FIRMA INVITADA: IGNACIO MARTÍNEZ
Como no veremos ninguna corrida más de la mal llamada Feria del Toro, cedemos los trastos al amigo Ignacio que hará su comentario con total libertad desde nuestro modesto blog.
Hemos visto corridas juntos y coincidimos en lo esencial, fundamentalmente en estar ambos en los antípodas de los taurinos y de los críticos paniaguados. Conoce como muy pocos los entresijos de Pamplona porque el año que viene cumplirá 40 años ininterrumpidos de asistencia a la feria. Añadan a ello las temporadas que fue abonado de Las Ventas cuando vivía en Madrid, en los tiempos de El Lupas. Con él les dejamos.
LA CORRIDA DEL OROPEL Y LA BODA DE TAMARA
Nada más conocer los carteles de la Feria del Toro de 2023 y que Tamara se nos casaba el 8 de julio, estoy en un sinvivir. Desde el primer momento todo el mundo hablaba de la corrida del oropel y cuando salieron los abonos, todo quisqui quería las entradas del 11 y la reventa alcanzaba precios estratosféricos.
Ambos eventos tienen su público, no crean: el primero, los morantistas y el segundo, todos y todas las verduleras, chismosos y marujos que pueblan el orbe. Y además a ambos acontecimientos les une la necesidad de un oficiante: en nuestro caso José Antonio Morante de la Puebla y en el otro el Padre Ángel respectivamente. Además en ambos hay mucho “parné” por medio, y también asuntos de cornamentas, lo que los hace confluir en este tórrido principio de la canícula.
Yendo a lo estrictamente taurino -el otro evento lo tienen mejor desarrollado en el Hola y en las tertulias rosas- ayer en la Monumental pamplonesa se lidió un encierro de Núñez del Cuvillo.
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FOTO: Laguna |
Toretes blandos, colaboradores (¡alucinante tratándose de un presunto toro bravo!) sosainas, descastados, cómodos y sin emoción alguna... lo más parecido a un híbrido entre una colección de monjas de la caridad y "la tonta del bote".La duda sobre su potencial y presunta bravura persiste, ya que no hubo tercio de varas. Se les dio un monopuyazo (alevosamente trasero en todos los casos) y en una segunda entrada sólo lavar y marcar. Salían los pobrecicos toretes de su encuentro con la acorazada de picar pal tinte. Obviamente no era fácil embarcarlos en una segunda entrada para hacerles topar con el penco después de la amarga experiencia tenida.
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FOTO: Rubén Albarrán |
Así que de la cuestión de la bravura nos quedamos in albis... y por favor no hagan caso al tifus taurino cuando les digan aquello de que "fueron bravos en la muleta". Les toman miserablemente el pelo.
De entre el sexteto que salió por el portón de los sustos (por donde también salieron los escolares y esos sí que acojonaban) hubo uno, el sexto, que era una raspa, una sardina, un zapato o un ratón, como ustedes prefieran.
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FOTO: Laguna |
Era un novillote, sin culata y sin remate, que sólo se tapaba por la cara. Una pura indecencia, algo absolutamente impropio de lo que anuncian pomposamente como “la Feria del Toro”. Verdaderamente se ha llegado a un grado tal de desvergüenza que viendo ese ejemplar uno se pregunta: ¿dónde estaban los veterinarios?, ¿dormitando?
MORANTE. Vino vestido de añejo, montera a la antigua usanza de Pepe Hillo. A destacar, y aún lo paladeamos y lo tenemos en la retina, el inicio de la faena al primero y las cuatro verónicas y media al jabonero sucio que hizo cuarto y que coincidió con la merienda. Mató a su manera, con el corazón, ya que no estira la mano al cuadrar y dejó dos medias algo atravesadas. Se le aplaudió.
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FOTO: Rubén Albarrán |
TALAVANTE. Faena de aliño en el segundo toro y saludos desde el tercio. En el quinto hizo una faena de mérito, mató de estocada y los del palco le birlaron la oreja, ganada a ley y pedida mayoritariamente por el público. Incomprensibles los caprichos y la falta de criterio del palco. Se cabreó con razón, ya que sólo la estocada la mereció y se tuvo que conformar con una vuelta al ruedo.
