sábado, 28 de julio de 2018

FERIA DE JULIO, 2018: CUADRI, NOS PEGARON EL CAMBIAZO

Bajábamos ilusionados a Valencia para ver si la ganadería remontaba el vuelo. Algún día será ¿no? Pues nuestro gozo, en un pozo. ¿Dónde estaban esos cuadris que en la desencajonada embestían a todo lo que se movía? Los mismos toros que corrían como flechas, remataban en los burladeros y se peleaban dejándose el alma se transformaron dos días después en animales no parados sino directamente aplomados, sin raza, que se repuchaban y no querían pelea. 



Pulsen aquí y vayan especialmente al 5'30'' para ver el número que montaron el 35 contra el 49.



Si alguien los califica de encastados aunque mansos nos lo tendrá que explicar muy bien para que lo entendamos. Seguro que lo que quiere es enmascarar la realidad por intereses inconfesables. Ni los más cuadriadictos, entre quienes nos encontramos, podemos tapar lo que fue la corrida. Hubo veces en que los toreros recorrieron más de trescientos grados alrededor de los toros intentando forzar la embestida sin éxito. Eso, para nosotros, es símbolo máximo de descastamiento. Lo único positivo fue su dureza al morir.

Los toros se quedaban ante los caballos como mirando una pecera. Pero es que no iban ni a la primera vara, siempre tardos y distraídos cuando no reculando como el de las banderillas negras. Ahí lo tienen tirando para atrás ¡antes de probar la puya!



Había que echarles el caballo encima para que reaccionaran...y eso a los mismos toros, insistimos, que en la desencajonada corrían contra los cabestros de una punta a otra. Por cierto, los picadores, fatal todos. Es que incluso cuando echan el caballo encima clavan trasero o, como el injustamente premiado en Céret Santi Pérez, en el lomo.

No faltó quien en el tendido vio una mano negra, hasta tal punto era increíble el comportamiento de los cuadris. Hombre, cosas raras en los corrales de Valencia ya se ha visto alguna. Hace muchos años fueron sorprendidos en plena noche el padre de un figurón junto a su veedor ambos armados con serrucho y escofina. Como pista les diremos que el padre sigue con buena salud, el hijo sigue de figurón y el veedor es un ex torero que ha sido después apoderado (también sigue vivo, que conste, el comisario de policía que vivió el suceso y a través del cual nos ha llegado la historia).

La corrida la salvó el sobrero 'Quejica', de 570 kilos y condenado muy correctamente por el presidente a banderillas negras. Gran parte del público estaba de pie chillando que cambiasen al toro cuando no iba al caballo (claro, ven lo de Gómez en Madrid, y se creen que si sale un manso tiene que ir al corral). Raul Martí estuvo sensacional con las negras cuadrando en la cara con gran valor:



El toro acusó el castigo y de qué manera. Se rebrincó y empezó a embestir como loco. Varea tenía una papeleta que solventó señorialmente. Hacía mucho tiempo que no aplaudíamos tanto a un torero que, atención, no creemos que este año lleve más de tres paseíllos.

¡Qué mal rato debió de pasar el bueno de Fernando Cuadri durante la corrida y después! Si hubo algo raro en los corrales que ni sabemos ni nos atrevemos a asegurar, sería un consuelo para él. Si no hubo nada y la corrida salió así de nefasta, es que continúa la travesía del desierto que se inició tras la muerte de 'Trastero' en esta misma plaza. Aquello fue en julio de 2014 y por mucho que los pelotas de Cuadri se quieran engañar, el ingeniero sabe que la cosa no levanta cabeza desde entonces. Esa travesía del desierto se está haciendo demasiado larga sin que nadie sepa por qué.

Hubo media entrada:



Como a don Fernando le debió de mirar un tuerto, sólo faltaba a esta corrida una cornada y la recibió Rafaelillo de su segundo. A perro flaco...

