Hubo una batalla en el tendido donde lucharon los cabales, que protestaban tanto la flojedad de los toros como el trasteo especialmente de Manzanares y Castella, contra los orejiles, cuyo triunfalismo resulta ya estomagante.
Bajo la presidencia de don Eutimio, el tendido se convirtió en un campo de Agramante, donde contendieron los espectadores afortunadamente sólo a gritos, que sepamos. De esas disputas se benefició Castella como explicaremos después.
Los jandillitas quisieron pero no pudieron. Tenían buena condición y estaban en puntas pero no se aguantaban de pie. Eso provocó malestar en los tendidos con gritos de ¡fuera del palco! y agrias discusiones entre aficionados que los amigos presentes nos podrán aclarar en los comentarios. Todos los toros se frenaron ante los burladeros, no recordamos ninguno rematando contra la madera.
Los lectores más fieles saben que aquí hemos recordado en ocasiones la frase de Fernando Domecq cuando decía que el toro de lidia tenía que ser un animal culipollo por definición y que esos músculos o esa grasa que se le había metido iba en contra de lo que en origen fue este animal. Recordamos esto precisamente porque los seis toros salieron bien ajamonados, como comprobarán en las fotos del maestro Moore.
CASTELLA. Su primero era este toro negro que al citado Fernando Domecq no hubiera gustado ni un pelo por lo antedicho del jamón, vean:
Por motivos laborales no pudimos ver ayer la corrida en directo. La hemos repasado hoy por la mañana pero poco podemos hablar de esta primera lidia ya que el vídeo de Mundotoro está mal enlazado y no es la primera vez. Arranca en los últimos pases de la faena del francés donde se ve que el toro va y viene de manera simplona antes de recibir una estocada caída y trasera metiendo la mano a capón. Matando de esta guisa lleva cinco puertas grandes en la que dicen que es la primera plaza del mundo:
Su segundo se llamaba Rociero y era negro, también ajamonado de atrás, con muy poco cuello y bien encornado. Cepeda dijo que la cara que tenía era mu buena:
En el primero le señalan atrás y en el segundo directamente en el lomo. El simulacro en varas venía dado porque pasada la mitad de la corrida se veía que los jandillitas no se aguantaban de pie.
Bien Viotti clavando, Aguado quitando y Chacón bregando. Se escuchó una lamentación pueblerina desde el tendido cuando la montera cayó boca arriba tras su brindis.
El inicio fue por cuentos chinos, que es el origen del nombre del celeste imperio. Intentaba con ello que el animal no se viniese al suelo pero no lo conseguía. No obstante, tras la primera tanda quedó clarísimo que era el tipo de toro que, con el triunfalismo imperante, permitiría cortar una oreja siempre que no besase el suelo.
Faena hotelera del francés permanentemente de perfil, con un animal de los que antiguamente se decía que se toreaba solo.
Tras una sobredosis de derechismo, no es que viese que por el pitón izquierdo era dulce de higo, ¡es que por ahí tendría que haber comenzado! Pero es lo que tiene venir del hotel con la monotonía premeditada de repetir siempre la misma faena. En el tendido seguían las discusiones mientras los que aplaudían se hacían daño en las manos para esforzarse por acallar a los protestantes. De eso se terminó beneficiando el maestro. Incluso lo aplaudieron tras un desarme. Vean que el animal se viene abajo incluso en un pase pecho:
Lo de toro bravo y encastado que se dijo en televisión nos pareció un poco exagerado. Acierta al armarse en la suerte natural y deja una estocada hasta la tela, tendida y pasada, con su típico y desagradable saltito en el embroque. ¿Qué diría Rafael Ortega al ver que se puede cortar dos orejas en Madrid matando así?
Penosa la actitud del diestro yéndose corriendo al platillo antes de que el toro muriese. Ahí se vio hasta qué punto desprecia a quien le da de comer. La primera oreja era innegable pero la segunda estaba en manos de don Eutimio, con lo cual ya pueden suponer que la regaló. En televisión pidieron hasta el azul... Por cierto, el tal Rociero dejó en evidencia a quienes repiten ese lugar común de que los toros sin cuello no embisten bien.
MANZANARES. Su primero era un toro negro bragado, con poco cuello, cornilevantado, casi veleto y un poco ensillado:
Nada reseñable en el caballo como no fuese que el toro blandeó a la salida del primero y en el segundo la gran sorpresa fue que el picador le pegó como si le debiera dinero.
