viernes, 26 de julio de 2024

ADIÓS A PEPE LUIS HIJO

Ha muerto Pepe Luis Vázquez Silva todavía joven. Qué pena. 

Tranquilos, que no vamos a marearlos con los datos de su vida torera que arrancó en Alburquerque y terminó en Utrera. En cualquier sitio encontrarán información al respecto.

Preferimos arrimar el ascua a nuestra sardina y el homenaje de Toreoenredhondo consistirá en recordar su forma de torear. Quizá incluso él desearía que fuese así. De paso servirá para desmontar ese mito de los críticos paniaguados de que hoy se torea mejor que nunca y también para dejar a la altura del betún a tanta figurita de mazapán cuyas formas toreras están en los antípodas de lo que debería ser el toreo: naturalidad y pureza. Así es como lo entendió siempre la familia Vázquez.

Si ustedes leen panegíricos a Pepe Luis escritos o hablados por paniaguados que luego alaban a los Roca, Rufo, Juli, Castella o Manzanares, no duden de que les están dando gato por liebre. O una cosa o la otra. Las dos a la vez no puede ser porque no tienen nada que ver, ¿verdad, maestro?



Nos centraremos en una corrida que toreó en Aranjuez en 2017. Resulta que Morante le comió la oreja para que se volviese a vestir de luces en unas poquitas corridas junto a él durante aquella primavera. Total, decía Pepe Luis, 'el ritual va a ser el mismo: hacer el paseíllo, abrirte de capa, entender al toro... lo mismo que he hecho toda la vida'. Claro, maestro, pero todo eso ante un animal ayuno de casta, que pasa por ahí, tal como le explicaría Morante, y encima le aseguraría que iba a salir tocaíto de pitones, ¿eh? Venga, tiene derecho a guardar silencio.

Desengañémonos: si el toro actual tuviese la casta y la movilidad mínima exigible, sin que fuese Jaquetón, ¿quién se cree que hubieran vuelto Manolo Vázquez y Antoñete con sesenta años? ¿Y de qué iban a estar Ponce o Morante dando el ferrete a estas alturas? Eso salta a la vista y uno como Pepe Luis, que lo mamó desde la cuna, lo veía antes que nadie. Por eso se apuntó. ¿Qué necesidad tenía de ponerse delante de un toro para que le dejase cojo o algo peor? Lo que pasa es que veía que los torillos que se traen nuestras queridas figuras del campo permiten que uno como él 'exprese lo que lleva dentro', como dicen los cursis, a pesar incluso de su avanzada edad. 

En el programa de 'Paisaje Herrado' dedicado a Rocío de la Cámara se le veía torear como los ángeles en un tentadero. Llegaba a parecer mucho mejor de lo que era porque tentaba junto a Espartaco. No comprendemos cómo el de Espartinas permitió que se editasen juntas las imágenes de su toreo junto al de Vázquez. Debió evitar a toda costa la dramática comparación.

A lo que íbamos: Pepe Luis se fue a Aranjuez junto a Morante y El Juli con unas terneras escogidas para la ocasión. Lamentablemente no hemos podido localizar el vídeo de su faena ya que Youtube lo ha borrado. Vean el cartel:



De inicio vemos con alegría que Pepe Luis sale con un capote de dimensiones humanas, no como el de Manzanares, por ejemplo. Y hagan el favor de apreciar que no está almidonado y acartonado como los actuales. En eso, igual que su padre:



La media es un prodigio de naturalidad y seriedad:



Como pueden suponer, el torete es comercial y desprecia al diestro tras el primer pase por alto porque no sabe de quién es hijo el torero:



Olvídense de los cites de los destoreadores actuales con la pierna atrás y enseñando la cadera. La pierna va adelantada ligeramente y enseña el medio pecho. Eso tan extraño de cargar la suerte con la pierna de entrada no rige para él. Nosotros no lo comprendemos y mucho nos tememos que el maestro tampoco:


Liga con otro pase en redondo sin necesidad de destorear echándose el toro afuera y saliéndose de cacho. Lo lleva a media altura, sin arrastrar la muleta. ¿Se van dando cuenta de que es todo lo contrario de lo que sufrimos hogaño?