RAFAELILLO. Su primero estaba justo de fuerza, queremos creer que por eso lo lanceó tirando líneas en vez de ir saliendo a los medios para quebrantarlo. Fue picado horriblemente por Esquivel, con carioca incluida. El toro derribó pero porque se trastabilló el caballo. Ninguno de los cuadris demostró poder excepto el bronco sobrero en la muleta:


FOTO:  Alberto de Jesús

El toro exhibió un buen tranco en banderillas y cuando esperábamos una fotocopia de 'Remiendo', va el murciano y, tras un par de adecuados muletazos por bajo como éste,


FOTO: Mateo

le pega cuatro o cinco mantazos por arriba. Volvió loco al toro provocando que levantara la cabeza por encima de la andanada. ¿No ha dicho mil veces el ganadero que 'estos toros no quieren nada por arriba'? El animal se puso tonto y olvidó su prometedor segundo tercio. Para nosotros, craso error del maestro porque fue él quien lo resabió. En cambio, un vecino de tendido, al ver el sentido que desarrollaba el tal 'Junquero', decía al final 'pues mos ha enganyat el toro'. 

Se retiró a chiqueros y allí murió tras pinchazo arriba y estocada un pelín contraria con degüello.

Su segundo, el que lo corneó, fue este 'Alpargatero' que les mostrábamos en invierno:



Lo recibió con dos largas y por el pitón derecho lo apretó mucho hacia adentro:


FOTO:  Alberto de Jesús

Si Esquivel picó mal, Collado, peor, porque tirándole el caballo encima para forzar su acometida, le clavó por dos veces en el lomo ¡qué desastre! Luego, excelente par de Mora, con el de Cuadri poniéndole los pitones en el pecho.

Con buen criterio, Rafaelillo se echó la muleta a la izquierda y porfió pegando pases mientras el toro embestía a arreones y de pronto se paraba. El diestro iba cruzándose para forzar la embestida y viendo que el toro estaba aplomado y con la lengua afuera, se confió y lo enganchó. Aquí es donde se está cruzando con el toro aparentemente entregado:



Pero en seco se arranca:



Y ahí ven cómo hace carne en el gemelo:



Lo levanta por los aires dándole lo que no llamaremos un navajazo porque el doctor Ramón Vila, que en paz descanse, nos enmendaría la plana. Él decía que un navajazo siempre es mucho mejor porque sólo tiene una trayectoria. La cornada que se llevó Rafaelillo tenía dos para un total de 20 cms.:


FOTO:  Alberto de Jesús

Nosotros no sabíamos la gravedad del percance y dos horas después de la corrida nos encontramos por la calle con su padre. El diálogo fue éste, empezamos preguntando nosotros:

- ¿Cómo está Rafael? ¿Al final ha sido cornada o sólo un puntazo?
- Cornada, cornada, le han operado y ha estado una hora y veinte ahí dentro.
- ¿Qué ha pasado? Se ha confiado ¿verdad?
- Sí, él estaba muy valiente...pero menos mal que no le ha cogido después cuando le ha pasado cerca del cuello. Bueno, es fuerte, se recuperará pronto.

El padre se refería a este momento:


FOTO:  Alberto de Jesús

Tienen la secuencia aquí a partir del 2'52''. Salió Moral a matar el toro y nos deleitó con una estocada sensacional, de las mejores que le hemos visto: arrancando con lentitud, dejándose ver, sin tapar la cara del toro, cruzando y clavando una entera arriba, ¡excelente!

PEPE MORAL. Debutaba en Valencia. Su primero fue este 49 que también montó el número en la desencajonada:



Nada en el caballo y reculando en la muleta. Moral le robó los pases que pudo entre la desesperación general. Menos mal que Sierra y Manuel Pérez habían firmado un buen segundo tercio.


FOTO:  Alberto de Jesús

Su segundo era de octubre de 2013. Echó la cara a las nubes en el caballo y luego se repuchaba queriendo quitarse la vara. 


FOTO: Alberto de Jesús

En banderillas fue imposible clavar porque no humillaba ni por equivocación. Tenía un componente de incertidumbre que a esas alturas de la corrida nos hacía presagiar algo...pero se paró nada más empezar la faena. Nuevo palo para Moral que no pudo sacar agua de este pozo seco.



Esta vez dio un sainete con la espada pero le reconoceremos sus ganas de insistir en entrar a matar cuando la mayoría hubieran tirado de descabello. No obstante, aquí tienen la letanía porque no lo taparemos a pesar de ser un buen matador: pinchazo sin cruzar, estocada habilidosa contraria y atravesada, pinchazo hondo saliéndose de la suerte, medio golletazo y cinco descabellos.