El toro quería pero no podía porque tenía las patas de cristal. Manzanares se iba apartando del viaje para no quebrantarlo más intentando que no se le derrumbase pero nos tendría que explicar a santo de qué ordenó que le pegasen esa paliza en varas. Con su pan se lo coma. Fíjense en su muleta XXXL. Y entre el toro y el maestro cabe un camión de bomberos:
Espadazo aterrador perfilándose muy lejos, pegando el telonazo y clavando atrás y abajo:
Su segundo era un toro negro azabache, lustroso, serio y regordío:
Tardeó en el primero pero luego puso ganas en el empuje aunque con un solo pitón. Nada en el segundo.
El toro se dolió de los palos y se aquerenció en tablas. Manzanares anduvo por allí pegando zapatillazos para ver si el de Jandilla se decidía a embestir pero no hubo manera y encima se puso pesadísimo, el diestro, nos referimos.
Acierta perfilándose en la suerte contraria pero se escupe y pincha por entrar sin fe. Insiste en la contraria para enterrar la espada hasta el arriaz en la puerta de chiqueros. Para nuestro gusto entró demasiado acelerado y tapando la cara aunque no clavó en mal sitio:
AGUADO. Su primero era un castaño muy oscuro, ligeramente bizco del izquierdo, enmorrillado, bragado y meano:
Empuja bien en el primero a pesar del intento de carioca. Al segundo va desde lejos para que le señalen y ruede por el suelo cuando sale suelto. Protestas ruidosas que se recrudecieron al ver el pañuelo blanco y no el verde. Continuaba el maremágnum en los tendidos.
Al primer pase se vino al suelo incluso dándole la salida por arriba. El tal Secretario daba pena porque era otro que quería pero no podía. Aguado trató al toro como si fuese un médico en la UCI y enseñó el pico más de la cuenta. Es un vicio que no se quita de encima:
Media un poco pasada clavando con habilidad que bastó:
El sexto llevaba el hierro de Vegahermosa y era un negro lombardo, corniapretado, bizco del izquierdo, badanudo y apretado de carnes:
Lo pone bien en el primero y el toro se viene arriba protagonizando un buen batacazo, el mejor en lo que llevamos de feria (bueno, creemos que han sido sólo tres, o sea que poco hay que comparar). Es muy de agradecer que Aguado lo volviera a dejar bien colocado y el toro volviera a meter los riñones. Pero el de la banda del castoreño hizo lo que acostumbran tras haber sido derribados, que es intentar partir el toro por la mitad de forma abyecta.
Fue una lástima no haberlo visto bien de largo en una tercera entrada pero no se olviden de que estamos en Madrid y eso sería pedir la luna. Mellinas puso un muy buen par, igual que el segundo de Sierra. En televisión recalcaron que habían cuadrado en la cara por eso nos extraña mucho que callen cuando se clava a toro pasado...
Aguado mantenía la mano alta porque era otro toro que quería y no podía pero en el pecado llevaba la penitencia. Lo decimos porque al no obligarlo, el toro se ponía farruco y pegaba la cabezada. En el toreo de tiralíneas del sevillano esa circunstancia es letal.
Tiene el defecto de no usar la izquierda para descubrir la muerte, de ahí que su única solución sea alargar el brazo con habilidad. Esta vez no le salió la jugada como en el toro anterior y pegó cuatro pinchazos que el toro escupió más dos descabellos.
Terminó la fiesta con la juventud filmándose con los móviles detrás de un Castella en hombros para presumir después en las redes. Pero, realmente, ¿qué queda para el recuerdo tras esta corrida?
Otra pregunta.
Saludos cordiales desde Tarragona. Rafa.
ResponderEliminarBuenas tardes, Don Rafael y la compaña:
No sabría definir su postura de tragarse lo de ayer en diferido; desde luego, si tenía usted acumulado algo de mal karma cósmico, delo por equilibrado con haber escrito esta entrada.
A Manzanares y Aguado creo que ni los vi, o quizás los he olvidado, no sé.
Castella tuvo suerte y le tocó la bolita del cuarto, aunque estoy muy de acuerdo con el comentario que hizo de la Cámara: el toro tenía seda en el pitón izquierdo, pero el francés se apresuró a formar el gazpacho y a meterse entre los pitones, en lugar de haber exprimido las dos o tres series más que podía habernos regalado Toreando al natural.
¿La espada? Pues.. "mediopensionista", estaba trasera, con lo cual podría el usía haberse puesto farruco y negar la segunda, pero en esta tauromaquia no sorprende ni indigna que la concediera.