El pase de pecho es otra lección de naturalidad ¿Por qué se retuercen tanto hoy en día al dar los pases de pecho o por alto? Te duele la espalda de verlos, nada que ver con el de Pepe Luis:



En la segunda tanda, primer pase templado, con un temple que tiene más quilates que los tan jaleados de los Talavantes, Castellas, Rocas o... sí, o Morantes. Y vale más por el plus de naturalidad, no nos vamos a cansar de insistir en ello, sobre todo para que se den cuenta los aficionados más jóvenes. Esa naturalidad no la tiene Morante cuyo toreo es siempre muy meditado. A Pepe Luis le salía así, como recordaremos más abajo:



Liga poniéndose un tanto de perfil. Eso es correcto, de otra manera es casi imposible hacerlo. Pero una cosa es ubicarse discretamente de perfil y otra destorear apartándose del toro como hacen todas nuestras queridas figuras, excepción hecha de Urdiales y Morante -cuando quieren- y de Ortega.



Se aliviará en el siguiente pase, no lo vamos a tapar, pero no se ha colocado totalmente fuera de cacho como los diestros actuales habitualmente:



La pierna sigue levemente adelantada y tras tres pases acaba con el de la firma. ¿Para qué más? 'Me da coraje que alguien pueda gritarme que me pongo pesado toreando', decía Pepe Luis un día. Se ha ido el maestro y nos deja con toda esa ralea no de toreros sino de picadores de piedra, que siguen pegando pases, venga, dale que te pego, otro más, ignorando que están castigando al personal con una tabarra absolutamente insufrible.

Y nuestras figuras, con su toreo en línea abriendo la puerta al toro, lo que hacen es enredar y enredar, como decía Rafael Ortega. Pegan tandas de siete u ocho pases donde, como no obligan al toro sino que lo llevan en paralelo aprovechando su viaje, pueden seguir dando la paliza hasta el día del Juicio.

Volvemos a Aranjuez. Al natural, la cosa no tiene valor. Pepe Luis se alivia descaradamente y aquí sí que se pone fuera de cacho y le da al picoteo, no lo tapamos ¿eh?



Pero en la estocada se perfila correctamente sin adelantar el brazo para darse ventaja. No tapa la cara del toro con la muleta sino que el estaquillador apunta al hocico del animal:



No cruza pero deja esa media, honda y perpendicular arriba:



Compárenlo con El Juli esa misma tarde. Avanza con intención de pegar el telonazo. Perpetra su golpe de muñeca para girar la muleta y cegar al toro acompañado todo de un violento toque:



El toro no ve nada y López se apresta a pegar la puñalada con cara de pocos amigos:



No falta el homenaje a Lebron James con su inevitable brinco al clavar:



Disculpen porque no era nuestra intención emborronar la entrada mezclando a Pepe Luis con cualquiera de los otros dos. Por supuesto que hemos hecho abstracción de lo que tenían delante en Aranjuez. Decir que eran norits es quedarnos muy cortos. 

Pero fue llamativo ver a un prejubilado como Pepe Luis toreando tranquilamente y sin apuros esos toretes posmodernos. Y eso que él siempre fue un torero medroso. No hay problema, con estas babosillas no necesitas ninguna técnica lidiadora y no conoces el miedo.


FOTO: Alberto de Isidro


Por eso, ya que lo de delante son monas, lo mínimo que pedimos es torear bien, o medio bien, no destorear y aliviarse con total desahogo, que es lo que padecemos hoy. Pepe Luis toreó medio bien en Aranjuez, ahí ha quedado. Insistimos en que se fijen los lectores más jóvenes para que comprendan que eso de que hoy se torea mejor que nunca es una tremenda falacia (qué poca vergüenza tienen los toreros que dicen eso y, mucha menos, los críticos taurinos que los jalean desde los medios).

De su padre heredó tres cosas: la técnica ya que, por mucho arte que tengas, sin técnica estás perdido; la naturalidad porque no hay que estar pensando todo el rato en ponerse bonito y, por último, la humildad, cualidad básica en la familia Vázquez dentro y fuera del ruedo.