VAREA. Ya nos confirmará alguno de ustedes si era su segunda o su tercera corrida este año. Sí que era la primera tarde en Valencia. Su primero fue este 29, el más feo de la tarde:



Fue el único que empujó de bravo aunque sólo en el primer puyazo y a pesar de las varas infames que le pegó el premiado Santiago Pérez (en Céret, lo del regatón al de Fraile tapó que picó en el lomo casi siempre, como en Valencia). El toro se rompió el pitón por la cepa contra el peto (?) y se corrió el turno:


FOTO:  Alberto de Jesús

Apareció 'Lamento' e hizo honor a su nombre saliendo lamentablemente suelto de las dos entradas tras cabecear a gusto y cobrar en el lomo porque seguía picando Pérez. En banderillas topaba y en la muleta iba rebrincado y probaba. Ya me explicarán ustedes qué podía hacer Varea. Por supuesto que también se paraba como sus hermanos. Le tapó la cara con alevosía para dejar un pinchazo y media contraria, caída y atravesada junto a seis descabellos.

Y salió el sexto, un 'Quejica' después del 'Lamento'. Antes de seguir digamos que para nosotros fue una sorpresa que Cuadri llevase dos sobreros.

Lo lancea en tablas sin sacarlo afuera y el toro lo apura obligándole casi a tomar el olivo. En varas, 'Puchano' le echaba el caballo encima pero el toro era de Guisando. Bueno, no, porque los de Guisando se están quietos y éste retrocedía aun sin haber notado el hierro. Protestas del personal, que no venían a cuento, y el presidente, en su sitio, sacó el pañuelo rojo:



Durante nuestro paseo nocturno vimos que el ayuntamiento de Valencia se hizo eco del suceso iluminándolo de esta guisa:



Raul Martí estuvo en Torero, con mayúscula. Puso dos pares extraordinarios a un toro que nadie sabía por dónde iba a salir. Ahí lo tienen demostrando su oficio y su valentía:


FOTO: Mateo

Siempre se ha dicho que las viudas no sirven porque resabian al toro pero en este caso sí que sirvieron porque el animal acusó el castigo, se revolvió y empezó a embestir lo que no habían embestido sus cinco hermanos juntos. Eso sí, áspero y bronco hasta decir basta.

¿Qué hizo Varea? Pues estuvo fenomenal, señores. Castigó al toro por abajo como se terciaba (aunque menos de lo que merecía). Luego se puso a arrancarle pases en medio de una gran emoción por la fiereza del animal.

Estuvo valiente y envalentonado. Fue una pelea en toda regla que no hemos querido ver en vídeo para salvaguardar el buen recuerdo que nos dejó en la plaza (la hemos localizado para ustedes aquí). Por supuesto que no entraremos a discutir la posición de las piernas y otras zarandajas. Con lo que tenía delante, nos da igual. Ya sabemos que habrá algunos aficionados que prefieran las posturitas relamidas y retorcidas ante el choto bobo. A nosotros eso nos aburre hasta la indignación.

Aquí, con Varea, hubo riesgo, hubo emoción y hubo un torero valiente que se la jugó ante un toro al que la mayoría de diestros habrían pasaportado de un bajonazo haciendo gestos de impotencia de cara a la galería. 


FOTO:  Alberto de Jesús

Destacaremos el ridículo de la banda tocando música durante esta pelea. A nuestro entender, el diestro se equivocó entrando dos veces en la suerte natural. A un manso reservón y bronco como éste hay que matarlo en la contraria ¿no creen? En el primer intento, el toro hizo lógicamente por él y dejó medio metisaca bajo. En el segundo, lo cazó con una entera caída que hizo rodar a 'Quejica' patas arriba.

Hacía tiempo que no aplaudíamos tanto a un torero. Hubo insuficiente petición y la cosa quedó en una vuelta de más peso que muchas de las salidas a hombros que llevamos esta temporada con terneras o babosas.

Al ganadero este toro no sólo no le tapa la corrida sino que se lleva el baldón de las banderillas negras. A nosotros, por el contrario, nos hizo vivir el mejor momento del año y recordaremos esta corrida por la casta que le echó no el ganado sino el diestro de Almassora.

Cuadri tiene ahora el compromiso de Azpeitia. De momento, en el desencajonamiento, el comportamiento de los toros no ha tenido nada que ver con el de Valencia (pulsen aquí). Si en el ruedo la situación no remonta, a seguir la travesía del desierto a que nos referíamos antes.

