo llevándose un varetazo y gran estocada. Le otorgamos sin dudar nuestro premio a la mejor estocada de la feria:



Oreja del cada vez más bondadoso público ceretano aunque no la discutiremos porque la estocada vale el premio. En todo lo alto y bien ejecutada:



Corrida, como ven, altamente decepcionante en conjunto. Y en el primer tercio, directamente penosa.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa. 




viernes, 15 de julio de 2016

CUADRIS DE PRIMERA PARA AZPEITIA, 2016

EN SU CONJUNTO, LA CORRIDA MÁS SERIA DEL AÑO

Al menos, en España. Es así porque se juntan cuatro variables casi imposibles de ver repetidas por estos pagos. A ver si están ustedes de acuerdo con nosotros.



En primer lugar, un empresario serio, que vela por el espectáculo y por hacer bien las cuentas. En segundo lugar, unos toreros que tienen nuestro respeto porque son de los que matan cualquier tipo de encaste: Paulita, Pérez Mota y Sergio Serrano. En tercer lugar, uno de los ganaderos más honrados de todos los tiempos. Y en cuarto lugar, last but not least, unos toros muy parejos de hechuras que entrarían perfectamente en cualquier plaza normal de primera. Miren este:



O este otro:



Ahí los va moviendo Gaspar igual que a los de Valencia que les mostrábamos hace dos entradas. Toda la corrida es negra suponemos que por deseo de la empresa. El año pasado quisieron que fuesen cárdenos todos los de Ana Romero, colorados los de Pedraza y todos negros los de Cuadri:



Por cierto, el mayoral saldrá pitando de Valencia el 24 porque tendrá que embarcar estos toros para Azpeitia. Se lidian el 31 de julio.



En ambas corridas se desencajonarán los toros para que los vea el público. Es una sana costumbre para el espectador que veremos también en Tafalla y que este año se ensayó en Madrid con los toros de Joselito Arroyo (véanlo aquí). Pero a los ganaderos no les acaba de gustar porque los toros pueden resabiarse o lesionarse (independientemente de que se líe una batalla campal como pueden ver al final de esta entrada).

El 19 es largo, acapachado y badanudo:



El 26, que veíamos antes, es negro mulato y bizco del izquierdo. Observen la mirada de Urcola, siempre inquietante:



Salvo error, es el tercer año que lidia Cuadri en Azpeitia, plaza que denominan el Céret español. El año pasado la corrida fue accidentada porque terminaron en la enfermería Paulita y Pérez Mota. El gaditano sufrió esta monumental voltereta al enterrar la espada:


FOTO: El diario vasco

Sergio Serrano tuvo que matar tres y acabó cortando las dos orejas al último. Se llamaba 'Zapato' y pesó 675 kilos. El diestro albaceteño mató más cuadris en una tarde que nuestras queridas figuras juntas en toda su trayectoria profesional ¿Se dan ustedes cuenta? Esta es su opinión sobre Azpeitia (la entrevista completa aquí):


"Son muy buenos organizadores y, como se demostró, trabajan para el aficionado. Claro, cuando se trabaja de ese modo, el éxito está asegurado a todos los niveles. Qué duda cabe que, de haber muchas comisiones como la citada y que organizaran las ferias, se vería mucha justicia impartida por esas plazas de Dios".

En la corrida irán tres cuatreños y tres cinqueños, así no habrá peleas (ya les decíamos que nadie del escalafón quiere ver cinqueños de Cuadri ni en pintura).



Con los cuatro mimbres que comentábamos al principio debería salir un buen espectáculo. Y como el empresario es serio y sabe hacer bien los números, seguro que le quedará el remanente correspondiente para el donativo a las Siervas de María.



A no ser que las monjas se hayan pasado al buenismo ridículo de hogaño como la Cruz Roja y Cáritas de Requena, que renunciaron a los beneficios de un festival taurino por estar en contra del maltrato animal.



Nos despedimos con un viejo conocido de todos ustedes:



No va a Azpeitia porque ya dijimos que son todos negros. Su nombre es 'Pulidor', aquel número 11 que se lesionó en un embarque el año pasado y que, si no vamos errados, se correrá en las calles de Canet d'En Berenguer, cerca de Sagunto, el próximo 5 de septiembre.

Estuvimos a un metro de sus pitones como pueden apreciar. Seguro que alguno de la 'Penya Taurina Un Dia Més' se pondrá aún más cerca y sin la protección del muro como en nuestro caso.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.