¿Cuántas veces hemos insistido desde nuestro modesto blog en lo de la naturalidad al torear? Nos pone enfermos tanto retorcimiento, tanta postura grotesca, tanto toreo de espejo, forzado, artificioso y amanerado. Recuerden que nuestra serie sobre Las verdades del toreo de verdad la iniciábamos aquí con la naturalidad.


FOTO: Alberto de Isidro

Nos despedimos con las palabras del pobre Pepe Luis hijo:

'Yo nunca he sido de ponerme bonito. El verdadero arte consiste en la naturalidad...Yo intento torear sencillo y natural, que aquello parezca fácil, suave... Ahí radica la maravilla de los toreros llamados artistas, en la naturalidad y la pureza. Pero toreo así porque me sale así... yo soy un poco así'

Le preguntaron una vez cuál había sido el éxito más grande de su carrera como torero y he aquí la respuesta:

'Mi mayor éxito en el toreo será que me recuerden...'

Pues en nuestro insignificante cuadernillo lo hemos recordado porque cuando se juntan una buena persona que a la vez es un buen torero, estamos ante algo imposible de olvidar.

Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.

22 comentarios:

  1. Buenas Rafa:

    Una oración por el maestro. Que naturalidad tenía en lo poco que he visto en vídeos.

    Saludos

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    1. Por eso he centrado el homenaje en la naturalidad, cosa que hoy brilla por su ausencia excepto en alguno como Aguado cuando le sale una ternerica de su agrado.

      Saludos

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  2. Buenas tardes, Don Rafael y la compaña:

    Aún me resuena el solitario aplauso que un espectador le brindó desde un tendido maestrante en un lluvioso y desangelado domingo de miuras; estuvo tragándole lo más grande a uno de Zahariche ante la frialdad de casi todo el público sevillano, en una tarde imposible de remontar. El que le aplaudía con fervor era el otro Pepe Luis, "el de la cámara".

    Nunca tuve el gusto de saludarle, pero se veía que era tan buena persona como torero.

    Descanse en paz.

    Saludos a usted y a los selectos lectores del blog.

    P.S. Mi padre sostiene que esa naturalidad y sencillez era tomada como frialdad por el público, que esas mismas tandas con un "já toro" antes de cada muletazo habrían caldeado los tendidos.. pero entonces no hubiera sido Pepe Luis, claro.

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    1. Sería un tema para discutir si la naturalidad presuntamente fría de Pepe Luis era equivalente a la naturalidad presuntamente más cálida de Romero. Pero eso tendríamos que hablarlo a tres bandas con su padre, a quien hará el favor de dar recuerdos de mi parte.

      Yo recuerdo de muy pequeño un vídeo resumen de la feria de Sevilla donde la locutora, que igual era Mariví Romero, iba comentando a vuelapluma las imágenes. En un momento dado dijo: "Pepe Luis pasó sin pena ni gloria dejando trazos aislados". Y mientras decía esto se vieron tres naturales y uno de pecho que me dejaron boquiabierto. Nunca los he olvidado.

      Saludos

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    2. Esa situación que comentas, hace grande nuestra afición ( ¿o será locura?) . Siempre cuento y pocos me creen que de niño en Melilla, en novillada sin picadores, vi el muletazo mas lento, mas templado y mas largo que he visto nunca. Lo dio Manuel Sánchez Saco y no lo puedo olvidar.