¿Qué se puede hacer en "Comeúñas"? Pues lo que respondía el jefe de la banda de forajidos en el western 'Cielo Amarillo' cuando huyen al desierto tras atracar un banco. Uno de los malhechores le dice que deben entregarse porque si no, morirán todos en ese desierto que tiene más de setenta millas de largo. Gregory Peck le responde:

"Un desierto es un espacio y un espacio se cruza"

Pues eso, don Fernando, a sobreponerse y a seguir trabajando porque somos muchos los que le acompañamos en la travesía deseando que no tire la toalla.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.


Vimos en los corrales la corrida de Núñez del Cuvillo y nos recordó
las de Tarragona en verano para los turistas, con eso está dicho todo.

martes, 24 de julio de 2018

CÉRET DE TOROS, 2018 (y 4): CONCLUSIONES Y PREMIOS

Señores, ¿a qué vamos a Céret? Fundamentalmente a ver la parte de la corrida que se nos roba cada tarde en España, el primer tercio. Para realizar bien ese primer tercio, son imprescindibles tres circunstancias: colocar el toro un mínimo de tres veces y cada vez más largo, que los caballos no sean 'la acorazada de picar' y que los picadores acierten en el morrillo y no trasero o en el lomo.


FOTO: Christophe Moratello (el sombrero del alguacilillo es de Casa Yustas  de Madrid)

En España no tenemos ninguna de esas tres cosas en ninguna plaza: ponen el toro debajo del peto para el monopuyazo, los caballos son monstruosos y los picadores insisten en picar trasero. Qué les vamos a decir si el cartel de Villaseca de la Sagra lo ilustran con este puyazo en el lomo (aunque la foto original sea de un buen amigo del blog, ese picador es un asesino):



Pues en Céret, sólo tenemos una de las tres, la colocación de los toros largos al caballo (aunque no de manera progresiva como debería ser). El resto, igual de penoso que en España: unos caballazos indignos de esta plaza, encima desobedientes, y unos picadores que no tienen ningún pudor en picar en el lomo. Gabino Réhabi, que era de los pocos que intentaba picar medio bien, está 'lost to the world' no sabemos por qué. Ahí lo tienen, con ese caballazo tordo, díscolo y resabiado, que estaría mejor uncido a una carreta que toreando:



Fíjense en que la cabeza y el cuello de ese caballo son casi como medio toro. Mención especial merece el mayoral de Victorino metido a picador, Félix Majada, que estuvo muy mal las tres tardes. Su querencia natural le llevaba al burladero de mayorales ya que también es presidente de la UMAVACAM. Ahí lo ven junto al Titi, al mayoral de Sao Torcato y a Bienvenido García, el de Fraile. Por cierto, al padre de Bienvenido lo mató un toro delante de él mientras trabajaba de mayoral en Los Bayones (pulsen aquí):



¿Cuándo va a volver Bonijol a Céret? Su ausencia, como broma, ya está bien. Si retorna, por lo menos tendremos dos de las tres condiciones ya que los picadores seguirán dando cera más alla del morrillo, eso no tiene remedio. Intentaremos hablar con algunos de ellos en las próximas fechas para que nos confirmen si pican trasero por indicación de los matadores (para hacer daño extra al toro) o es que realmente son así de malos.


El primer toro de Fraile pesó 570 kilos y el mejor caballo de Bonijol, 'Narbonne', a la izquierda, pesa 600.

El público ceretano nos ha desconcertado un poco. Ha aplaudido a picadores que habían clavado trasero y se han oído palmas pidiendo la devolución de un novillo por manso (el de Cascón, que de salida se frenaba y regateaba). Lo segundo no nos extraña cuando Gómez en san Isidro devolvió un toro por manso. Lo primero sí es raro. También ha pedido orejas que no venían a cuento como cualquiera de las concedidas. Pero ha silbado sonoramente a Chacón cuando recogía la suya y luego al presidente por concederla. Uno habla con los franceses que conoce y ve que son aficionados a carta cabal, de una seriedad máxima. Después, en la plaza, da la impresión de que haya dos grupos: el auténticamente aficionado y el orejero de aluvión. Lo envidiable continúa siendo el silencio con que se sigue lo que pasa en el ruedo, nada que ver con la insoportable algarabía hispana.