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FOTO: Rubén Albarrán |
ROCA REY. Hizo su monofaena de siempre. Recibir en la boca de riego de rodillas y con pases cambiados y luego sus series de derechazos largos más otras de naturales regulares. Cuando el animalillo ya está preagónico comienza con los arrimones tremendistas que tanto gustan en esta plaza. Mató de estoconazo arriba en el tercero y el palco, tras fuerte petición, le otorgó dos orejas.
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FOTO: Laguna |
Con el zapato que hizo sexto, repitió el número circense (realmente es un domador más que un torero) y nos endilgó esa monofaena que ya conocemos desde que era novillero.La sardina se le moría y decidió llevársela a los terrenos de la solanera para evitar que se le tumbase y exprimirle las últimas gotas de vida. Nueva serie de arrimones tremendistas, un bajonazo en los sótanos y otra oreja para el mozo entre gritos de ¡Perú!, ¡Perú!
Igual ya tenemos recambio para el pirata Padilla.
Puerta grande y pelea de los capitalistas por sacarlo a hombros ¡Tenebroso! Cosicas de esta plaza tan singular como desacreditada taurinamente.
Y mañana más... más ganado comercial de granja y más figuritas de mazapán. Y así hasta la miurada... Feria del Toro, la llaman.
Con Tamara de viaje de luna de miel, ¡cachis y yo con estos pelos!
Antes que nada, agradecerle su colaboración en nuestro modesto blog.
ResponderEliminarAun a riesgo de recibir los mismos venablos que el palco, romperé una lanza antirreglamentaria a favor del asesor ya que entiendo que la negación de esa oreja a Talavante no fue cosa de la presidenta.
Doy crédito a lo que usted comenta de que la petición era mayoritaria y que el palco se equivocó. Una vez asumida la equivocación, ¿cuántas equivocaciones vemos cada semana en las plazas de toros siempre a favor del triunfalismo y del orejismo exasperante?, ¿cuántos azules inmerecidos?, ¿cuántos indultos de chichinabo?, ¿cuántas orejas y segundas orejas de regalo incluso en la plaza de Madrid?, ¿cuántos inválidos lidiados que deberían haber visto el verde? No acabaríamos.
Entonces los taurinos callan porque hay que dar rienda suelta al triunfalismo, que según ellos es lo que necesita la fiesta, como decía Perera. Pero en las rarísimas ocasiones en que la situación es al revés, como en este caso de Talavante en su segundo, llueven los denuestos contra el palco, en Pamplona contra el asesor.
Ese asesor de ayer es en nuestra opinión el aficionado más cabal de los que suben al desnortado placo pamplonés. Que pudo equivocarse, no lo negamos. Lo que pedimos es que cuando las equivocaciones sean concediendo premios fuera de lugar, haya las mismas amargas críticas que en los casos de cicatería.
Saludos.
Buenos días Rafa, y buenos también para el señor cronista. NO SE EQUIVOCO EL PALCO, ¿ Por que , como que no ?????? POR QUE NO HABIA TOROS. ¿¿¿¿¿ No había toros.?????? !!! NO !!!! . Habia 6 indecentes productos con bolitas, llamesé afeitados, de una MACROGRANJA. ya esta bien de tanta txurriflaina de feria del toro, feria de la ternera. Y nuestro amigo Mikel, Rafa, salió encantado de la de escolar, yo no. Pero conforme pasan los días, claramente, me esta pareciendo la mejor corrida, sin discusión a demàs.
ResponderEliminarUn saludo.
Kaparra
Estoy de acuerdo con usted.
EliminarSi hablamos de toros, con casta mala ( mansos ) la mayoría ( salvo el de Del Álamo ), la única corrida habida ha sido la de Escolar.
Además se le arreó por los del castoreño de lo lindo. No como ayer, con los Bovillos, la Palmosilla, Cebada y FY… que sencillamente el primer tercio fue un simulacro.
Esto está absolutamente degenerado desde que el tifus Taurino se ha apoderado de la otrora Feria del Toro que inventó en los 50’s el Sr. San Martín.
Hoy “mandan” unos tipos torvos que han consagrado “la Feria de la Borrega” .
Y lo que te rondaré morena...
Saludos cordiales
Buenos días.