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  3. Me gustaba su torería melancólica y añeja. Su aparente desamparo ante la cara del toro él lo transformaba en un arte sencillo e intimo. Con su muleta pequeñita se ponía frente al toro, abandonado, indefenso, quieto... Era el hechizo que transmitía a su muleta el que toreaba. Él, simplemente, se dejaba llevar por el momento. Andaba por allí como flotando, poseído por el duende de la inspiración.
    Su hablar pausado y acariciante era una demostración palpable de cómo sentía el toreo en lo más hondo de su corazón. Lo recuerdo con Moura y Curro dando varías vueltas a España toreando despacito y suspendido en sentimiento.
    Dulce y sobrecogedor su toreo, grande su sentir humano. Nunca le vi exageración alguna ni en su toreo ni en su comportamiento. Un maestro que te enseñaba a intentar ser una mejor persona...
    Una tarde de San Isidro le vi caminando calle Alcalá arriba: americana azul marino con botones dorados anclados y cruzados, zapatos corintos. Fui detrás de él sin decir nada hasta que tomó un taxi cerca del parque de bomberos. Entré en el metro pensando que los dioses toreros son los más parecidos a los humanos.
    Yo antes no contaba estas cosas. Me podían llamar raro y no me gustaba. Pero ahora ya sólo tengo que rendir cuentas a mis sentimientos y quiero llevarme bien con ellos.
    Era un orgullo muy personal saber que había nacido el mismo año que servidor. Verlo torear era un obsequio para la propia autoestima... Pepe Luis Vázquez no toreaba como los ángeles. Eran los ángeles los que lo hacían como él. Ellos mismos le sacaron en volandas de su finca cuando le vieron dormido al mediodía. Cogieron también su pañosa pequeña. Y los que les veían pasar volando supieron que se llevaban a Pepe Luis Vazquez. Portaba su muletita hechizada, como lo estaban aquellas tardes por su influjo que vuelven por las noches a visitarme emocionadas. Qué huérfano me voy quedando...

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    1. No puedo añadir nada a lo que usted acaba de exponer tan bellamente. Ya me gustaría haber podido dedicar al maestro unas palabras tan precisas y tan sentidas como las suyas.

      Se las agradezco mucho en nombre de todos los lectores del blog.

      Saludos

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  4. "... Prodigio de naturalidad y seriedad. / Cuando se juntan una buena persona que a la vez es un buen torero, estamos ante algo imposible de olvidar. / ... Y, por último, la humildad, cualidad básica en la familia Vázquez dentro y fuera del ruedo."

    Bellas expresiones y muy atinado tributo que ha grabado Vd. aquí, Dn. Rafa, en esta triste ocasión que rinde homenaje al Sócrates sevillano. Me ha gustado mucho su interesante observación sobre los contrastes del toreo natural y elegante de PLVS, rompiendo paralelos con los desfiguros y ademanes de los lidiadores actuales.

    Y con ello disfruté también su excelente entrada respecto a la Naturalidad del toreo donde subraya el estilo, modestia y elegancia de Manolo Vázquez (Verdades del toreo de verdad, Oct., 2015).

    Gracias maestro. // Atte., Torotino

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    1. Gracias a usted aunque ya ve aquí abajo que no todos piensan que haya estado atinado en el homenaje. Saludos

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  5. "Si ustedes leen panegíricos a Pepe Luis escritos o hablados por paniaguados que luego alaban a los Roca, Rufo, Juli, Castella o Manzanares, no duden de que les están dando gato por liebre. O una cosa o la otra. Las dos a la vez no puede ser porque no tienen nada que ver, ¿verdad, maestro?" (...) "Eso tan extraño de cargar la suerte con la pierna de entrada no rige para él. Nosotros no lo comprendemos y mucho nos tememos que el maestro tampoco".

    (Todo lo que a continuación se dirá, se dirá con todos los respetos para el autor de este blog y en estrictos términos de defensa).

    Ah, al maniqueísmo, yo a eso también sé jugar. ¿Qué toros "cuajaba" Pepe Luis? Grandes artículos en este blog de Rafael de Paula, de Curro Romero, de Pepe Luis Vázquez Silva (como este)...(y que además a mí me encantan) haciendo "abstracción" (qué bonita palabra) de lo que tenían delante, pero lo de Morante en Santander a "una oveja moribunda y nauseabunda" no se puede hacer abstracción. La naturalidad de Pablo Aguado con ¿cómo has puesto? ¿el becerro? No se puede hacer abstracción... ¿qué pasa? ¿qué lo de no hacer abstracción prescribe, o cómo es eso? Ah, sí… ¿cómo era? O una cosa u otra, ¿no?

    Mira, si alguien tiene licencia (además de los emocionantes comentaristas que aquí han hecho comentarios bellísimos de Pepe Luis, y que a ti te han emocionado en tu “abstracción”) para valorar el toreo de Pepe Luis, soy yo. (El de la teoría de la pierna de entrada).