Cuídese y no prodigue excesos como el de ver lo de ayer en diferido, que no le traerán nada bueno para su salud.
Saludos a usted y a los selectos lectores del blog.
P.S. Otra pregunta: ¿Qué le están dando (o quitando) de comer a los toros este año, que ruedan casi todos por el suelo?
Habré visto unas 10 de lo que llevamos de San Isidro y a mí también me llama la atención la cantidad de toros que "quieren pero no pueden" y de toros que se caen directamente al suelo. La 1ª postura es en la que más pena da un animal bravo, humanizándolos, esa frustración que "sentirán"...
EliminarDe los 6 de Escolar no se pareció ni uno a los 3 de SA Guadalix, del resto de ganaderías ni hablo.
Alimentación costosa? Manejo? Imposiciones? Una mezcla de las tres? Igual mejor no saberlo, pero la palabra es pena.
Respecto a la pregunta hay diferentes teorías pero la cuestión es que el verde casi no se ve.
ResponderEliminarA mí sí que me sigue indignando esta tauromaquia donde se desprecia la suerte de matar y con un toreo para mi gusto bastante vulgar como el del francés, se abre la puerta grande con tanta facilidad.
Espero no acusar el exceso cometido tragándome este plúmbeo diferido. Como hoy hay rejones dispondré de unas cuantas horas para recuperarme.
Saludos
Pregunta a Curro:
ResponderEliminarPerdone pero es que antes he olvidado preguntarle qué queda de aquel Aguado que usted justo hoy hace cuatro años nos comparaba con el bacalao de Barea. Dígame a ver si sigue suscribiendo aquellas palabras que le copio a continuación:
"Mire Rafa, en Sevilla se adora el bacalao, pero en casi todos sitios te ponen maruca, o lomitos ínfimos, o desmigado, o ventresca.. si quieres el lomo de bacalao "pa que repiquen a gloria las campanas gordas de tu cocina" tienes que ir a comprarlo a Barea, porque es el único que lo tiene; Aguado tiene EL BACALAO, el que no tienen los demás, porque al probar el suyo te das cuenta de que te han estado vendiendo otra cosa; luego habrá que ver las veces que quiere y puede venderlo al público. Como dice mi amigo Justo, creo que le van a servir muchos toros "modernos", porque no les baja la mano y habrá muchos que no se le caigan, que con eso ya tiene bastante para vender su bacalao"
Saludos
Lo que pienso, a día de hoy, es que tiene agotado el crédito de las 4 orejas de Sevilla y las ¿2? de Madrid. Le veo a verlas venir, dejando pasar toro tras toro sin hacer ni decir nada. Allá él, pero sin duda el que tiene el duro en la mano es el que puede cambiarlo, y él tiene el duro y el bacalao.
ResponderEliminarLa increíble historia de los trastos de torear crecientes. Cada temporada que pasa, el capote y la muleta de de Manzanares Jr, aumentan de tamaño. Lo que se debe gastar en franela al corte. Solo con la muleta podría techar el nuevo Bernabéu, y ahorrar unos euros con el techo retráctil. Increíble. En general, no se puede dar más ventajas toreando. Se los pasa muy lejos, y con esas telas, aún tiene más delito.
ResponderEliminarSobre las dos orejas de Castella, y visto el nivel que se gasta la plaza últimamente… Petición mayoritaria, y todo el 7 aplaudiendo y sin que se oyeran apenas quejas a la concesión de ambos apéndices… Ahí lo dejo. Meritoria la tanda con la mano izquierda bajo mi punto de vista. Error del francés de no basar la faena sobre ese pitón.
En otros tiempos, a toros con tan escasas fuerzas (se pidió insistentemente la devolución del cuarto) apenas se les deba importancia a lo que se hacía con ellos. Imposible cortar orejas. Ahora todo es posible.
Aguado muy pesado con su primero. Estaba el toro más muerto que vivo, sin un gramo de fuerza durante toda la lidia. Faena larga, de auténtico celador de La Paz y además se puso digno al final de la misma haciendo un desplante al cornupeta zombi. Con lo esperado y la expectación que creaba hace cuatro años, y lo plúmbeo que le veo ahora… Difícil remontada.
Saludos desde Madrid.
Rulan
¡Sí! Cuando vi ese desplante ridículo pensé: 'pero, ¿qué haces?'
EliminarNo me puedo creer que toda la plaza diese por buenas las dos orejas a Castella. Por supuesto que me lo creo si usted me lo dice pero me quedo de piedra.
