viernes, 1 de abril de 2022

CENTENARIO DE LA MUERTE DE GRANERO (1): MÁS CORRIDAS QUE GALLITO Y BELMONTE

Hoy es el cumpleaños de Manolet. Nació hace ciento veinte años en el número 1 de la calle San Antonio de Valencia (según otros, en el 35 de la calle Triador). En su primera temporada como torero de alternativa, Granero toreó 94 corridas, es decir, más que cualquiera de los dos monstruos del titular. Salvo error, Gallito estoqueó 80 y Belmonte 78 pero es que Cossío avisa de que unos leves percances hicieron perder a Manuel los festejos con que hubiera llegado al centenar. A ver si alguno de ustedes nos refresca la memoria y nos apunta el nombre de otro maestro que ostente un récord similar (en el primer año que funcionaron, Manolete toreó 50, Pepe Luis 68 y Ordóñez 74). Vayan al final abajo a los comentarios sobre este particular. 

Granero fue la gran esperanza blanca del momento y un torero claramente malogrado. Recuerden aquí nuestra teoría de que Gallito no fue un maestro malogrado como se afirma habitualmente porque entendemos que ya había mostrado todo lo que era capaz de hacer frente a un toro.


El pobre Granero murió en su segundo año de alternativa dejando entre la afición una sensación muy amarga de frustración. Pónganse en aquellos años y recuerden que Granero moría dos años después qué José y unos días antes que Varelito. Ese mismo año morían los novilleros Juan Ruiz, Lagartija, y Chico de Basurto (éste también a raíz de una cornada en la cabeza). Fuera de los ruedos morirían en 1924 Maera y en 1926 Blanquet y El Cuco.

Pulsando aquí encontrarán una excelente recopilación de testimonios sobre el maestro que hizo Don Manuel Hernández. Allí está todo pero apuntaremos algunas cosas más que sirvan como homenaje desde este modesto blog.

La primera vez que nuestro protagonista fue a una corrida era una novillada donde actuaba Antonio Giráldez, Jaqueta. Al niño valenciano le gustó tanto que su madre, para tenerlo contento, le dijo: 'sí, yo quiero que mi niño sea como Bombita'. Naturalmente hizo la afirmación con la boca pequeña porque ni ella ni su marido tenían ninguna gana de que su hijo se dedicase a la tauromaquia.




Será su tío Paco Juliá quién los convencerá insistiendo en la inmensa afición del chaval. Compartía desde pequeño esa afición a los toros con la que tenía a la música. Ya saben que tocaba el violín y consideraba a Beethoven y Mozart como sus músicos favoritos. Le gustaba mucho también bailar, montar a caballo y cazar. Aquí lo ven en la finca de quien está con él, que es Antonio Pérez Tabernero:


Por tierras salmantinas empezará su carrera como becerrista acompañado por otros dos amigos que con el tiempo serán también toreros recordados: Juan Luis de la Rosa y Valencia II. De ellos hablábamos en esta entrada y contábamos su trágico final: ambos murieron asesinados al principio de la guerra.

Es curioso que los dos amigos que iban con Granero por las capeas salmantinas coinciden con él en sendos momentos importantes. Valencia será el único torero al cual Manolet dará la alternativa y de la Rosa estaba siendo atendido en la enfermería cuando traían al valenciano prácticamente muerto.

Se presentó en Madrid en junio de 1920 con las temibles reses de don Esteban Hernández de las que hablábamos en esta entrada. Aquí tienen el cartel de aquel día:


Este es el cartel de su alternativa en septiembre de ese mismo año:


Se la da El Gallo ataviado con un terno catafalco con cabos negros de luto por su hermano:


Las crónicas hablan de que el toro era sardo. Pocos toreros se habrán doctorado frente a un toro sardo. Es este de la imagen, de Concha y Sierra y de nombre Doradito:


En la primavera de 1921 confirmará la alternativa en Madrid de manos de Chicuelo y vestido de canela y oro. Causará muy buena impresión siendo ovacionado. 

Volverá a Madrid cinco días después y cortará la oreja de Rondeño, de Santa Coloma. Y en septiembre retorna para cortar otra a uno de Gregorio Campos, que lo arrolla arrancándole la manga de la chaquetilla y golpeándolo en la cara. Esa fue la corrida en que dio la alternativa a Valencia II, que pinchó un total de dieciocho veces. Ahí están:


La carrera parece meteórica y Eugenio Úbeda le compone ya un pasodoble. Corrochano se plantea si el destino ha hecho que aparezca en el lugar adecuado y en el momento perfecto. ¿Hubiera sido tan célebre de no haber coincidido su éxito con la reciente muerte de José?

Ese fue el año en que estuvo a punto de llegar a las 100 corridas. Mató un total de 193 toros.