FOTO: Christophe Moratello

Respecto al ganado, no salió ningún 'toro de guerra' como quería Fourquet. Vimos ese 'Sortijero' de Fraile que fue pronto, encastado, alegre y con tranco pero no necesariamente bravo (de hecho, ni falta que hace en los tiempos que corren si tiene las citadas condiciones). Ese toro salvó la corrida y, si me apuran, la feria. Aquí lo tienen, número 9, de 530 kilos. Para nosotros, impecable de trapío por su culata, su finura de cabos, su longitud del rabo y su buena encornadura, alejada de esas exageraciones casi ridículas que sufrimos en Madrid o Pamplona:



Los dieciocho animales lidiados acudieron un total de 54 veces al caballo (contamos también aquí tres huídas al sentir el hierro). Lo que encontramos absurdo es insistir en que el toro vaya una tercera vez cuando tardea desesperantemente y al final se viene a los capotes y no al peto. Eso quiere decir que está visto y a otra cosa, a no ser que necesite más castigo, cosa que nunca fue el caso (y esto vale también para Vic-Fezensac).

Los toros siguen ensañándose en Céret con las maderas que el carpintero pone en los burladeros con los hierros. Ya decíamos el año pasado que da la impresión de que los animales ven que hacen presa en aquello e insisten  hasta que muchos se astillan. Quizá si pegaran contra el burladero auténtico, no repetirían con la fruición que lo hacen al notar que el pitón no penetra. Vean los desperfectos al fondo:


FOTO: Christophe Moratello

Nos pareció una buena idea poder llevar el abono imprimido por internet, aunque suponemos que eso dificultó la reventa, que en Francia se hace por necesidad, no por golfería como en España. En cambio, aún no sabemos por qué estaban cerradas con chapas las ventanas que dan a los corrales y que impidieron ver los toros antes de la corrida. 

Mención especial merece el embrollo penoso con los papeles y las edades de los novillos de María Cascón. Un amigo nos decía que la ADAC debería dar mejores explicaciones. Pues nosotros creemos que las explicaciones tendrían que darlas antes Carolina Fraile y especialmente Carreño porque el sanedrín de la Asociación está a lo que diga éste último. Es posible que la ADAC sea la menos culpable de todo el 'affaire' y que en su ingenuidad le hayan colado un gol, no sería la primera vez. En catalán decimos lo que quizás se puede aplicar a ellos: 'dues vegades bo, bobo' ('dos veces bueno, bobo').

Nos despediremos de la feria de 2018 otorgando nuestros particulares premios virtuales, a ver qué les parecen:

PREMIO AL MEJOR TORO: 'Sortijero', de Juan Luis Fraile, número 9, nacido en junio de 2013, de 530 kilos, picado por Santiago Pérez y lidiado por Octavio Chacón, ambos gaditanos. Ésta fue la quinta entrada al caballo con el regatón:


FOTO: Christophe Moratello

PREMIO A LA MEJOR ESTOCADA: a Javier Cortés, a pesar de estirar el brazo más de la cuenta, por ésta ante 'Cerejo', de Sao Torcato:



PREMIO AL MEJOR PICADOR: desierto (el club La muleta d'Arles debería haber dedicado los premios en metálico que otorgó a Benítez y Pérez a obras de caridad).

PREMIO A LA MEJOR FAENA: desierto

PREMIO AL MEJOR PAR DE BANDERILLAS: hubo varios que ya destacamos en nuestras crónicas. Nos decantamos por Manuel Macías, que puso tres sin aliviarse lo más mínimo y cuadrando en la cara. A la foto que veían en la entrada de la corrida de Fraile añadimos estas dos de los otros pares que puso:




MENCIÓN ESPECIAL AL DETALLE MÁS VERGONZOSO: a Manuel de los Reyes, subalterno de Juan Leal, por estrellar dos veces seguidas el toro contra el burladero aprovechando que el público estaba distraído con el brindis del maestro.

MENCIÓN ESPECIAL AL DETALLE MÁS ELEGANTE: a la ADAC porque se comprometió a asumir las consecuencias del lío con los papeles de los novillos de Cascón al quedarse sin sobrero. Avisaron por megafonía de que conserváramos las entradas en caso de devolución de algún ejemplar durante el festejo.

Para terminar, digamos que los antitaurinos hicieron acto de presencia en una glorieta. Fue a un kilómetro de la plaza, mostrando buena educación y perfectamente controlados por la gendarmería. Hicimos esta foto donde se comprueba que la presencia femenina era mayoritaria, como en Azpeitia (aunque en el País Vasco no van tan ligeras de ropa ya que allí hace más fresco):



Afortunadamente, este 2018 no continuó la cadena de brindis al cielo. Recuerden que hace dos años Fandiño brindó por Víctor Barrio y el año pasado, Paulita por Fandiño. Este año sólo Ángel Jiménez brindó al cielo pero desconocemos por quién.