    Mira Rafa, coherente es Iván (o una cosa u otra), que no nos ha hecho un panegírico del toreo de Pepe Luis. Así que no me provoques, que embisto.

    Por último, sobre Pepe Luis Vázquez Silva.

    1. Pepe Luis tragaba poquito, perdía pasos a cascoporro y lo de dejarla puesta, pues como con la frecuencia de los eclipses de sol, pero cuando la dejaba.... Y su toreo tenía una naturalidad, una fragilidad y una honestidad bellísima. Esos pies diminutos, que debía calzar un 36, entalonao, con la puntitas de las zapatillas mirando casi al frente y algo levantadas, con el culillo medio pa fuera, queriéndose poner tieso pero... sin poder del todo. Qué maravilla.

    2. Pepe Luis fue una pésima influencia en Morante. Influyó tanto en él que Morante dejó de torear desde dentro del muletazo (con hondura) a hacerlo desde arriba (con tanta magnífica naturalidad como levedad). Y perdóname ya sé que “de mortus nihil nisi bonum” (de los muertos no se debe hablar mal) pero con la uña del dedo meñique de Morante salen cien Pepe Luises. Y la naturalidad de Morante es encajarse, torear con el mentón, ceñido, arrebujao, sin perder pasos y con un embroque que no puede ser más estético y ajustado.

    3. El que más se parece a Pepe Luis es Juan Ortega en colocación y Pablo Aguado en naturalidad. Y yo aquí he sido (además de quién más los he visto) sus máximos defensores. Así que los paniaguados de Pepe Luis Vázquez Silva y la abstracción, que se pongan a la cola.


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    1. Menos mal que no has salido a defender el toreo actual retorcido y ayuno de naturalidad y te has limitado al morantismo. Al no hacerlo deduzco que en eso estaremos de acuerdo aunque vete a saber...

      He comentado mil veces que a la emoción en el toreo se puede llegar por la épica o por la estética. Yo prefiero la primera pero jamás he despreciado la segunda aunque sea ante el medio toro. La prueba es lo bien que he hablado siempre de Curro o recientemente de Aguado y sus verónicas, aún insuperadas esta temporada ni por Morante ni por nadie:

      https://toreoenredhondo.blogspot.com/2024/03/aguado-ortega-1-0.html?m=1

      Esas alabanzas mías a la estética ante el borrego me han costado críticas parecidas a éstas tuyas y no sólo de manchegos. Lo que pasa es que me las han dicho de palabra y no por aquí.

      Alabar el toreo de Morante ante el norit ya me cuesta más porque siempre lo he visto demasiado pensado, como digo en la entrada. Además, cuando echa la pierna atrás y abre la puerta al toro demuestra que sabe destorear como el peor y por ahí no paso aunque se conjure contra mí toda la legión morantista. Esos ratimagos no se le ven jamás a Pepe Luis aunque ambos tengan delante la ternera.

      No obstante, también he alabado al de La Puebla, como en la entrada que enlazo abajo. Lo que pasa es que aquí nos acordamos sólo de lo que nos interesa.

      Ah, y si del meñique de Morante te salen (a ti) cien pepeluises, espero que cuando se muera Curro seas un poco menos feligrés y de ese mismo meñique moranteño te salgan solamente cincuenta curros.

      Saludos

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    2. Yo no defiendo el toreo retorcido ayuno de naturalidad. Lo que hago yo (modestamente) es (como Paul Johnson, Orwell, Hitchens...) Tratar de mirar las cosas una a una, no aplicar la doxa.

      Y como haría Johnson:

      Punto 1. R, deberías saber que a mi no me gusta el toreo con la pierna retrasada. Me parece antiestético y antinatural. Soy y he sido siempre partidario del toreo de pata p'alante. Ahí está todo lo que he escrito al respecto en los sitios en los que he colaborado y en los comentarios de tu blog.

      Pero vamos a ver, vamos a mirar las cosas una a una:

      Punto 2. Si cargar la suerte en la ligazón (toreo moderno) es reducir el espacio entre toro y torero en cada pase conquistando el terreno del toro, apretándose y sometiéndolo tanto en su conducción como en a partir de donde ésta se hace (la colocación del torero respecto al toro).

