LAS CINCO TARDES DE RUIZ MIGUEL EN BILBAO QUE NO EXISTIERON

El maestro lo repite a menudo y ustedes lo encontrarán en decenas de sitios por internet si ponen eso en un buscador. En alguna entrevista dice que fue en 1974 y en otras que en 1978. No hay ninguna duda de que sí mató esta corrida del Conde de la Corte a la que cortó una oreja pero eso fue en 1973:

Hay entrevistas donde él asegura que triunfó con un victorino en 1974 al que cortó la oreja tras diez pinchazos. Esto es materialmente imposible porque ni se lidiaron victorinos en Bilbao ese año ni tampoco estuvo anunciado Cañaílla en aquella feria, vean:

La otra posibilidad es 1978 y entonces sí que estuvo anunciado con victorinos. Vamos a repasar las actuaciones de Ruiz Miguel a ver cuántas nos salen. 

La feria de Bilbao de ese año se presentó con estos carteles:

Empezó el sábado, 19 con una corrida de Atanasio que mataron El Viti, Paquirri y Roberto Domínguez. Muchos tenían la mosca detrás de la oreja al volver al norte aquel año. Recordemos la irrupción de la policía en el ruedo de Pamplona un mes antes y el atentado que habían sufrido los pablorromeros en los corrales de Vitoria semanas después (alguien se dedicó a moverlos incesantemente durante la noche y a dispararles con escopeta de perdigones, no se pudieron lidiar).

El domingo, 20 dos de rejones, que mató Álvaro Domecq por lesión de Moura, y seis de Pablo-Romero para Ortega Cano, El Regio y el bilbaíno Herrerita. Triunfó el cartagenero cortando dos orejas. Se las llevaron a la enfermería porque el toro lo empitonó tras recibir una entera sin puntilla.

El lunes, 21, primera aparición del gaditano. Toros de Torrestrella muy bien presentados para Teruel, Ruiz Miguel y Roberto Domínguez, que sustituía a Palomo. Dos orejas cortó el de La Isla al quinto tras una faena 'que resultó angustiosa de puro emocionante' (Zabala). Ésta es una imagen del trasteo premiado:

Vidal coincide en lo de 'angustiosa faena con la muleta tras el alboroto que había formado antes con el capote'. Vean la secuencia de una excelente media de Ruiz Miguel, hace crujir al toro:

El martes, 22 santacolomas de Buendía para Paquirri, Manzanares y Teruel. Corrida indigna de Bilbao a la que Paquirri cortó un par de orejitas. Éste era el titular de ABC:

Y esto lo que escribió Vidal:

'En la plaza donde dice la fama que sale el toro, sacaron ayer tres muñecos cardenitos sin la más mínima resistencia física y tres borreguitos más aparentes, casi todos ellos tocados de pitones, o eso parecía, y no pasó nada'.

El miércoles se lidiaron seis de Juan Mari, sospechosos de pitones como era tristemente habitual. De nuevo Ruiz Miguel, que sustituyó a Paula, El Viti y Robles. Se guardó un minuto de silencio por el joven muerto en el toro ensogado matinal (hubo además once heridos). Corrida sin historia por culpa del ganado. El gaditano cortó otra oreja a base de tesón. Vidal puso esto:

'Ruiz Miguel se metió materialmente entre las astas para acariciar el testuz. Tanto rato juntos, toro y torero se hicieron amiguetes. Y una vez pegada la hebra, más circulares. Ruiz Miguel puso la plaza al rojo vivo, pues siempre impresiona que un torero ande a gorrazos con los mansos'

Tuvo la mala suerte de que mientras daba la vuelta al ruedo, una manzana lanzada desde lo alto no se sabe con qué intención le alcanzó en la frente y lo noqueó. El diestro tuvo que ser atendido durante un rato tendido en el suelo. Se levantó quitando hierro al incidente.

El jueves, 23 tocaban los victorinos para Ruiz Miguel, Frascuelo y Manolo Cortés, que sustituía al herido Ortega Cano. Primer día de lleno con toros correosos y coriáceos que vendieron cara su vida. Hubo 'guerra en la arena que ganaron los toros y perdieron los toreros' (Zabala). Nuestro protagonista sudó tinta como pocas veces frente a su gazapón primero. Escucho pitos en ése y ovación en su segundo, un albaserrada de 602 kilos. 