Tanto Aguado como Manzanares alargaron las faenas sin piedad dando una tabarra insoportable.
Saludos
Así fue, no hubo protesta, y la petición seguía siendo mayoritaria una vez concedida la primera oreja. Por un momento, visto el fervor, hasta temí que a Eutemio se le volviera a escapar el azul.
ResponderEliminarGracias por sus crónicas.
Saludos,
Rulan
Pues entonces la plaza está incluso peor de lo que parece por televisión. Y lo del azul, por ganas de los televisivos no quedó, con un tercio de varas que fue un simulacro pero decían que si el de Garcigrande había sido azuleado, a ver éste por qué no. A eso es difícil responder. El problema es poner el nivel de exigencia bajo mínimos.
EliminarMenudo panorama... Saludos.
Yo también vi la corrida en televisión, pero en Telemadrid. La misma murga, la misma monserga de siempre. Sólo hablando de lo positivo, según ellos, y echando la culpa al toro de todo lo malo que pueda acontecer en el ruedo. Excepción de la colocación de las estocadas en las que Sixto Naranjo dice claramente cómo son. Pero lo que son Villasuso y Encabo, más de lo mismo.
ResponderEliminarEl cáncer de la fiesta está en los tendidos. Con unos tendidos sabios nada de esto pasaría. Ayer hablaba con un acomodador de la plaza y me decía: "llevo más de 20 años en la plaza y veo que cada vez hay menos gente que sepa de toros". Aduje que lógicamente van muriendo los ancianos y los que entran son aleccionados por todos estos apesebrados comentaristas adalides del triunfalismo.
Quédate con esto, el 7 ha regalado muchas orejas en la plaza. No porque saquen los pañuelos sino porque la gente se pone en contra de ellos y sacan el pañuelo para fastidiar, aunque la faena no sea cosa del otro jueves.
Saludos de un aficionado venteño.
Desde pequeño comprobé una cosa respecto al tendido siete: cuando aplauden, arrastran a toda la plaza como a un corderillo pero cuando protestan, a veces el resto se calla y otras les plantan cara y sucede lo de ayer.
EliminarParecía claro que las tremendas ovaciones eran al cincuenta por ciento para el diestro y contra el siete, no al 100% por Castella. Lo realmente sorprendente es que toda la plaza tragase con esas dos orejas como nos dice el amigo Rulan.
Y estamos totalmente de acuerdo en que el problema está en el tendido, que está ciego y es guiado por los tuertos, que son los apesebrados.
Saludos
Los del 7 y de hace tiempo son monjitas de la caridad .. como le dijo Sánchez vara a Tomás prieto de la cal en la corrida de Reta en San Agustín pidiendo una monjita de prieto de la cal cuando se enfrentó a aquel conejo cabron de reta .. viven de las rentas y no pintan nada su constatación fue cuando se subieron al barco taurino y empezaron a invitar a sus tertulias a los mayores enemigos de la fiesta y le rieron incluso las gracias ( a Morante , El Juli , Justo Hernández ) ... Al enemigo ni agua .. pero luego te los encuentras en pie en la plaza venerando al Julián .. muchos de esos cuando se ponen el polo de 3 puyazos se vuelven más exigentes y toristas .. me imagino que estarán hasta los cojones de la asociación el toro de Madrid.. que en su día fue el gran valedor del toro y su autenticidad en la fiesta y fiel y aguerrido guardián en su plaza .. a día de hoy solo vocean , han caído dentro de ese barco y los que se tiraron de el están ya fallecidos .. el cáncer está en todos los tendidos y el tejido del 7 está también enfermo .. acojonante lo que cuenta rulan .. donde quedó lo de medir una faena según el oponente ? Eso no va en contra de las últimas pancartas suyas de NO AL TRIUNFALISMO ? Un saludo, Iván!!!
ResponderEliminarPues sí, el panorama parece bastante desolador. En televisión daba la impresión de lo que he puesto en el titular, es decir, de una batalla entre la afición seria y la del clavel. No obstante da la impresión por lo visto de que ahí todo el mundo lleva clavel más o menos grande.
EliminarDa usted en la diana cuando habla de medir la calidad de una faena en virtud del oponente. Parece algo que ha pasado a la historia.
Saludos
Un dato a tener muy en cuenta me lo comunica por privado un amigo que estuvo presente. Es que los viernes de corrida hay que darlos por perdidos desde el punto de vista de la seriedad porque los efluvios alcohólicos se extienden imparables por el ambiente. Esa es una circunstancia que desde casa pasa desapercibida.