      Punto 3. Eso Roca Rey lo logra colocando la pierna de entrada entre los pitones del toro, pese a que ésta venga de estar retrasada. Además está en la rectitud del toro y al dar el siguiente pase el torero tiene que desviar al toro de esa rectitud natural para salvar dicha pierna (es decir, reduce el espacio, conquista el terreno del toro, está cada vez más cerca, en rectitud y lo somete en su trayectoria). Lo que ocurre en el toreo ortodoxo con la pierna de salida, que es el elemento en el que donde gravita la "carga de la suerte" y la belleza en el toreo ortodoxo, sucede aquí con la pierna de entrada.

      ¿Es antiestético? Sí ¿No arriesga la pierna de salida? No. ¿Es emocionante? Sí ¿Hay sometimiento? Sí. ¿Carga la suerte a partir de su definición en el punto 1? Sí.

      Mirar las cosas una a una.

      Saludos.

      PDT: Siento tener que poner esto aquí en el artículo dedicado a Pepe Luis, pero no he tenido más remedio.

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  6. https://toreoenredhondo.blogspot.com/2018/08/las-piernas-de-morante-en-huelva.html?m=1

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  7. PUNTO 1. Totalmente de Acuerdo.

    PUNTO 2. Creo que también estoy de acuerdo aunque la redacción no está clara. Veo la subordinada condicional pero no la principal (?)

    PUNTO 3. Roca no reduce el espacio porque torea tirando lineas. Ortega sí lo reduce. Con Roca el de pecho nunca es obligado sino que es por aburrimiento. No niego que demuestra valor dejando la pierna de entrada ahí aunque esconda la de salida. El mismo valor que Simón, Juli, Perera, etc. ni más ni menos.

    A las preguntas finales:

    ¿Arriesga la pierna de salida? Ni de broma
    ¿Antiestetico? Por supuesto
    ¿Emocionante? Psé. Para mí indignante.
    ¿Carga la suerte? No, tal como yo lo entiendo.

    Ojalá leyera todo esto el bueno de Pepe Luis y pudiera intervenir como juez de paz para dar y quitar razones. Yo me sometería muy gustoso a su veredicto.

    Saludos

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  8. Yo veo muy poco a Morante, pero siempre noto que responde a algo estudiado y pensado cayendo en lo teatral, por lo que resulta forzado, cargante, artificioso e incluso exagerado.

    En Pepe Luís no observo nada más que el torero que sabe torear, y torea sin pretensiones de dar lecciones de tauromaquia añeja ni de nada.
    Coincido con Rafa que solo capto en Pablo Aguado la naturalidad, el saber torear y hacerlo porque le fluye solo ( también es consabido a qué tipo de toro).

    Muy interesante lo comentado entre Joan y Rafa; este blog es un gustazo.

    Un saludo.

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    1. Ya ve que a veces los comentarios derivan en un combate a espada en plan Basil Rathbone contra Tyrone Power.

      Celebro que usted y yo tengamos la misma impresión de la forma de torear de Morante. Pero vaya usted con cuidado porque la legión morantista nunca duerme y se le pueden tirar a la carótida.

      Y perfecta su definición en tres líneas del toreo de Pepe Luis.

      Saludos

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  9. El torero tiene que torear relajado, sintiendo las plantas de los pies, hacerlo de forma natural, vertical y moviendo los trapos con gracia y salero… estos toreros que se estiran de forma exagerada, estos aspavientos, esas posturas forzadas y antinaturales, le llaman tecnica y yo veo cuento.

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    1. Esos retorcimientos son un tifus que se va extendiendo porque se copian unos a otros. Como en el telonazo o en las faenas larguísimas y hoteleras.

      Saludos

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  10. Ya solo por ver alguien torear sin retorcerse, merece la pena. Más estética que mando, en el caso de Pepe Luis hijo, pero da gusto. Vaya estirpe los Vázquez.

    Aguado podría ser el nieto. Tiene la llave, pero no da ese paso adelante para convertirse en lo que quiera.

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    1. A veces llego a pensar que Aguado no anda sobrado ni de valor ni de ambición. Quizá ésa sea la razón de no dar el paso.

      Saludos

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