En el caballo les dieron a duro por peseta. A veces se habla de picadores de aquellos años cuyo recuerdo se agiganta positivamente conforme pasan los años. No sabemos qué pensarán los aficionados más jóvenes que no llegaron a verlos pero lo cierto es que pegaban igual de trasero que los de ahora y eran catedráticos en tapar la salida. Nada nuevo bajo el sol como denunciaba Vidal en El País:

'Es verdad que los victorinos los lidiaron mal. Al toro de casta no se le puede ir equivocando la lidia una vez y otra, en un tercio y en otro. Por ejemplo, a todos los picaron desastrosamente. No eran bravos pero tampoco se rajaban escandalosamente en el castigo y la mayoría tomó recargando el primer puyazo. No se justificaba, por tanto, que exigieran la carioca o que les acorralaran entre el caballo y las tablas'

El viernes, 25 murubes de Urquijo para Paquirri, Ruiz Miguel, que sustituía a Dámaso, y El Capea. Pedro Moya tuvo la mala suerte de que se le clavara una banderilla en la planta del pie y fue operado en la enfermería de la plaza causando baja para la corrida siguiente. Cañaílla cortó una oreja pero dejó claras sus carencias cuando tuvo delante un par de toros pastueños de Murube. Zabala lo vio así:

El vicio de arquearse al torear lo tenía el maestro, no lo vamos a tapar. Lo pueden comprobar en este vídeo a partir del 1'05''. Ese arqueo suyo quedaba enmascarado mientras planteaba batalla a un marrajo pero cuando tenía delante un animal muy noble, cantaba la gallina:

El sábado, 26 toros de Osborne para Manzanares, Nimeño y Manolo Cortés, que sustituía a El Capea.

El domingo, 27, fin de fiesta con los miuras. Se anunciaron Vidrié por delante y Dámaso, Julio Robles y Roberto Domínguez. Dos se mataron en una pelea en el corral. Una corrida de Miura por aquellos años costaba unos dos millones de pesetas. Las figuras cobraban quince por una actuación en Madrid o Bilbao.

Si hacen ustedes las cuentas, nos salen cuatro corridas toreadas por Ruiz Miguel en Bilbao en aquella feria de 1978. Creemos que la memoria le traiciona ya que le hemos escuchado decir que mató también la de Buendía, ahí puede estar su error. Si realmente la hubiera matado, sí serían cinco consecutivas pero ya ven que la cosa quedó en cuatro y no seguidas. Su actuación en la feria se pone de manifiesto en este cuadro donde se ven esas cuatro corridas y sus cuatro orejas:

Observarán la curiosidad de que Ortega Cano y El Capea tienen más orejas que vueltas al ruedo ya que terminaron en la enfermería como queda dicho. Pero ¿ha habido algún maestro que haya matado cinco corridas seguidas en Bilbao? Sí, uno.

Fue don Juan Belmonte, tres meses después de la tragedia de Talavera. Aquí las tienen:

1ª: Domingo, 22. Toros de Gamero Cívico para El Gallo, Belmonte y Valencia. Oreja en su primero y vuelta en su segundo.

2ª: Lunes, 23. Toros de Miura para Torquito, Belmonte y Saleri. Dos orejas en su primero y ovación en su segundo, que fue un sobrero de Villagodio por invalidez del titular. Esos trofeos al miura los cortó por meter en el canasto un manso. Mató de dos pinchazos arriba y estocada sin puntilla.

3ª: Martes, 24. Ocho toros de Carmen de Federico para El Gallo, Belmonte, Fortuna y Dominguín. Silencio y vuelta. Quien se llevó el gato al agua fue Fortuna cortando una oreja. El trianero pegó una media verónica que gustó mucho a Clarito:

4ª: Miércoles, 25. Dos de Villagodio y seis de Matías Sánchez (antiguo Trespalacios) para El Gallo, Freg, Belmonte y Fortuna. El trianero pasó de puntillas. Cortaron sendas orejas El Gallo y Fortuna. Lo mejor fueron los pares de Maera y Magritas.