ResponderEliminarLa plaza de Las Ventas está completamente enloquecida. Eso incluye al siete. Después de protestar por el ganado, con razón, aplaudieron a rabiar la faena de Castella. Mi vecino de localidad, Antonio, 45 años de abonado en el 7, protestó las dos orejas en solitario, dando las palmas de tango que le permite la edad, flojitas pero de gran dignidad en su soledad. Yo estaba con mi hija. No somos de ninguna asociación, solo aficionados. No dábamos crédito, no entendíamos nada. Es un absoluto loquero, 7 incluido.
ResponderEliminarPor televisión yo estaba pendiente de las palmitas de tango cuando se parase la euforia de las dos orejas y como no oía más que aplausos pensé que los micrófonos no las habían captado. Por lo que me cuenta era muy difícil que se captase la dignidad del bueno de Antonio a quien hará usted el favor de saludar de mi parte.
EliminarSaludos
No se si sera legal pero hay que prohibir la venta de alcohol en la plaza.
ResponderEliminar¿Como debemos llamar a los toros que en el caballo no hacen una gran pelea pero se van creciendo en banderillas y llegan a la muleta mostrando una gran embestida que practicamente arrolla al torero? Sobre todo los de Nuñez y Domecq porque los de otros encastes si llegan con esas caracteristicas a la muleta es que han hecho buena pelea en el caballo y ademas son mas complicados porque no solo arrollan si no que también desarrollan sentido y se revuelven rapido al final del muletazo
Saludos desde Murcia
Corrochano los llamaba Bravitos. Si en el último tercio van teniendo tendencia a apretar hacia adentro y no hacia afuera estaríamos ante lo que Álvarez Vara denominó Mansibravos.
EliminarSaludos
"'Matando de esta guisa [Castañeda] lleva cinco puertas grandes en la que dicen que es la primera plaza del mundo...'
ResponderEliminar'¿Qué diría Rafael Ortega al ver que se puede cortar dos orejas en Madrid matando así?' [Castañeda, de nuevo]"
'Amargo, horrendo y vergonzoso.' -- R. Ortega D., Matador Magnus.
Primero el maestro isleño diría que tendría que ser una broma de muy mal gusto; mas al comprobar en persona semejante injusticia e insensatez, saltaría al ruedo con toda su edad y cuerpo senil para exigirle (severo) al francés que le entregase muleta y estoque... ¡y que pusiese atención a la lección o adiós coleta, Sebastián!
Ahora queda preguntarnos qué diría Castañeda ante una amonestación tal. Además de quedar boquiabierto y embobado. // Atte., Torotino
Le diría con chulería que no hay ninguna necesidad de arriesgar haciendo las cosas bien cuando se puede uno aliviar sin que haya nadie que te llame la atención, ni en el tendido ni en los papeles al día siguiente.
EliminarSaludos
Bienquerido R.
ResponderEliminarJe m'accuse.
Te escribo ya a última hora, avergonzado y acobardado, a punto de que suene la campana, para decirte que me gustó la corrida de Jandilla. Que el cuarto (y tercero) pese a no ser picados me parecieron bravos. Que si tuviese una ganadería le echaba a las vacas ese cuarto. Que se creció en la puya y embistió con cojones a una mosca.
Ay, uno es él mismo y sus contradicciones.
También decir que Manzanares en su recibo al quinto firmó las mejores verónicas de la feria. Un viejo aficionado, frascuelista, me enseñó que las buenas verónicas se dan con el toro embistiendo al medio del capote y no a los vuelos. Ahí queda eso.
Castella, estuvo muy por debajo de su toro. Desordenado, enganchado, desacoplado, desaprovechando el pitón izquierdo del toro, pero firmó los mejores muletazo de lo que va de feria en una tanda de naturales, templados y reunidos.
De Aguado apenas se sabe. Desaparecido.
Sigue ciego tu camino.
J
Me fijé en alguna de esas verónicas. Lo de la panza es verdad y por aquí se ha dicho más de una vez pero ese capote tan grande hace que todo pierda verdad. De todas formas, llevamos más de 50 toros y ¿cuántas verónicas medio buenas? Es desolador.
EliminarYo debía de tener mal día con esos naturales 'castellanos' pero es que lo que me dejó frío fueron sus perfilerías y su faena hotelera.
Entre nosotros: sabía que te gustaría alguno de los toros pero lo del cuarto en varas fue un simulacro, no me bajo del burro.
Saludos.