Fue un placer volver a hablar de toros con aficionados franceses, italianos, colombianos y con los españoles venidos de Madrid, Barcelona, Valencia, Logroño... 

Lamentamos que ya no aparezcan por aquí los muy buenos aficionados que siempre venían de Granada, Zaragoza, Madrid, La Puebla del Río, etc. Han pegado la espantada sin presentar el pertinente parte facultativo. De persistir en su actitud, el año que viene propondremos para ellos la correspondiente sanción económica.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.

viernes, 20 de julio de 2018

CÉRET DE TOROS, 2018 (3): 'SORTIJERO' SALVÓ A CAROLINA

El cinqueño 'Sortijero' salvó una mediocre corrida de Juan Luis Fraile. No tuvo nada que ver con la encastada aunque no especialmente brava de hace tres años en Céret (recuerden aquí). Aquélla pudo tener una nota global de siete sobre diez. Ésta que comentamos, un suspenso sin paliativos a pesar de la vuelta al ruedo a 'Sortijero', que tapó para muchos el desaguisado. Ahí lo tienen:



En nuestras notas releemos una pelea en varas espectacular en el galope pero normalita en el peto. El toro estaba como loco por ir al caballo desde que lo vio (como los de Palha). Por eso la primera vara fue al relance saliendo disparado de un lance de Chacón. Empujó con el costillar como pueden apreciar:



En la segunda, simplemente se dejó pegar trasero. En la tercera vuelve a ir de largo y esta vez Pérez le acierta en el lomo. En el cuarto, vuelta a venirse de largo entre ovaciones. Se cambió el tercio y el mayoral nos aclaró después que no fue Carolina la que solicitó una última entrada sino que fue cosa del presidente al ver que el público quería más. Chacón no se aclaraba hasta que vio los gestos de la presidencia girando los dedos indicando que lo pusiera una vez más pero con el 'requesón' (si en periscope lo denominan 'requetón', nosotros no vamos a ser menos). Lo colocó larguísimo, ahí lo ven, y el toro acudió sin tardear y galopando de nuevo:



Pérez casi fue descabalgado ante el topetazo sin defensa. Bienvenido, el mayoral, nos decía:

"Yo no me pongo...yo estoy de picador y dice el presidente que me lo pongan largo con el regatón y me bajo del caballo y le digo que venga él a picar así"

En la muleta resultó encastado y con un temperamento que no pudo dominar el diestro gaditano, ya lo comentaremos después.

Éstos fueron los toros, todos negros, bien presentados y bien encornados. Los pitones de esta ganadería son de diamante porque es dificilísimo que se astillen. Salvo que ustedes añadan otra vacada, ésta y la de Cuadri son las dos con los pitones más duros (nada que ver con la queratina de los de Miura).

El primero renqueaba de los cuartos traseros y se colaba por el derecho:



El segundo no valía nada: tardo, escarbador, probón y rebrincado. Un toro malo sin ambages, descastado sin discusión a pesar de su nombre, 'Jaquetón':



El tercero fue tardo en el caballo hasta la desesperación. Luego terminó topando en la muleta. 



Ya deducen que la corrida iba cero de tres cuando salió el citado 'Sortijero'.

El quinto tuvo la mala suerte de que lo picó de nuevo el mayoral de Victorino, Majada. 



Hay que reconocerle sus ganas de superación: la primera tarde picó mal, la segunda muy mal y esta tercera, rematadamente mal. Lo metió en la batidora tapando la salida y le hizo un bonito gazpacho en el lomo. Ahí lo tienen ¡que no decaiga!:



Desde su casa hasta Céret hay 1.050 kms. El año que viene se los puede ahorrar sin problemas. El sexto tuvo aún peor suerte porque el caballista era Sangüesa. Esta vez fue un salmorejo también en el lomo lo que perpetró este mal picador. El toro resultó gazapón, escarbador, tardo...Descastado en suma. Observen en la piel que había cobrado de sus compañeros, no respetaron su avanzada edad (era de abril de 2013):



Sumen ustedes las posibles puntuaciones a los toros y convendrán con nosotros en que la corrida es de suspenso global a pesar del espejismo del premiado, que no parecía hermano de los otros. Al terminar la corrida, el mayoral no quería salir a saludar pero al final lo hizo. El único que silbó fue quien esto firma.