Preguntado sobre la técnica de torear, no era muy original cuando decía que lo más difícil consistía en la estocada y el natural. Destacará toreando con la derecha, disciplina en la que recibió los elogios del citado Corrochano, quien solía repetir que no había visto a nadie mejor con esa mano.


Torero fácil, preocupado por ahorrar capotazos en la lidia, que 'torea sin esfuerzo porque ve claro el toreo y eso hay pocos que lo vean claro' . De nuevo habla don Gregorio, aunque ya saben que hay quien sostiene que no sabía de toros... Y sigue:

'Torea sin esfuerzo y domina los toros en todos los momentos de la lidia; yo conozco toreros mucho más veteranos que Granero que aún no se han enterado. Podríamos decir que no les ha entrado el toreo en la cabeza. Son como esos aficionados que, en apoyo de su competencia al discutir, aseguran que llevan cuarenta años viendo toros sin darse cuenta de que el número de años de asistencia no acredita otra cosa que su estupidez'

Descubre muy bien la muerte de los toros aunque debe mejorar el embroque al clavar:


Perfeccionó un pase que había intuido Antonio Márquez. Nos referimos a ese pase en redondo que se da cuando el toro se va ciñendo cada vez más y no te permite rematarlo bien. Hay que retirarle la muleta de la cara para volver a enseñársela en el instante en que se da la vuelta. El diestro se aleja caminando airoso mientras el animal ha quedado parado con el toque de muleta al pitón contrario. Nuestros avispados lectores ya han adivinado que estamos ante lo que se denominó el pase de la firma. Ahí lo tienen:

FOTO: Serrano, Archivo Carlos Gil

Viniendo de Valencia, Granero no podía ser otra cosa que un muy buen banderillero. Recalcaba que él pareaba por ambos pitones en lo que quizá podríamos ver una velada referencia a Joselito, que lo hacía casi siempre por el derecho. Este es Manolo:


Su carrera quedó truncada el 7 de mayo de 1922 cuando resultó corneado por este toro:


Es el famoso Pocapena, del duque de Veragua, cuyo comportamiento obedeció a lo que se repetía por aquel entonces de los animales de esta vacada: agotarse en el primer tercio y empujar hacia adentro en el último. Pero de la tragedia ya hablaremos en otro momento.

La única novia que tuvo el bueno de Granero fue una chica catalana que se llamaba Marujita Mercader. Era un año mayor que él y la había conocido en un cabaret de Valencia.

José María Carretero fue un escritor y periodista que firmaba como El Caballero Audaz y gozó de la amistad de Granero. Lo conoció cuando el maestro de 19 años se dirigió a él para que le firmase unos libros.

Lo que nos dice Carretero del joven diestro el día que lo conoció es lo siguiente:


Y la descripción que el mismo escritor hace de Manolet la última vez que lo vio es ésta:


Observen estos carteles de Sevilla de ese año de 1922. Son cinco corridas y las figuras son Varelito y Granero, que se anuncian en cuatro, seguidos por Chicuelo en tres.


En la última, un toro de Guadalest corneará al pobre Manuel, el sevillano. Habían hecho juntos el paseíllo en la Maestranza el 21 de abril y en menos de un mes los dos Manolos estarían muertos. El valenciano visitó al sevillano después de la cogida y al verlo tan bajo de moral y sin parar de repetir que se iba a morir, quiso tranquilizarlo diciendo 'igual me muero yo antes que tú'. 

En el mismo ejemplar del Heraldo de Madrid correspondiente al 8 de mayo de 1922 se leerán estos dos titulares:



Efectivamente, Manolo murió seis días antes y se cumplió así la profecía que había hecho tiempo antes aquella vidente valenciana a su tío Paco. Pero esa historia la dejaremos para otra ocasión...

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.




6 comentarios:

  1. Hola Rafa,

    Preguntas por un torero que pasará de las cien actuaciones el primer año. El Juli, la tomó en septiembre de 1998 y llegó a las 134 en su primera campaña completa.

    Superó a Granero. Y no creo que nadie le arrebate el título.

    Saludos.

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    Respuestas
    1. Pues sí, la verdad es que ni siquiera me paré a pensar en toreros en activo. He visto que en algún sitio le dan 135. Gracias por su aportación.

      Saludos.

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    2. Se podría apuntar también a César Giménez: 96 festejos en su primera temporada completa como matador.

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    3. Me ha hecho ir a mirar las de El Cordobés pero se quedó, salvo error, en 63 el primer año y 72 el segundo.

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    4. Añado a Miguel Márquez y ya, así completamos un poco másla estadística: alternativa en marzo del año 1968 y lo cerró con 101.

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    5. Perfectos sus apuntes que le agradezco n nombre de todos los lectores. Menos mal que me curé en salud al redactar la entrada poniendo aquello de que algún selecto lector me refrescase la memoria. A ver si terminará saliendo alguno más...

      Saludos.

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