ResponderEliminarComo usted bien indica Rafael, a mi entender y desde la posición que ocupo en la plaza, en mi abono (barrera), la petición era mayoritaria.
Vaya por delante que como usted bien sabe a mí los trofeos en esta plaza y los premios finales que dan los del jurado me importan una higa. Está tan devaluado, que las orejas son de hojalata, pura bisutería … solo valen para la estadística. Mi planteamiento es otro.
El Palco de Pamplona lo ocupan concejales y el 7 de julio el Alcalde. No debería ser así, pero así está dispuesto reglamentariamente (Reglamento Sanz de 1992).
Si por el reglamento presiden, sencillamente cúmplanlo. Los reglamentos están para cumplirse, mientras estén vigentes, o para modificarse.
Se puede aducir que el municipio de turno desconoce el reglamento y está en manos de los asesores. Rotundamente no. Es el responsable último ya que está ahí “gracias al Reglamento” y como mínimo antes de subir al Palco debería leérselo y resolver sus dudas si las tuviere. Su misión es sencilla: hacer cumplir el Reglamento.
Obviamente puede consultar con los asesores que para eso están, tanto el taurino como el veterinario, y luego hacer caso, o no, a su consejo… pero no vale escurrir el bulto. El que maneja los pañuelos y la lidia es el presidente, salvo algún caso aislado que luego le referiré.
Lo que no es de recibo es la disparidad de criterios día si y día también e incluso en la misma corrida (ayer se niega una oreja a Talavante y se le da en el sexto a Roca con la sardina tras un bajonazo). Además los trofeos están reglamentariamente determinados y aún con sus lagunas (no se sabe como se “mide” una petición mayoritaria) no parece difícil aplicarlo.
La primera oreja es de “paganini”. Si es un clamor su petición, incluso estando en desacuerdo… hay que darla.
La segunda ya es harina de otro costal. Cito de memoria: la segunda oreja es potestad exclusiva del presidente, que deberá tener en cuenta, la petición del público, las condiciones de la res, la lidia en todos sus tercios, la faena de muleta y “fundamentalmente” la estocada. Aquí el criterio presidencial prevalece, y si te cuesta una bronca, pues no pasa nada por ser pitado por cumplir con tu deber.
Ayer se equivocaron con Talavante, pero no pasa nada. Errar es humano, perseverar en el error, diabolicum.
Mire: en cuarenta años en esta plaza yo he presenciado hasta cosas hilarantes. Ir el Alcalde (Alfredo Jaime) por detrás y sacarle el pañuelo de la segunda oreja al concejal que presidía (Sr. Igal, qepd). Traer un toro del desolladero para darle la vuelta al ruedo porque al Usia se le ocurrió sacar el azul cuando el toro se había arrastrado. No encontrar “en la cajica” el pañuelo verde y mantener un pobre tullido en el ruedo con una bronca descomunal hasta que vino un empleado y encontró el pañuelo verde.
En fin, a Noé le vamos a hablar de lluvias.
Saludos cordiales
Es correcto todo lo que usted dice pero no invalida mi planteamiento, que es el diferente rasero con que se miden las equivocaciones del palco cuando son triunfalistas a cuando no.
EliminarPero es que el reglamento se incumple cada tarde en cada plaza ya que plantea sin ir más lejos una serie de multas por situaciones inadecuadas en la lidia que no se denuncian nunca. Y eso que Navarra quizá sea el único sitio de España donde los forales alguna multa ponen.
Pero cuando voy por su tierra a ver toros siempre pregunto quién es el asesor porque en el 90% de los casos el presidente es un figurón del Ayuntamiento que no suele tener ni idea de toros.
Saludos
La peor feria en cuánto a presentación y juego del ganado. El único interés del Potra es chupar las comisiones y le importa un bledo el espectáculo, al igual que Salinas y Marco.
ResponderEliminarEn cuánto a presidencias y asesores, de vergüenza. Qué vamos a esperar después de las declaraciones de Salinas. Les amenazará con no volver y les quita su minuto de gloria de los SF. Ah! Y al palco hay que subir sobrio!!
Vaya... usted puede hablar con más libertad que yo y veo que también con mejor información...
EliminarSaludos
Oleeee exactamente igual opino yo
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