CHACÓN. Excelente como director de lidia y luciendo los toros, algo que está al alcance de cualquier torero con afición pero ya saben lo que decía Joselito Arroyo:

"Cuando toreaba, me sabía mal por el ganadero pero yo estaba para que me aplaudieran a mí; al toro, no, a mí"

Es de los pocos toreros que al final del paseíllo se desmontera para saludar al presidente. Indicó además que se taparan todos en las varas. Demostró gran oficio cuando el primero se le coló en el primer lance por el derecho y fue girando mientras se sacaba el toro al platillo para que todos los lances restantes fuesen por el izquierdo, fenomenal ejemplo de pensar en la cara del toro.

Olvidable su pelea en varas y el animal que se fue resabiando creemos que por su minusvalía, que lo llevaba a defenderse. Pero a Chacón no le cogerá nunca un toro malo.



Le dio un par de sustos, eso sí, pero la cosa transcurrió sin novedad.



Tampoco es novedad que Chacón mata mal: no termina de cruzar  y se alivia escandalosamente tapando la cara del toro como El Juli, Manzanares y tutti quanti. La imagen es demoledora en esta casi entera, contraria y atravesada con la muleta como delantal:



Su segundo fue el tal 'Sortijero'. Ya hemos comentado el quizás sobrevalorado tercio de varas por lo que hizo en el peto (de su galope y prontitud, no hay queja, nada que ver con sus exasperantes hermanos).

El toro era vivo y no perdonaba un fallo. Había que poderle y Chacón no pudo con él. Nos sabe mal pero es que es la segunda vez que vemos que pierde la batalla este año (la otra fue en Vic con uno de Raso, pulsen aquí). Lo que pasó fue lo que ven en la foto y que nos confirmó a la salida Bienvenido, el mayoral. 



Empezamos el diálogo nosotros:

- Chacón no ha podido con él ¿por qué no le ha bajado la mano?
- Es que a ese toro había que bajarle la mano ¡Bájale la mano y lo revientas! Y si el toro se cae no es tu problema, pero ¡bájale la mano, hombre!
- No era fácil estar ahí, a ver qué torero de los actuales puede con un toro encastado como ése...

Interrumpimos el diálogo para hacerles la pregunta a ustedes. Nosotros creemos que éste era el toro de Napoleón Robleño en lugar de las ursulinas de Sao Torcato. Otros que hubieran podido son López Chaves, Rafaelillo, Sánchez-Vara...incluso un Pepe Moral con ganas. Esto nos decía el mayoral siguiendo la conversación:

"Si le toca ese toro a Joselillo...Joselillo estuvo fenomenal con un toro muy parecido a éste en Sangüesa y pudo con él."

Se dedicó, en fin, a pegar pases con el toro cada vez más envalentonado. Con la izquierda no lo quiso ni ver. Lo mató de esta rinconera arrancando, que no al encuentro, tapando la cara nuevamente con el delantal:



Bella muerte del toro, con la boca cerrada:



Por todo lo dicho Chacón no mereció la oreja que el presidente Manent le regaló con un tercio de petición. El maestro notó las protestas y entregó el trofeo a la cuadrilla antes de dar la vuelta al ruedo. El premio al toro no nos molesta en absoluto aunque ya ven que no fue de diez ni mucho menos. La ganadera y el mayoral aplauden el arrastre:



JOSELILLO. Siempre vamos con ganas de ver a Joselillo porque tiene oficio y torea como hace treinta años, sin los vicios del tiovivo moderno propio del destoreo que sufrimos cada día. A su primero le hizo el mejor recibo capotero de toda la tarde:



Nos fijamos en que su capote no está tan almidonado como los de los demás sino que vuela con cierta gracilidad, observen los pliegues que hace (como el de Frascuelo, recuerden aquí aquel homenaje que le hicimos):



Agudo quiso picar como Efrén Acosta, dejando caer la vara conforme acometía el toro pero marró (vean que al caballo le cuesta obedecer, ¡ay, Bonijol...!):



Ya dijimos que el toro fue descastado y desaborío. Joselillo le arrancó pases a base de zapatillazos echando el muslo por delante.