5ª: Jueves, 26. Toros que resultaron excelentes de Pablo-Romero para  Freg, Belmonte y Fortuna (Torquito III mató aparte un sobrero de Carmen de Federico). Silencio en el primero y oreja en el segundo tras una faena que brindó al hijo de José de Amézola con estas palabras:

'Te brindo la muerte de este toro y, si estoy bien, el único regalo que quiero es que tu padre me ceda la plaza de Madrid para celebrar la corrida a beneficio de la viuda e hijos del pobre Malla'

El padre era José de Amézola y Aspizúa, alavés residente en Bilbao, deportista, político y empresario teatral y taurino. Moriría dos años después. Consiguió la primera medalla olímpica de la historia para España en la modalidad de cesta punta en los Juegos de París de 1900. El hijo devolvió la montera a Cataclismo diciéndole:

'Puedes contar con la plaza para el día que tú quieras'

Sobre el vallecano Malla, aquí tienen abundante información. Lo había matado un toro en Francia mes y medio antes. Le pegó una cornada en el corazón, como la de El Yiyo, pero al hacer un pase de rodillas. Llevaba trece cornadas en cinco años, tres de ellas muy graves. Ésta fue la decimocuarta y definitiva. El motivo del brindis es que se quiso celebrar el homenaje en julio pero pasaban las semanas y no había acuerdo con la empresa.

Agustín García, 'Malla', en Barcelona

Se anunció para mediados de septiembre pero al final se arregló para octubre de ese año de 1920 con toros de Pérez de la Concha para Freg, Belmonte, Sánchez Mejías y Limeño, que era quien le acompañaba el día de la cogida mortal. Pues a última hora también se suspendió.

Un año después de su muerte, la viuda Esperanza todavía estaba esperando el homenaje y nosotros hemos perdido la pista de si llegó a hacerse algún día a pesar del susodicho brindis.

Los del partido gallináceo estarán pensando en si Gallito igualó el récord de su rival en Bilbao, ¿no? Pues sí... pero no porque en 1916 había toreado también cinco corridas aunque no consecutivas como el trianero. Aquí las tienen:

1ª: Domingo, 20. Toros de Santa Coloma para Pastor, Celita y Joselito. Vuelta y pitos.

2ª: Lunes, 21. Toros de Gamero para Pastor, Cocherito, Gaona y joselito. Tomaron cuarenta y tres varas. Pastor les mojó la oreja cortando dos orejas. Gallito se quedó en aplausos. El Imparcial tituló '¡Viva Madrid!'

3ª: Martes, 22. Toros de Pablo-Romero para Cocherito, Gaona y Joselito. Maravilla salvó la plúmbea corrida en el sexto cortando las dos orejas con invasión del ruedo para acompañarlo en una clamorosa vuelta.

4ª: Miércoles, 23.Toros de Miura para Pastor, Cocherito y José. Al acabar el paseíllo, el público obligó a saludar a Pastor por su faena del lunes pero no a Gallito por la del día anterior. El de Gelves se sacó la espina y cortó tres orejas. Las dos fueron de Estanquero, el sexto, que había matado tres caballos. 

5ª: Domingo, 27. Como ven, cuatro días después. Toros de Murube para Cochero, Celita y Joselito, más un sobrero para Sánchez Mejías. División y dos orejas en el sexto. Al principio de ese último saltó un espontáneo y al final, José 'se cansó de dar vueltas al ruedo'. Por cierto, aquel día y a la misma hora morían dos novilleros en sendos festejos: el valenciano Antonio Carpio en Astorga y el asturiano Andrés Gallego en La Coruña.

Bueno, ya les hemos mareado bastante refrescando la memoria al bueno de Ruiz Miguel. Nos queda pendiente aclarar qué pasó con ese albaserrada con el cual el maestro dice que triunfó en 1974 cuando Victorino debutó en Vistalegre en 1975. Pero lo dejamos para otra entrada ya que ésta va quedando demasiado larga y corremos el riesgo de que nadie haya llegado hasta aquí.

Homenaje  al maestro en Bilbao

Queda claro que Ruiz Miguel mató cuatro corridas, Gallito cinco y Belmonte otras cinco pero siendo el único que las toreó consecutivamente. Demos al César lo que es del César y a Belmonte lo suyo.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.