LOS PATASBLANCAS, AL MATADERO:

2. 'LOS MAJADALES' DE JESÚS TABERNERO

Segundo capítulo de nuestro pequeño serial dedicado a los patasblancas que iniciábamos aquí. Es un capítulo triste porque hay dos ganaderos que enviaron sus reses al matadero: Sánchez-Cobaleda, su último toro murió este verano, y Jesús Tabernero, finiquitado todo hace ya unos ocho años. Empezaremos hoy con este último.

Les presentamos estas fotos en modestísima exclusiva porque es difícil encontrar imágenes de estas reses -el propio Viard en su estudio de Tierras Taurinas dedicado a este encaste no dispuso de fotos adecuadas porque cuando lo hizo ya estaba todo en el matadero-. Son de los toros más vistosos que hemos fotografiado nunca. Fíjense en esta maravilla :

Quien esto firma tiene un cariño especial por este toro. Lo vimos de eral en nuestra primera visita a la finca, luego de novillo, de toro y, aquí, ya talludito, con los pitones afeitados porque querían conservarlo de semental. Acabó en un pueblo de Valencia donde la Penya Taurina conserva su cabeza, lo contaremos en el capítulo 7 de este serial de los patasblancas que podrán localizar en la etiqueta con esta denominación.

La familia Tabernero tenía tres hierros: el histórico de Alicio, el de Los Majadales y el de Jesús Tabernero. Ahora, en la bonita finca del Castillo de Buen Amor, sólo quedan el manso y los caballos PRE de don Jesús. Vean otro ejemplar completamente diferente (berrendo en negro, alunarado, lucero y caribello):

No hay ninguna ganadería donde hayamos visto pelajes tan diferentes, ni siquiera en la de Concha y Sierra. Era un espectáculo. Menos castaños y jaboneros había de todo. Y lo curioso es que le salían bastantes colorados como estos dos de abajo. Quizás eran un salto atrás recurrente porque en el hato que compró Alicio había algunos toros colorados. Vean este primero, ojo de perdiz, meano y estrellado, pero no calcetero:

Estuvimos en la última corrida de toros que lidió. Fue en Céret en 2005. La mataron Encabo, El Fundi y Lescarret. Dieron un espectáculo en varas pero se apagaron en la muleta. El quinto recibió una monumental ovación en el arrastre. Y no olvidaré la imagen del ganadero siguiendo la lidia del sexto sentado impertérrito bajo un aguacero torrencial. Mientras todo el mundo buscaba cómo guarecerse y muchos huían del coso, él seguía atento, en mangas de una camisa rosa, completamente empapado. En ese momento no sabría que ese era el último toro suyo que vería morir en una plaza.

Otro salto atrás en este de abajo, ojo de perdiz, rebarbo, facado, bragado y calcetero de pies:

También salían negros zaínos (no ponemos más fotos para no marearles). Pero vean este toro, uno de los más perfectos de trapío que hemos tenido ocasión de mostrar en nuestro blog ¿qué les parece? Para mostrar seriedad, no hace falta tener esas caras exageradísimas -y extrañamente afiladas- que vemos muchas veces en Las Ventas:

El año 2004 un novillo suyo había ganado la concurso de Soustons. Tabernero no tenía hijos, sus sobrinos no estaban por la labor y antes de enviarlo todo al matadero se lo ofreció a Victorino pero no llegaron a un acuerdo.

Tenía dos frases memorables sobre el encaste Vega-Villar: la primera era 'esto no liga con nada' -ya hablaremos en otra entrada de los intentos de refrescar de Barcial y de El Taru con lo de Justo Nieto-. La segunda era 'cuando a esto le da por embestir, olvídate de todo lo demás'.

En el mismo 2005 se lidió para recortes una corrida suya en Navarra. Hemos rescatado de la hemeroteca del Diario de Navarra, dos fotos. Este primero, berrendo en colorado:

Hace unos diez años lidió tres toros en Barcelona y uno de ellos le pegó un navajazo tremendo a Fernando Cruz. Muchos no se dieron cuenta de que estaba herido. Siguió toreando, mató al toro y en la enfermería encontraron 15 cms. de destrozos en la pierna. Un gesto de Torero con mayúsculas.

Vean otro de los recortes del Diario de Navarra. Es cárdeno, careto, nevado, girón, rebarbo, bragado, meano, axiblanco, coletero y calcetero:

Igual ustedes no sabían que llegó a haber patasblancas en la provincia de Huelva. Eran los que Giménez Usera le compró a Tabernero. Los mantuvo cuatro años y los vendió a Guillermo Tena que anuncia Campo Amor -sustituídos por el encaste Núñez-.

El malogrado Pallarés iba siempre por 'Los Majadales' a tentar con sus torerillos. Este era el jefe de los bueyes. Su cabeza supongo que seguirá adornando la casa de la finca:

Jesús Tabernero estuvo muchos años en cargos directivos en la UCTL. Fueron los años en que asistió a la degeneración: Juan Pedro vendiendo vacas de desecho a todo quisqui, los constructores blanqueando dinero haciéndose ganaderos, los hierros ya se los podía dibujar uno mismo, los 'tratantes' que regalaban toros para ver su nombre en los carteles... De aquellos polvos, estos lodos.

Decía el ganadero en 'Tierras Taurinas' que cuando las vacas fueron al matadero lo llevó más o menos bien pero que se afligió inconsolablemente el día que se llevaban su parada de cabestros. Ahí se dio cuenta de que todo se había acabado.

No sé si don Jesús leerá estas líneas pero nos atendió tan gentilmente tantas veces que nos despedimos con una imagen precisamente de esa parada que le hizo llorar.

Saludos desde Tarragona. Rafa.