Nada que hacer salvo demostrar al final que es un pinchaúvas: primer intento en que marra y se va al suelo sin consecuencias, dos pinchazos bajos, esta media baja que escupe y tres descabellos:



Cuando el toro dobló hubo una ovación de gala porque el público había aguantado en silencio la faena sabiendo que Francia acababa de ganar el Mundial durante el trasteo del diestro.

El quinto sufrió las varas de Majada pero fue muy bien toreado por Linejo. Hubo este gran par de Tornay, si no vamos errados:



El toro transmitió poco y Joselillo, menos. Sólo dio un pase bueno y no fue éste:



Fue un natural largo y bien rematado pero no tenemos la foto. Destacar que es de los pocos que coge el estaquillador casi por el centro. Se aprecia en la foto de nuestro amigo Christophe:



Media lagartijera en los medios y el toro que se fue a morir a tablas seguido por el cortejo fúnebre:



GÓMEZ DEL PILAR. Con un Robleño que torea toros a contraestilo y Aguilar retirado, el torero de Parla lleva camino de convertirse en favorito del público ceretano. Lo detectamos por el cariño con que se le trata y la disposición con que se le ve. A su primero lo recibió con una larga en tablas.



Aguado lo agujereó varias veces y siempre trasero o en el lomo. El toro se descompuso y echó la cara arriba en banderillas, a pesar de lo cual Manuel Macías hizo un buen trabajo:



No era fácil llevarlo toreado porque iba rebrincado y con la embestida descompuesta. En esta foto no lo parece:



Pero en ésta, sí. Por eso, con la izquierda no lo quiso ver. El animal acabó topando insulsamente antes de recibir un bajonazo. La corrida, muerto el tercer toro, iba en barrena:



En el sexto se fue a porta gayola. A ver si hacen memoria ustedes conmigo porque es la primera vez que recuerdo un torero a porta gayola en los últimos lustros aquí en Céret. Novilleros, sí, dos: Lamelas con Zaballos y Solera con Raso. Ahí está en instantánea del maestro Christophe (en este momento de la foto, Carolina se estaba santiguando dos veces):



El caso es que el toro lo ignoró dando un ejemplo máximo de descastamiento. Al final pasó un trago de rodillas pero le hizo la larga para rematar con esta media también de rodillas casi en chiqueros. Muy bien por las ganas y el valor que le echó Noé:



El cinqueño era una perla, ya se vio en la brega de Macías cuando esperaba y apretaba para adentro. Además escarbaba, tardeaba y embestía a arreones pegando un gañafón al final. Brindó a Chacón tras un largo parlamento:



El toro necesitaba un macheteo duro por abajo y Gómez del Pilar sacó la absurda faena del hotel. Los pases resultaron mantazos porque el toro iba a su aire, se aprecia en las fotos. Por el derecho:



Y por el izquierdo, siempre con la cara alta (parte de culpa la tuvo Sangüesa):



La faena terminó en toriles, que es donde quería el cinqueño. Cuando se perfiló, Iván Carro, que había visto los problemas del toro, le dijo '¡con la mano por delante!' Se lo traducimos: '¡alíviate asesinándolo alargando el brazo como hace Manzanares e intenta clavar antes del embroque porque si no, tendrás problemas!'

Ellos saben perfectamente cuándo hacen las cosas bien y cuándo mal. Carro sabía que podía pasar lo que pasó. Ahí va el diestro dejando una media, tendida, pasada y desprendida, con el toro poniéndole el pitón derecho en el corazón:



Lo derribó pero no hizo carne:



Aunque sí le propinó un pisotón en el cuello que todavía le debe de doler:



Tras seis descabellos, recibió las palmas del cariñoso público de Céret.

Y aquí se terminó la feria de 2018 de la que extraeremos algunas conclusiones en una próxima entrada. Destaquemos la gentileza con que atendieron nuestras dudas las presidencias. Discrepamos en algunas cuestiones pero es innegable que son veteranos y buenos aficionados además de muy educados.

Damos por supuesto que Fraile repetirá el año que viene aunque ni los aficionados serios de la ADAC ni Carolina, que no tiene un pelo de tonta y tuvo que verlo igual que nosotros, nos podrán convencer de que fue una buena corrida. A pesar de todo, es una ganadería a la que siempre iremos a ver. Sólo pedirles el favor de que quiten los crotales, hace horroroso.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.